MANUEL RESTREPO

Si es comerciante, virtualícese o retírese

La tendencia más imponente en el mercado retail en los países desarrollados ha sido el boom del comercio online, lo cual sigue destruyendo los negocios tradicionales, ya sean las tiendas de barrio, locales de centros comerciales o tiendas por departamento.

Manuel Restrepo, Manuel Restrepo
6 de noviembre de 2017

Está bien para un comerciante preguntarse diariamente qué puede hacer para crecer su negocio. Sin embargo perdemos tiempo enfocándonos en cómo podemos hacer mejor el producto o servicio que ofrecemos, en vez de indagar y desarrollar una mejor manera de cómo distribuirlo. Por otro lado, tampoco podemos enfocarnos únicamente en cómo crecer nuestro negocio, sino cómo hacer para que la competencia no lo aniquile.

La tendencia más imponente en el mercado retail en los países desarrollados ha sido el boom del comercio online, o e-comercio (bajo su traducción literal), lo cual sigue destruyendo los negocios tradicionales, ya sean las tiendas de barrio, locales de centros comerciales o tiendas por departamento.

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En EE.UU, vemos cómo tiendas tradicionales como Macy’s, Aeropostale, Barnes & Noble, Best Buy experimentan caídas en sus ventas anuales, mientras que las tiendas online como Amazon, Ebay, Alibaba y sus pares muestran crecimiento en ventas de doble dígito. El año pasado, Alibaba logró ventas por US$18.000 millones en las festividades del “día del soltero”, uno de los días más importantes en ventas retail a nivel mundial, el cual se celebra el 11 de noviembre.

El comercio online tiene ventajas y desventajas naturales, sin embargo los emprendedores de negocios virtuales han encontrado soluciones a dichas desventajas. Entre las primeras ventajas se resaltan la comodidad de comprar cualquier ítem desde su casa, la posibilidad de comparar precios y calidad, revisar la experiencia de otros usuarios a través de “reviews” y acceso a mayor diversidad de productos.

Por el contrario, las desventajas de seguridad en los medios de pago, los sobrecostos y demoras por envíos de los productos han encontrado soluciones efectivas. Amazon es el mejor ejemplo de cómo contrarrestar estos retos a través de la membresía Prime, donde la compañía subsidia el servicio de envío gratis de dos días hábiles, haciendo que los clientes se olviden de el costo extra de envíos. Asimismo, los miembros pueden disfrutar de otros servicios como streaming de música o películas. El objetivo de Amazon es añadir más clientes con la membresía, dado que estos tienden a consumir cuatro veces más que un cliente fuera del programa.

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¿Se acuerda lo disruptivo que era salir del calor y la comodidad de nuestra habitación cuando nuestra madre nos pedía ir a la tienda para comprar la leche, el pan y los huevos del desayuno? Afortunadamente no es una utopía que en los próximos años podamos comprar frescos vegetales, frutas, y los ingredientes para el desayuno sin tener que salir de nuestra cama y recibirlos en tan solo minutos sin cargos extra. Es por eso que Amazon recientemente pagó US$13.500 millones por la cadena de supermercados de productos saludables, Whole Foods, como parte de su nueva estrategia de lograr entrar en el mercado de los productos perecederos y que probablemente acabará con muchos supermercados tradicionales, así como ha destruido miles de negocios en otras industrias.

En pocos años, la generación con mayores ingresos no serán los “baby boomers” que veían las compras por internet como algo sumamente peligroso e inseguro, sino que por el contrario, serán los mileniales la generación con mayores ingresos y que tienen el hábito de comprar online como una norma.

Estas tendencias tienden a sentirse con mayor relevancia en los países desarrollados y después en los países en desarrollo, incluyendo a América Latina. En este sentido, es imperativo que si busca una manera para innovar en su negocio, no se quede analizando cómo mejorar su producto o servicio, sino más bien cómo hará para que su producto se consuma de manera fácil a través del comercio en línea.

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