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Las mayores tasas de deserción escolar corresponden, en su orden, a los departamentos del Vichada, Santander, Arauca, Vaupés y Chocó, regiones que tienen una presencia importante de acciones del conflicto armado. | Foto: Archivo Semana

EDUCACIÓN

Otros costos invisibles del conflicto armado

En tiempos en que se habla de los costos y beneficios de la paz, un estudio de la Universidad de los Andes analizó las consecuencias que tiene la exposición a la violencia en el período de gestación sobre el logro educativo. Estos fueron los hallazgos.

2 de enero de 2015

Un revelador estudio de Viviana Vanegas, publicado en la serie de Documentos Cede de la Universidad de los Andes, encontró que la probabilidad de deserción escolar aumenta en 0.20 puntos, si en el período de gestación estuvo expuesto a eventos violentos, como acciones de grupos irregulares, homicidios o minas antipersonales. A partir de esta información se deduce que las secuelas de largo plazo para estos niños, se observan en el hecho de que pierden o repiten años escolares, evitando que finalicen la totalidad de sus estudios.

Para realizar este estudio, la investigadora utilizó estadísticas del Sistema de Información del Sector Educativo, con información de 700.000 niños entre los grados primero y undécimo, entre 2005 y 2011. En esta base de datos era posible chequear el lugar de nacimiento del estudiante, para determinar la residencia de la madre en el período de gestación, específicamente del primer al quinto mes, momento en que el estrés de la mujer puede afectar significativamente el aprendizaje del niño y su desarrollo cerebral.

Además, contrastó esta información con la de eventos del conflicto armado de la Vicepresidencia de la República, la cual cuenta con datos detallados desde 1988, sobre el lugar y el tipo de acción armada en el país (acción defensiva, acción ofensiva, violación del Derecho Internacional Humanitario y otras).

Algunas cifras que presenta Vanegas, muestran, por ejemplo, que los niños desertan más que las niñas (59% contra 41%). Así mismo, la pobreza es una causa importante de la deserción, al revisar las estadísticas por estrato el 60% de los que abandonaron el proceso educativo pertenece al estrato 1 y el 25% pertenece al estrato 2. Además, la economista encontró que las mayores tasas de deserción escolar corresponden, en su orden, a los departamentos del Vichada, Santander, Arauca, Vaupés y Chocó, regiones que tienen una presencia importante de acciones del conflicto armado.

Aunque todavía hay mucho por hacer y quedan varias preguntas en el aire que serán respondidas en investigaciones posteriores. Los hallazgos encontrados por la investigadora son relevantes al momento de enumerar los efectos positivos que tendría para la sociedad la materialización de procesos de paz. Uno de ellos, es que la sociedad en su conjunto tendría mejoras en los niveles de educación, rompiendo así trampas de pobreza existentes en algunas regiones del país.

El camino para llegar a la paz está lleno de espinas, pero son grandes los beneficios que recibirán las siguientes generaciones, según muestran estudios como estos.