Crédito del Icetex: con intereses para estudiantes con Sisbén

Este artículo de la Ley 1753, que se había incluido en la Ley 1547 de 2012, fue impulsado por el senador del Partido Conservador David Barguil para eliminar los intereses de los créditos educativos del Icetex para estratos 1, 2 y 3. En una carta dirigida a Gloria Amparo Alonso, la Directora del Departamento Nacional de Planeación, el senador argumenta que esta situación es inaceptable y es un despropósito que va en contravía de los mismo fines que el PND menciona con orgullo en materia de educación. La educación es uno de los ejes centrales: de acuerdo con el gobierno, es uno de los puntos que mayor inversión tiene y se ha constituido en un estandarte del Pacto por la Equidad liderado por el Presidente Iván Duque.

Para una gran mayoría de colombianos acceder a la educación superior sin un crédito para financiar su carrera profesional es imposible. Pero una vez conseguido el crédito, el problema llega después de que se gradúan. Los altos intereses al final de la carrera se convierten en un dolor de cabeza para la mayoría de jóvenes egresados. Esta situación se agrava aún más por la dificultad de acceder a un trabajo bien remunerado sin contar con una experiencia profesional previa. En este sentido, lo que un día fue un alivio y un puente para continuar con la vida académica, cada vez más se convierte en una carga pesada para subsanar.

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Según un informe del Banco Mundial, Colombia es el segundo país de América Latina con la mayor tasa de deserción en educación superior. “Aunque hay que reconocer que el país ha avanzado en cobertura y acceso a la educación general, los distintos programas y facilidades para que los jóvenes se preparen no garantizan que terminen sus estudios. Y a esto hay que agregarle que los intereses educativos en Colombia son bastante altos comparados con otros países de la región”, explica el senador Barguil en la carta.

En la actualidad, son más de 600.000 estudiantes los que se han beneficiado de esa ley que permite que no paguen intereses los estudiantes que pertenecen al Sisbén, y que solo se les cobre el incremento del costo de la inflación de un año a otro. La norma tuvo tal efecto que, cuatro años después, decidieron replicar esos beneficios para los créditos educativo que otorga el Fondo Nacional del Ahorro con la Ley 1802 de 2016 con la cual se podrán beneficiar hasta dos millones de afiliados.

El presidente ha dicho que la educación es la prioridad. De acuerdo con el senador, actualmente tenemos el mayor presupuesto para la educación en la historia del país, y por esto es impresentable por parte de Planeación Nacional la derogatoria de este artículo que acabaría con la ley de cero intereses del Icetex para lo más pobres del país.

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“Yo estudié con un crédito del Icetex. A mí me tocó una vez graduado pagar casi el triple de lo que me habían prestado. Pero ahora, a diferencia de muchos, soy un afortunado porque conseguí empleo en seguida y puedo pagar las cuotas de mi crédito. ¿Cuántos muchachos se gradúan y no tienen la posibilidad de pagar el crédito por los altos intereses que casi que triplican el préstamo inicial?”, dice Barguil.

Concluye que este país va a cambiar el día en que los hijos de los colombianos de menores ingresos cumplan sus sueños y se puedan convertir en médicos, abogados, contadores, psicólogos o economistas. El día en que puedan educarse y salir adelante en la vida. “Que lo sepa la directora de planeación: no vamos a permitir la derogatoria de nuestra ley. Una ley que genera equidad: una de las banderas del Gobierno y del Plan Nacional de Desarrollo”.