Home

País

Artículo

OPINIÓN

Los frutos de la estrategia inversionista

El primer trimestre del año no solo dejó buenas nuevas al país por cuenta de las señales de recuperación que ha dado la economía sino por el alentador desempeño reportado por la Inversión Extranjera Directa (IED). Un análisis por parte del ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo.

6 de junio de 2019

El primer trimestre del año no solo dejó buenas nuevas al país por cuenta de las señales de recuperación que ha dado la economía -impulsada por sectores estratégicos como la industria manufacturera y el comercio-, sino por el alentador desempeño reportado por la Inversión Extranjera Directa (IED) que dejó en evidencia -como lo muestran las cifras de la Balanza de Pagos del Banco de la República- tres trimestres de alza continua y, también, un repunte de la confianza de los empresarios en nuestro país.

Esto, en resumidas cuentas, significa que en el primer trimestre de 2019 la Inversión Extranjera Directa (IED) totalizó los US$3.335 millones (de esta suma, US$1.872 millones correspondieron a inversión no minero – energética). Este volumen de inversiones mostró un crecimiento del 68,4% -en comparación con el mismo periodo de 2018- reflejado no solo en sectores típicos como el minero – energético, sino en otras áreas de la economía colombiana como la industria manufacturera, el transporte, el almacenamiento, la distribución de electricidad, gas y agua, las telecomunicaciones, el agro, entre otros potenciales generadores de empleo y expansión económica.

Le puede interesar: Los grande desafíos que tiene China para seguir creciendo

Aunque el renglón minero – energético ha tenido un peso importante en el volumen de Inversión Extranjera Directa, la mayor destinación de capitales foráneos a otras áreas, como por ejemplo las manufacturas, habla con claridad del interés que hemos recibido de los empresarios en invertir en nuestro país como un destino que ofrece –en todos los sectores- reglas claras, estabilidad jurídica e institucional y, también, importantes estímulos tributarios.

Y más allá del interés, los hechos ya empiezan a ser concretos, pues en un sector como las manufacturas la Inversión Extranjera Directa reportó el destacable aumento del 301,8% en el primer trimestre, sumó US$515 millones y contribuyó con 19,5 puntos porcentuales a la variación (más que el sector petrolero el cual aportó 18,3 puntos porcentuales). Por otra parte, este renglón –al que el Gobierno Nacional ha destinado gran parte de sus esfuerzos en materia de productividad y competitividad- aumentó entre enero y marzo su participación en el total de la IED que arriba a Colombia (esta pasó del 6,5% en el primer trimestre de 2018 a 15,4% en igual lapso de este año).

Al buen comportamiento de la IED con destino a la industria colombiana, también se sumó el notable aumento de 2.393% en los recursos foráneos que recibió el sector de transporte, almacenamiento y comunicaciones el cual, durante el primer trimestre de 2018, pesaba apenas 0,3% en la IED total. Pero ahora las cosas cambiaron y este pasó a representar un 5% para el periodo enero – marzo de 2019.

Le sugerimos: En Latinoamérica, las empresas españolas prefieren a Colombia

Los números que ya refleja la balanza cambiaria comienzan a mostrar que la estrategia del gobierno del presidente Iván Duque para hacer de la inversión un motor de recuperación económica está dando sus primeros frutos. Este plan, vale recordarlo, está diseñado para otorgar incentivos al aterrizaje de mega proyectos de IED, lograr una optimización regulatoria (disminuir el exceso de normas que le dificulta la vida al empresario), desarrollar esquemas tributarios ajustados a las particularidades de cada sector, repotenciar el modelo de zonas francas, promover estrategias red carpet (herramientas tributarias, institucionales, regulatorias, jurídicas y financieras que hacen más atractivo al país) y poner en marcha el modelo de Regiones de Internacionalización Prioritarias (Reip).

En cuanto a los sectores estratégicos definidos por el Gobierno Nacional, es clave reiterar aquí que buscamos jalonar cada vez más inversiones hacia los sectores que ofrecen grandes oportunidades a la iniciativa privada como infraestructura (portuaria y vial), construcción, economía naranja (industrias creativas), turismo (ecoturismo, hotelería, parques temáticos), agroindustria, químicos, metalmecánica, energías renovables, entre otros renglones con alto potencial de expansión.

Desde el Gobierno, estamos comprometidos con consolidar el aterrizaje de mega inversiones que jalonen los sectores mencionados. Para lograrlo tenemos el respaldo de la Ley de Financiamiento la cual puso reglas de juego claras a la llegada de mega inversiones (iguales o mayores a los US$330 millones). Por ejemplo, la inversión cuenta con una tarifa de renta del 27% lo cual, por una parte, abre las puertas a una depreciación acelerada de activos fijos. Por otra, al acceso a contratos de estabilidad jurídica.

Vea también: Uno de los dealers tecnológicos de Amazon apuesta fuerte por Colombia

Los buenos resultados en materia de inversión nos comprometen como Gobierno no solo a jalonar la llegada de capitales a nuevos sectores de la economía sino a estimular el emprendimiento (como fuente de crecimiento) y a generar equidad por la vía de la generación de empleo. Contar con inversiones de calidad en nuestro país, sin duda, se traducirá en que el Estado podrá materializar con éxito la construcción de equidad por la vía de mejor educación y de un despliegue contundente de la política social.    

Para cumplir con una meta de inversión no minero – energética de US$11.500 millones a 2022 (ambiciosa por cierto), haber obtenido estos resultados en un trimestre es un buen comienzo que nos invita a trabajar sin descanso y de manera conjunta con los inversionistas, las regiones y sus variados tejidos empresariales.

*Por José Manuel Restrepo Abondano, ministro de Comercio, Industria y Turismo.

Twitter: @jrestrp