Home

País

Artículo

Transportadores de carga se quejan de las restricciones adoptadas por el alcalde Gustavo Petro. | Foto: Archivo Semana

Bogotá

Petro y transportadores de carga al ‘ring’

Los transportadores afirmaron que las restricciones adoptadas por la Alcaldía de Bogotá para el transporte terrestre automotor de carga resulta una medida arbitraria.

22 de noviembre de 2013

Los transportadores de carga asociados en Colfecar aseguran que la Alcaldía Mayor de Bogotá desconoció los argumentos verbales y escritos que se esgrimieron y con los que demostraban que se generaría un enorme detrimento por las restricciones adoptadas.

El decreto 520 del 13 de noviembre de 2013 restringe cinco horas hábiles diarias la circulación de vehículos tipo tracto-camión en las áreas urbanas al exterior del perímetro conformado por las calles 170, la avenida Boyacá y la avenida Primero de Mayo y a lo largo de dichas vías.

De acuerdo con el presidente de Colfecar, Jaime Sorzano, con la medida se afecta el 43% del tiempo útil de la jornada laboral. Agregó que retrasará el ingreso y salida de camiones de la ciudad, su arribo a los sitios de cargue y descargue, las labores de mantenimiento y la programación general de las actividades.

Sorzano apuntó que con la medida de restricción habrá afectación también en la vida diaria de miles de conductores y propietarios de vehículos quienes en adelante tendrán que reemplazar el tiempo familiar, el de diligencias personales y atención de su vehículo a la vigilancia de sus activos móviles donde quiera que lo afecte la limitación.

“Ninguna autoridad explicó ni respondió inquietudes relativas de los sitios donde habrán de parquearse los vehículos durante el tiempo de restricción, tanto en la ciudad como en sus ingresos por el norte, sur y oriente ya que el único corredor habilitado para el ingreso será la calle trece. Es innegable que la ciudad se verá desbordad en relación con la necesidades propias del servicio”, sostuvo.

Explicó que el solo cargue y descargue de vehículos en la ciudad entre las diez de la noche y las seis de la mañana implicará la instauración de la cultura de trabajo 24 horas durante 365 días al año lo que en su opinión, no deja de ser una utopía “porque ni industriales, comerciantes o autoridades encargadas de velar por la seguridad trabajan en jornadas nocturnas”.

Colfecar acudió a la intervención del Gobierno Nacional a través del ministerio de Transporte, a efectos de lograr una mínima concertación con las autoridades distritales.