Home

País

Artículo

Así se comportó la gasolina durante el 2013. | Foto: Archivo Semana

Gasolina

Así estuvo la gasolina en 2013

El año empezó con una bajada de $208 gracias a la Reforma Tributaria del 2012, en el año osciló ente los $8.400 y los $8.700.

27 de diciembre de 2013

El 2013 terminó una vez más sin que los colombianos tuvieran un respiro en el precio de la gasolina, si bien inició el año con una fuerte disminución, a lo largo del año el precio volvió a los niveles habituales.

En enero el precio del galón registró una disminución de $208 y hacía pensar que era posible que este año sí se viera suavizado el precio del combustible, sin embargo durante el año el precio retronó a los niveles que se conocían.

LA baja en el precio fue consecuencia de la aprobación en diciembre de 2012 de la Reforma Tributaria la cual reducía los impuestos al combustible permitiendo que al momento de calcularla el valor fuera inferior.

Así mismo se contempló los precios internacionales que para ese momento eran favorables para las empresas ya que superaban los 100 dólares logrando así que el margen del Gobierno fuera mayor.

Sin embargo la dicha duró poco y para febrero el galón registró un incremento de $131,4. Según Federico Renjifo, entonces Ministro de Minas, el aumento era consecuencia de una política que protege a los colombianos de cambios extremos en el costo internacional de la gasolina, "reconoce el valor paridad de exportación de este combustible y ofrece mayor objetividad y transparencia para establecer su precio".

La tragedia con el precio de la gasolina empeoró en marzo cuando se incrementó nuevamente, esta vez, en $126,9. Durante marzo y abril, mes en que el precio sólo tuvo un ajuste al alza de $83, se registró el precio más alto del combustible al llegar a cotizarse en $8.752.18.

En mayo nuevamente se les dio “contentillo” a los colombianos con una reducción de $144 como consecuencia de los precios internacionales del petróleo, si bien se ajusto hacia abajo el precio, el país esperaba que la reducción fuera mayor.

En junio retornó la tendencia al alza y comenzó a calentarse el ambiente en el país por los altos costos del transporte. En ese mes el incremento fue de $24,7 lo que dejó sin sabor pues a pesar de ser leve, fue un nuevo aumento cuando se exigía disminuirlo.

Algo similar sucedió en Julio cuando el aumento fue de $14 y de inmediato se hicieron sentir las protestas de los transportadores que seguían, en vano, pidiendo que el ajusta en el precio del galón de gasolina fuera a la baja.

Sin embargo fue sólo hasta agosto que estalló la bomba del inconformismo. En el octavo mes del año el precio se congeló en $8.646 y desencadenó las protestas de la ciudadanía. Por su puesto que no fue el único ingrediente del coctel molotov que el Gobierno tenía en sus manos.

A los altos precios de la gasolina se le sumaron los inconformismos con la política agropecuaria, la política minera educativa, judicial de salud, etc. Fue entonces el llamado Paro Nacional que desnudó todas las dolencias de la administración Santos.

Por tal motivo en septiembre el Gobierno congeló los precios del galón y comenzó a elaborar una nueva fórmula para calcular el precio. Si bien se ha venido aplazando la presentación del proyecto ante el Congreso de la República, se habla de que con la implementación de ésta la rebaja sea cercana a los $800. No obstante distintos sectores han salido al paso a manifestar que la reducción debe ser mínimo de unos $2.000.

Posteriormente, en octubre, el galón fue reducido en $136, y finalmente para los meses de noviembre y diciembre el precio quedó estable. Ahora los ciudadanos, campesinos, transportadores y demás sectores, esperan con impaciencia a que llegue marzo para que se defina de una vez por todas, si se aplica o no una nueva fórmula que les permita hacer más rentables sus negocios.

Lo cierto es que terminó el año y la gasolina entre enero y diciembre solo se redujo 1,57%, aclarando que durante diez de los 12 meses el precio estuvo muy por encima de lo que empezó el año. Llegará marzo y veremos…