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Colombia explicará en Copenhague ventajas de Familias Guardabosques para proteger la selva

Colombia presentará el programa Familias Guardabosques como una iniciativa digna de ser masificada debido a su potencial como instrumento eficaz para proteger la selva en el mundo.

16 de diciembre de 2009

Bogotá, -  Así lo anunció este martes el presidente Álvaro Uribe Vélez en la alocución radiotelevisada a los colombianos sobre la Convención para el Cambio Climático que se realiza en Copenhague, evento en el cual participará el Mandatario a partir de este miércoles

“Vamos a presentar este programa como un programa bien importante para ser masificado, a fin de proteger la selva en todo el planeta”, dijo el Presidente Uribe, luego de informar que alrededor de 90 mil familias de áreas rurales han sido vinculadas a esta estrategia en el país, cuyo propósito es enfrentar “el gran enemigo de la selva que es el narcotráfico”.

Uribe Vélez precisó que las Familias Guardabosques asumen el compromiso de mantener las áreas libres de cultivos ilícitos y de recuperar los bosques destruidos por la acción del narcotráfico, a cambio de lo cual reciben un pago del Estado colombiano. La supervisión de esta tarea corre por cuenta de las Naciones Unidas.

De acuerdo con el Jefe de Estado, en materia de lucha contra el cambio climático “Colombia ha hecho un gran esfuerzo, pero le vamos a pedir al mundo que el esfuerzo de todos tiene que ser superior. Quien pide, tiene que aportar. Nosotros estamos dispuestos a hacer nuestro aporte”, sostuvo.

Durante su alocución por los canales de televisión públicos y privados, el Presidente consideró que el tema del cambio climático que se trata en Conpenhague, Dinamarca, no es de menor cuantía sino de gran importancia, porque el mundo está definiendo el tipo de planeta que va a legar a las nuevas generaciones.

Uribe Vélez hizo un recuento de los esfuerzos hechos por el país en esta materia, señalando que Colombia ha sido cuidadoso, “poco daño hace” y “se perjudica muchísimo” por causa de los efectos del cambio climático.

Entre los esfuerzos del país citó: “Colombia, por cada punto del Producto, produce 250 toneladas de emisiones; en América del Sur, 280; en el mundo el promedio es superior a 400 toneladas de emisiones por cada punto del Producto”.

Y agregó: “Nosotros tenemos grandes riesgos en la Colombia insular, en nuestras costas, en nuestros picos nevados; grandes riesgos en nuestra agricultura. Poco contribuimos a las emisiones, comparativamente. Mientras le aportamos al Producto del mundo el 0,5 por ciento, a las emisiones le aportamos menos: el 0,37. Pero mucho, mucho, nos perjudicamos”.

Indicó además que Colombia ha sustraído del comercio, por razones ambientales, el 40% del territorio. El 52 % del territorio nacional está en selva. “Mantener esta selva, protegerla, es nuestro gran compromiso en materia de contribución para evitar los efectos desastrosos del cambio climático”, señaló.

Se refirió también al hecho de que casi un 11 % del territorio nacional esté en reservas, lo cual es una “gran carta de presentación ante la comunidad ambiental del mundo”.

Recordó que el país está haciendo una inversión enorme, a través de Ecopetrol, para actualizar las refinerías y reducir de manera esencial las partículas de azufre en la gasolina.

“Un altísimo porcentaje de la energía que genera nuestra Patria es energía hidroeléctrica. El mundo puede tener la certeza de que nuestro avance en biocombustibles tiene dos restricciones: no puede ser a expensas de la seguridad alimentaria ni se puede destruir un milímetro cuadrado de selva”, afirmó.

Los sistemas de transporte masivo, financiados en un 70 % por el Gobierno Nacional; la construcción de siete pueblos para comunidades indígenas en la Sierra Nevada de Santa Marta, y la entrega de tierras a indígenas y afrocolombianos, fueron otros de los esfuerzos del país que mencionó el Jefe de Estado.

Uribe Vélez, quien viajó este martes a Copenhague para participar en la Convención para el Cambio Climático, consideró que dicha reunión mundial “está obligada a darle una respuesta seria a las nuevas generaciones del planeta”.

“Por eso –concluyó–, los países desarrollados tienen que hacer el mayor esfuerzo en materia de reducción de emisiones. Y nosotros estamos dispuestos a apoyar ese tema, y también estamos dispuestos a no quedarnos atrás en materia de superiores esfuerzos”.


(SP).