Home

Noticias

Artículo

Concluye huelga de maestros

Se calcula que 8,5 millones de estudiantes perdieron sus clases mientras apoyaban el paro de unos 280.000 educadores,

2 de junio de 2007

Bogotá_ Un paro de educadores que mantenía por décimo día a más de ocho millones de estudiantes colombianos fuera de sus aulas concluyó el viernes después de que el sindicato de maestros decidió dialogar con el gobierno.

Sin embargo, la junta directiva de la Federación Nacional de Educadores (FECODE) se declaró en estado de alerta.

El gobierno del presidente Alvaro Uribe aseguró la víspera que sólo dialogaría con ellos si levantaban la huelga convocada desde el pasado 23 de mayo en todo el país.

Se calcula que 8,5 millones de estudiantes perdieron sus clases mientras apoyaban el paro de unos 280.000 educadores, quienes alegan que una reforma a las transferencias del gobierno central a las regiones los dejará sin unos 25.000 millones de dólares destinados a servicios públicos del 2008 al 2016.

La ministra de Educación María Vélez indicó que el gobierno aumentará en unos 770 millones de dólares los recursos para la educación en el mismo periodo, por lo que la presión que ejercieron los maestros en los últimos 10 días no era necesaria.

"Ratificamos nuestra disposición al diálogo y esperamos que el gobierno nacional cumpla la palabra empeñada de reiniciar conversaciones tan pronto los niños estén en clases", dijo Witney Chávez, presidente de FECODE, en declaraciones al telenoticiero Caracol.

El secretario de Educación de Bogotá, Abel Rodríguez, anunció el jueves que si los maestros no suspendían la huelga, adelantaría las vacaciones escolares de mitad de año.

Durante las protestas en las calles los líderes del magisterio lograron reunir en Bogotá a unas 100.000 personas, que marcharon por las principales vías de esta capital y provocaron un caos vehicular sin precedentes en la ciudad.

La ley de transferencias está a un debate en el congreso para ser aprobada la semana que viene.

Algunos congresistas de la oposición dicen que la ley le quitará recursos a la salud y la educación para que sean destinados a las fuerzas militares, argumento que el presidente Uribe ha rechazado.

 

 

 

AP