Home

Noticias

Artículo

Banco central de Irlanda dice que espera gran préstamo de UE-FMI

Irlanda insistió el jueves que su bajo impuesto corporativo no es negociable mientras discute un paquete de ayuda que ascendería a miles de millones de euros de sus socios europeos y del FMI, para dar capital de contingencia a sus alicaídos bancos.

19 de noviembre de 2010

Dublín.- En una señal sobre la dificultad de las futuras negociaciones, Francia dijo que Irlanda podría tener que elevar su bajo impuesto corporativo del 12,5% a cambio del paquete de ayuda.

Pero la viceprimer ministra irlandesa, Mary Coughlan, dijo al Parlamento que el Gobierno no elevaría la tasa de impuestos a las empresas. "Esto no es negociable", dijo.

El ministro irlandés de Asuntos Europeos, Dick Roche, hizo eco de sus palabras, indicando que, "eso ciertamente no es negociable".

"Hemos visto una plática muy poco útil en los últimos días sobre nuestro impuesto a la ganancia corporativa. ¿Cuál sería el sentido de destruir uno de los principales motores del crecimiento?", dijo a la cadena de televisión BBC.

Gran Bretaña y Alemania han visto por largo tiempo los bajos impuestos de Irlanda como una forma de competencia injusta y los ministros de Finanzas de Austria y Francia dijeron que los impuestos corporativos podrían tener que ser elevados como parte de un acuerdo.

Funcionarios de la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional (FMI) visitaron Dublín el jueves para sostener discusiones sobre un posible paquete de rescate.

"Estamos hablando sobre un préstamo muy sustancial, eso seguro (...) de decenas de miles de millones (de euros)", indicó el jefe del banco central irlandés, Patrick Honohan,, admitiendo que ha habido sustanciales salidas de fondos del sector bancario irlandés desde abril.

El ministro de Finanzas Brian Lenihan dijo al Parlamento que el Gobierno aún no llegaba al punto de establecer una cifra sobre el monto requerido. Pero lo que estaba en discusión era "capital de contingencia sustancial para respaldar a Irlanda".

Lenihan dijo que la UE y el FMI no tendrían ninguna participación en las medidas de presupuesto de Irlanda, aún cuando las normas de la UE estipulan que cualquier préstamo de emergencia sólo puede entregarse a un Gobierno que firme un estricto acuerdo fiscal.

En un intento por tranquilizar a los ahorristas, Lenihan dijo que el Gobierno estaba extendiendo una garantía sin límites para los ahorristas hasta fines del próximo año, seis meses más de lo anunciado inicialmente.

Tras 10 días de pérdidas, las acciones europeas, los mercados de la deuda de la región y el euro rebotaron el jueves ante la expectativa de que Irlanda se pudiera convertir en el segundo país en la zona euro, después de Grecia, en recibir un rescate para hacer frente a su deuda.

Los costos de endeudamiento de Dublín se han disparado desde fines de octubre por preocupaciones ante la creciente deuda del sector bancario del país. Además, las presiones de Alemania por crear un sistema de reestructuración de deudas de los países de la zona euro en problemas mantiene nerviosos a los inversionistas.

Pesadillas

El jefe ejecutivo del banco más grande de Italia, Federico Ghizzoni de UniCredit, dijo haber tenido "pesadillas" sobre la crisis de la zona euro y estaba preocupado sobre la capacidad de Europa de encarar con urgencia los problemas de deuda soberana.

"Estoy preocupado sobre el hecho de que si no es enfrentado adecuadamente, seguirá en el mercado, generando volatilidad", dijo Ghizzoni a periodistas en Fráncfort.

Por su parte, el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, manifestó sus temores sobre la dependencia que podría generarse a las medidas de liquidez del BCE a medida que las condiciones se normalizan.

Los bancos irlandeses, que se han visto marginados casi completamente de los mercados de capital debido a los temores sobre su solvencia, dependen casi por completo de los fondos del BCE, que a fines de octubre alcanzaron los 130.000 millones de euros, más 35.000 millones de euros del banco central irlandés.

Fuentes de la UE han dicho a Reuters que Irlanda podría necesitar ayuda por entre 45.000 y 90.000 millones de euros, dependiendo de si necesita asistencia sólo para sus bancos o también para su deuda pública.

Algunos analistas creen que Dublín podría estar ganando tiempo, en parte para evitar la humillación política de pedir ayuda antes de una elección especial para un escaño faltante en el Parlamento el 25 de noviembre.

Fuentes de la zona euro señalan que existe un principio de acuerdo para activar la ayuda cuando la misión complete su trabajo, y que ésta no sólo sería para los bancos.

Irlanda ha dicho que el costo de sanear su sistema bancario podría llegar a 50.000 millones de euros, pero los inversionistas temen que el costo termine siendo mayor.

 
REUTERS