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Elisabeth Ungar, directora de Transparencia por Colombia.

Declaración de conflictos de interés: prioridad para el Congreso

Los congresistas está a punto de entrar en mora con la obligación de declarar su patrimonio y los ingresos adicionales. Ya venció el plazo para declarar conflictos de interés. Transparencia por Colombia propone un formato para que los congresistas los declaren.

16 de septiembre de 2010

Los congresistas están en mora de cumplir con su obligación de exponer los conflictos de interés que tienen para ejercer sus tareas como legisladores. Así lo señaló la directora de Transparencia por Colombia, Elisabeth Ungar. En reiteradas ocasiones, la entidad ha instado al Congreso a adoptar mecanismos que permitan un seguimiento riguroso de los bienes, actividades económicas y participación en sociedades, no solamente del congresista, sino de sus relacionados y parientes.

La directora de Transparencia destacó que las leyes disponen el deber que tienen los parlamentarios de poner en conocimiento de la ciudadanía las situaciones de carácter moral o económico que les inhiban para participar en el trámite de asuntos sometidos a su consideración. “Por lo anterior, esto no es optativo, sino obligatorio, en los términos y plazos establecidos por la ley”, dijo.

Los congresistas tienen que inscribir ante las secretarías de las Cámaras, sus intereses privados dentro de los 30 días después de posesionados. Ese plazo venció el 20 de agosto. Además deben presentar en los dos meses siguientes a la posesión, esto es, antes del próximo lunes 20 de septiembre, una declaración juramentada de su patrimonio y de las actividades que puedan significarle ingresos adicionales a los de su cargo de representación popular.

Estas obligaciones, explica Elisabeth Ungar, sirven para minimizar la posibilidad de que los parlamentarios les den prelación a los intereses personales, de que haya tráfico de influencias y de que se obtengan ventajas particulares en el trámite legislativo.

Para facilitar la divulgación de los conflictos, Transparencia por Colombia, le recomendó al Congreso, a través de su Presidente, aplicar un formato que elaboró conjuntamente con otros expertos en la materia, en el que se expresan con claridad las actividades económicas de los congresistas y de quienes los rodean.

El formato reemplazaría la forma en la que se llevan esos registros ahora. “Por años estas declaraciones se han registrado en letra manuscrita en formatos que no sistematizan con rigor la información y que con frecuencia son ilegibles”, explicó .

La adopción del nuevo formato acercaría al Congreso colombiano a las prácticas que ya adoptaron otros como los de Chile y Argentina, que presentan formas de fácil acceso para los ciudadanos, para el registro de intereses privados y declaraciones de bienes y patrimonio, entre otros aspectos.

“El Congreso está en mora de articular su gestión a tendencias internacionales de provisión de información parlamentaria de acuerdo con estándares mundiales de modernidad y exigencias del derecho a la información de los ciudadanos”, señaló la directora de Transparencia por Colombia.

Por lo pronto el Presidente del Senado, Armando Benedetti, publicó en su página web su declaración de conflictos de interés y como lo declara Elisabeth Ungar, motivó a los demás miembros del legislativo a hacerlo. Pero eso no es suficiente. “En un momento en el que se radica un Estatuto Anticorrupción, y en el que se hace especial énfasis en la categoría de Personas Políticamente Expuestas, -entre quienes se cuentan los miembros del Legislativo-, sería muy coherente el adoptar medidas y normas que no dejen espacios para la opacidad de la información”.