OPINIÓN ONLINE

¿Por qué las ideas innovadoras no se me ocurren a mí?

Las ideas son simplemente conexiones neuronales. Entienda su cerebro para que pueda encontrar la inspiración.

Juliana Sánchez Trujillo
5 de abril de 2016

En creatividad e innovación no hay nada más peligroso que la seguridad.  Es por eso que a la hora de desarrollar esta habilidad, es común que se haga una invitación a hacer las cosas de una forma distinta, a arriegarse y a probar nuevos retos. Estas recomendaciones no vienen en vano, sino que tiene una explicación lógica desde la neurología pues las ideas son sino conexiones neuronales.

Cuando usted se acostumbra a hacer siempre las mismas cosas, su cerebro no tiene la información suficiente para hacer nuevas asociaciones, y por ende, acabará con las mismas ideas de siempre. Esta es la más sencilla explicación de por qué es importante salirse con frecuencia de la zona de confort; pues las ideas son básicamente conexiones que se realizan con información que se encuentra previamente en su cerebro.

Asimismo, el investigador Kounios, de la Universidad de Drextel, demostró que las ideas se encuentran muy relacionadas con la estimulación visual. Por tal motivo, entre más perceptivos seamos frente a lo que sucede en nuestro alrededor, existen mayores probabilidades de que tengamos un momento de iluminación mejor conocido como ¡Eureka!. Adicionalmente, se descubrió que un estado de ánimo positivo, aumenta las probabilidades de que este estado se presente, mientras que la ansiedad, promueve el pensamiento analítico y la introspección, pero no las ideas. Adicionalmente, se evidenció una alta relación entre la cantidad de ideas que una persona genera y la calidad del sueño que posee. Es decir, que si usted quiere más y mejores ideas, quedarse despierto toda la noche en busca de ellas podría no ser la mejor opción.

Como he comentado en columnas anteriores, la creatividad no es un proceso que surge de la inspiración, sino de esfuerzos deliberados. Sin embargo, hay que reconocer que en ocasiones los bloqueos nos impiden encontrar nuevas ideas. Una simple solución a este problema se encuentra en la herramienta conexiones forzadas; una sencilla técnica que utiliza imágenes para obligar al cerebro a generar nuevas soluciones al conectar información que no se encuentra relacionada. Para usarla, lo único que se necesita son imágenes de alimentos, personas, tecnología o naturaleza. La idea entonces es conectar el problema que se tiene haciéndose la pregunta: “al observar esta imagen, ¿qué ideas se me ocurren para resolver el problema?. Esta técnica tan sencilla seguramente traerá mucha inspiración y podrá sacarlo de apuros.

Ahora bien, ¿por qué es común que se nos ocurran las mejores ideas en la ducha, haciendo ejercicio o en el carro? La razón es que las distracciones proveen un descanso que permite al cerebro enfocarse en algo distinto a encontrar una solución. A este ejercicio se le conoce como periódo de incubación y consiste básicamente en dejar divagar el subconsiente para que las ideas puedan salir a la superficie. Cuando esto sucede, el cerebro comienza a centrar la atención hacia adentro, y es en ese momento cuando hace nuevas conexiones de información que llevan como resultado al eureka.

Por eso, la próxima vez que se encuentre atastacdo buscando una idea, mire a su alrededor, use los objetos que tenga a la mano para hacer conexiones o simplemente tómese un descanso, porque si bien la atención es importante para hacer análisis, las ideas llegan  al desconectarse.