Opinión Online

Tres razones por las que la recuperación de los commodities no entusiasma

Indicadores para tener cautela antes de apostar por esta tendencia

Invitado
11 de mayo de 2015

Los commodities han mostrado grandes signos positivos en los últimos tiempos. Sus precios mostraron la mayor recuperación en lo que va del 2015. El índice CRB Core Commodity Index se apreció en 9.7% en un mes. El petróleo WTI logró romper la barrera de $54, nivel que marcaba una resistencia importante desde enero de este año. En abril, los ETFs sectoriales de energía y materiales tuvieron la mayor ganancia sectorial. En respuesta a dicha recuperación, los países emergentes más dependientes de los commodities también mostraron recuperación.

Sin embargo, varios indicadores económicos nos llevan a tener cautela antes de apostar por esta tendencia en los commodities a largo plazo. En primer lugar, el desacelere en China no muestra ningún signo positivo. Además, gran parte de la movida alcista ha sido gracias a la debilidad reciente del dólar, la cual es mínima y creemos que no va a ser de largo plazo. Por otro lado, los sectores con mayor correlación a commodities no están mostrando ninguna recuperación relevante en sus proyecciones de utilidades.

En resumen, estas son las razones por las que por ahora no nos apresuramos a apostar en los commodities y como consecuencia, no vemos buenas perspectivas para los países emergentes.

1. La economía global no ayuda a los commodities

2015 lamentablemente no va a ser el año de los commodities, que van a continuar en un rango bajo, apoyados por una coyuntura global complicada. La baja demanda de materias primas por la desaceleración China y un crecimiento que aunque sea positivo no impresiona en Estados Unidos, siguen manteniendo el statu quo tanto en la demanda como en la oferta, con la OPEC todavía enfática en no variar su producción de petróleo.

2. El movimiento en precio fue en gran parte gracias al dólar

Si vimos un rebote en los precios de los commodities fue casi exclusivamente por la debilidad del dólar.

Al estar cotizados en dólares, los commodities reaccionan cuando hay una variación del dólar, y en este caso siguieron su apreciación en los últimos meses debido a las diferentes políticas monetarias mundiales. Con China y Europa siguiendo una clara política de expansión monetaria y Estados Unidos ya cerca de la subida de tasas, seguirá soportando la apreciación del dólar. Su leve caída en relación con otras monedas fue de corto plazo y sobre todo un ajuste por la reciente sobre-compra.

La tendencia del “safe heaven” mundial que es Estados Unidos se está viendo acelerada con el hecho de que está por subir tasas. La búsqueda de los inversionistas de retorno y capitales seguros va a seguir de la misma manera, aunque a menor ritmo que hasta ahora.

Toda esta apreciación del dólar se dio sólo con la expectativa de subida de tasas en combinación con una fuga de capitales en Europa por el riesgo de default de Grecia. Imaginan lo que pasará cuando realmente se suban las tasas?

3. Falta de interés de inversores en commodities

Los flujos de ETFs muestran el interés de los inversores institucionales en los commodities, a través de las inversiones en las empresas de los sectores de energía y materiales. A principio de año hubo un gran flujo a energía y materiales, apostando a un rebote en el sector. Pero ahora las proyecciones de utilidades en el sector se ven débiles y los reportes de ganancias mínimos, lo que nos muestra un rezago en los fundamentales del sector.

El rebote esperado no sucedió y los flujos de ETFs no han mostrado gran participación en los fondos de commodities, mostrando poco interés institucional incluso ante la reciente recuperación en los precios.

Mercados Emergentes Siguen a la Espera

Latinoamérica y otros mercados emergentes siguen extremadamente dependientes de los commodities.

Por ejemplo, en Colombia el 52% de exportación es petróleo. Mientras hace un año el país vendían el barril a US$100, ahora se deben conformar con menos de la mitad. Estos ejemplos se aplican también a países como Perú, dependiente de la minería y a Brasil con los commodities en general.

Las noticias no son buenas entonces para los países en Latinoamérica que seguirán sufriendo devaluación de la moneda, en combinación con la situación macroeconómica y situaciones políticas inestables, crean lamentablemente una tormenta perfecta.