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| Foto: 123RF

GAS NATURAL

Licitación para la planta regasificadora de Buenaventura sería en febrero de 2019

El director de la UPME, Ricardo Ramírez, señaló que si continúa el cronograma tal como está planteado, la licitación para elegir al inversionista de la planta regasificadora de Buenaventura tendría que darse en el primer trimestre del 2019.

22 de marzo de 2018

Ricardo Ramírez, director de la UPME, señaló que la demora en el abastecimiento de gas importado en la planta regasificadora del Caribe, cuando dicha región sufrió dos atentados a líneas de energía, le dejó a la entidad “lecciones” que generaron nuevos ajustes a los prepliegos para la construcción de la planta regasificadora de Buenaventura.

Estos ajustes representaron una demora de dos meses, por lo que la publicación de los prepliegos para comentarios será en mayo de este año, para publicar los pliegos definitivos entre junio y julio. Así las cosas, la licitación para la planta se daría en febrero de 2019 si el nuevo gobierno aprueba el proceso y las condiciones tal como están.

Sin embargo, el director de la UPME advirtió que con dicho cronograma, la planta estaría lista en el 2024 y para ese momento es “demasiado tarde” y de no haberse encontrado nuevas corrientes de gas en el país, ya habría tenido que entrar en funcionamiento la planta de Cartagena que es capaz de suplir la demanda nacional mientras no haya un nuevo fenómeno de El Niño.

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Además, señaló que podría darse una tercera planta de regasificación en La Guajira, que estaría lista para operar en 2028, y en el mismo Caribe hay posibilidades de nuevas corrientes de gas en el pozo Orca.

El cálculo de la UPME es que el proyecto de Buenaventura tendría un costo de entre US$600 millones y US$700 millones, distribuidos en US$275 millones si es una planta flotante como la de Cartagena o cerca de $400 millones si es una planta en tierra, a cualquiera de los dos valores deben sumarse US$250 millones del gasoducto para comunicar a la planta con la red nacional.

El director también advirtió que el costo por millón de btu sería de US$0,3, un costo “razonable para tener un seguro que garantice continuidad y acceso a los servicios internacionales”.

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Y añadió que mientras “en boca de pozo los costos actuales son del orden de US$4 por millón de btu, si importamos está en el orden de US$8 por millón de btu y en la próxima década subiría a US$10” por lo que “el problema no es la planta, el problema es no haber desarrollado gas localmente”.

Para responder a dicho problema, la entidad espera que en el transcurso del año se den noticias sobre la posibilidad de descubrimientos de nuevas corrientes de gas en el territorio nacional, algo para lo cual será necesaria la exploración y un ecosistema que facilite la actividad a mediano y largo plazo.

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