Presidente Santos anuncia venta de Electricaribe en julio

Casi un año y medio después de ser intervenida por la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, a finales de julio la Electrificadora del Caribe (Electricaribe) iniciará "un proceso de mercado abierto, transparente y competitivo" en el que la empresa que distribuye energía a todo el Caribe colombiano pasará a manos de un nuevo dueño.

De acuerdo con el presidente de la República, Juan Manuel Santos, el inversionista que finalmente compre Electricaribe tendrá que demostrar "capacidad financiera y experiencia técnica para gestionar adecuadamente el plan de transformación que requiere la compañía".

El presidente Santos agregó que el informe de la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN), la banca de inversión MBA Lazard, la firma de abogados Brigard & Urrutia y la banca de inversión local Ágora, recomendó "mantener un solo mercado y no dividir la compañía en subregiones pues esto no mejora los resultados financieros por prestación de servicio a los usuarios".

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El jefe de Estado agregó que "el informe resalta que el nuevo marco tarifario introducido por la resolución Creg 015 de enero de este año tuvo un impacto positivo que permitirá remunerar las inversiones que se requieren para lograr una adecuada prestación del servicio en la región Caribe".

Cabe recordar que la Financiera de Desarrollo Nacional ya tenía un contrato con la internacional PricewaterhouseCoopers para que esta se encargue de supervisar el proceso de subasta mediante el cual se definirá el nombre del nuevo dueño de la Electrificadora del Caribe.

Mientras se lleva a cabo el proceso, se mantendrá la medida de intervención a la empresa, por lo que la Superintendencia de Servicios Públicos se mantendrá a cargo de Electricaribe mediante su equipo de liquidadores de la misma. Esto además garantizará que no se interrumpa el suministro de energía a los habitantes de la Costa Caribe.

La distribuidora de energía, que recibió orden de liquidación en marzo del año pasado, atiende 7 departamentos de la Costa Caribe, más de 23% del mercado colombiano y cerca de 10 millones de personas.

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Sin embargo, su intervenció logró equilibrar su situación financiera, mejorar levemente el recaudo, continuar la operación y mantener a raya el fantasma de un racionamiento programado por el no pago a las generadoras en apenas 7 meses.  

Para logarlo, se ordenó congelar más de $2,4 billones para los acreedores, en especial bancos, y un pasivo pensional que inicialmente se estimó en cerca de $700.000 millones pero que puede superar los $1,3 billones. Los ingresos apenas dan para el pago de la operación y no hay recursos adicionales para asegurar las inversiones que se requieren para garantizar un mejor servicio.

Aunque la gestión ha permitido mantener el servicio, no es suficiente. Las quejas se mantienen y las denuncias por problemas y deficiencias en el suministro son permanentes. El rezago que trae Electricaribe en materia de inversión es gigantesco y se requieren recursos frescos para dar mayor calidad al servicio, reducir las pérdidas de energía y garantizar una operación sostenible.

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