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Uno de los grandes logros del presidente de la Bolsa de Valores de Colombia, Juan Pablo Córdoba, era la fusión de las bolsas de Colombia y Lima. Ahora, ese sueño se frustró.

Coyuntura Nacional

Mucho tilín tilín…

La fusión de las bolsas de valores de Colombia y Lima se frustró por decisión del nuevo gobierno de Ollanta Humala. ¿Y ahora?

31 de agosto de 2011

La Bolsa de Valores de Colombia (BVC) y la Bolsa de Valores de Lima (BVL) informaron en un escueto comunicado oficial en la tarde del viernes 26 de agosto que daban por terminado el actual esfuerzo con miras a una posible fusión corporativa entre las dos plazas.

A pesar del total hermetismo con que se manejó el tema, Dinero pudo establecer que la iniciativa de la cancelación del negocio vino desde Lima. Representantes de la BVL se comunicaron durante esa misma semana con sus homólogos colombianos para informarles que no estaban interesados en continuar con el proceso.

Esto evidencia cómo, a pesar de las primeras señales de Ollanta Humala de tratar de establecer un gobierno moderado y de continuidad, los temores de los inversionistas empiezan a confirmarse. De hecho, se recuerda que uno de los primeros anuncios que realizó el equipo económico de Ollanta Humala –en cabeza de Kurt Burneo, actual ministro de la cartera de Producción–, fue su intención de revisar los procesos de integración cuyas condiciones “no eran justas ni apropiadas para su país”.

Para los comisionistas colombianos, principales accionistas de la BVC, la decisión no resultó tan sorpresiva y expresaron que también tenían muchas dudas respecto a la conveniencia de la transacción, dada la poca claridad que había suscitado el cambio de Gobierno. Es más, ya habían expresado en privado que era prudente darse un compás de espera para ver si el nuevo gobierno de izquierda en Perú se parecía más al de Lula en Brasil o a la radical Venezuela de Chávez (ver edición 376). Además, consideran que el valor del mercado peruano podría no ser el mismo hoy que el de hace unos meses.

Cabe recordar que lo que se quería era crear una holding que fuera dueña de las dos bolsas –que seguirían actuando independientemente– y que sería propiedad en 66% de los accionistas colombianos y en 34% de los peruanos. El nombre previsto de la nueva compañía era Bolsas y Mercados de América (BMA), la cual alcanzaría una capitalización de alrededor de US$600 millones y 2.500 accionistas.

¿Y el MILA?

Las bolsas peruana y colombiana insisten en que esta decisión no afectará el desarrollo y profundización del Mercado Integrado Latinoamericano (Mila) pues son procesos diferentes. Es más, expresaron su intención de que se consolide como un proyecto de integración financiera regional. De hecho, la Bolsa Mexicana de Valores y algunas bolsas centroamericanas han demostrado su interés por participar en este mercado ampliado. Además, el Mila sigue avanzando.

Standard & Poor’s ya realizó el lanzamiento de un índice para monitorear el comportamiento de los precios de las 40 acciones más líquidas de este mercado (S&P Mila 40).

Si bien el comunicado dejó una puerta abierta al mencionar que las bolsas podrían “reiniciar, en cualquier momento, y de considerarlo conveniente, las conversaciones en relación con dicho proceso de integración corporativa”, es claro que tanto el futuro de la fusión corporativa de las bolsas de valores de Lima y Colombia, como la velocidad de la integración de los mercados accionarios de Chile, Colombia y Perú, seguirá dependiendo del rumbo que comience a darle Ollanta Humala, militar retirado de izquierda, a la economía peruana.