Exportaciones de café caen 5% a enero

El invierno que azotó a todo el país en los últimos cuatro meses del año pasado; el menor uso de fertilizantes por altos precios y el positivo balance que arroja la renovación de cafetales, que si bien tienen un impacto en el corto plazo traerá muchos beneficios en el futuro, explican el comportamiento de las exportaciones y la producción de café en el primer mes del año.

En los últimos doces meses, es decir, febrero de 2008 y enero de 2009, las exportaciones de café de Colombia cayeron 5% al pasar de 11'456.000 a 10'905.000 sacos de café de 60 kilos.

En enero se exportaron 849.000 sacos lo que representa una caída del 18% frente al mismo mes del año pasado cuando llegaron a 1'029.000 sacos, uno de los niveles más altos para ese mes en los últimos diez años. Dicha contracción de las exportaciones están en línea con la caída de la producción en el último trimestre de 2008.

Adicionalmente, el comportamiento de las ventas externas obedece en buena parte a la mayor demanda de café en el mercado interno para transformación en valor agregado. Hoy en día las exportaciones de café procesado superan los 1'200.000 sacos.

Vale la pena anotar quela menor producción y la caída de las exportaciones no es un fenómeno exclusivo de Colombia. Varios reportes de agencias internacionales muestran por ejemplo una caída del 20% en la producción en Brasil. En Nicaragua la Comisión Nacional del Café prevé una menor producción del 21%. Proyecciones similares se reportan para países productores como Costa Rica, Honduras, Panamá, Venezuela y Tanzania.

Producción
De acuerdo con el comportamiento de las exportaciones, las cifras indican que la producción de café en enero pasado cayó 38%, en comparación con el mismo período de 2008. Al cierre del primer mes del año la producción del grano fue de 876.000 sacos de 60 kilos cifra inferior a los 1'404.000 sacos producidos en enero del año anterior.

Hay que recordar que el primer semestre de 2008 registró uno de los niveles más altos de producción en diez años lo cual arroja grandes diferencias en materia de comparación estadística.

Adicionalmente, las fuertes lluvias registradas durante el segundo semestre y el programa de renovación de cafetales, cuyos frutos se verán en los próximos años, explican en buena medida la caída registrada en la producción de café. Con los cafetales renovados y más productivos se logrará la meta de 17 millones de sacos de producción en el 2014.

En los últimos dos años, 2006-2008, 211.000 hectáreas entraron en la fase de renovación lo que significa que dejaron de producir y muchas de ellas comenzarán a ser productivas a lo largo de 2009. En otras palabras el 25% del área cafetera nacional ha sido objeto de renovación entre los últimos 24 meses.

Adicionalmente existe una alta concentración de cafetales en renovación en zonas que son de muy buena producción. Por ejemplo en Risaralda el 36% del área cafetera está en renovación; en Caldas el 32%; en Huila 31%: en Quindío el 22%; Tolima y Valle el 22%. Si bien el efecto de menor café se ve en el corto plazo, en los próximos meses la producción del grano será más eficiente y así se podrá aumentar la participación del café de Colombia en los mercados internacionales.

Este comportamiento confirma el impacto que sobre la producción de café también tuvo la intensidad de las lluvias que golpeó al sector agrícola colombiano. También incide la baja fertilización registrada el año pasado cuyo impacto se está reflejando en la producción actual.

Por esa razón y para evitar que en los próximos meses se repita esta situación la Federación Nacional de Cafeteros con el apoyo del Gobierno Nacional puso en funcionamiento Fertifuturo, una nueva herramienta que le permitirá a los caficultores tener acceso a la financiación de fertilizantes sin costo de tasas de interés.