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El secreto del poder

El poder es la más grande ambición de los los seres humanos. Podríamos pensar que es el dinero, pero en realidad lo que se ama del dinero es el poder que otorga, la capacidad de hacer lo que se quiere cuando se quiere y por encima de los intereses colectivos poder sentar los propios, los individuales.

Claudia Varela
5 de febrero de 2017

El poder es la más grande ambición de los los seres humanos. Podríamos pensar que es el dinero, pero en realidad lo que se ama del dinero es el poder que otorga, la capacidad de hacer lo que se quiere cuando se quiere y por encima de los intereses colectivos poder sentar los propios, los individuales.

Tengo ejemplos de varios tipos. Hace poco tuve que enfrentar una situación muy doméstica donde uno de mis perros (adoptado y con cara de pitbull) por jugar con un perro super pedigree lo “atacó” mordiendo su cuello. No pasó nada y rápidamente mi hijo lo cogió con su correa. La historia es la respuesta de la dueña del perro pedigree.

Aunque le pedí excusas por el impase ella seguía sin escuchar, gritando y diciendo que mi perro era un asesino y que era mi culpa por dejarlo suelto, le recordé que su perro había saltado primero a atacar al mío y ella seguía discutiendo cada vez más enojada, mi paciencia empezó a debilitarse así que le pregunté dónde estaba la correa de su perro ya que la responsabilidad de una situación como esta era compartida. Después de un rato de seguir amenazando y peleando e incluso diciéndome que me fuera del lugar tuvo que confesar que la correa estaba en su casa.

¿Es acaso esta correcto? ¿Cómo podemos exigir al mundo que nos cuide si no ponemos de nuestra parte para cuidarlo? ¿Por qué exigimos a los demás cosas que nosotros no hacemos? ¡Sería tan fácil la vida si nos respetáramos como seres humanos!.

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Algunas personas piensan que el dinero da derecho a hacer con los demás lo que se quiera. Otros piensan que es el poder. Poder por ejemplo en los mundos corporativos, que se vuelven a veces salvajes micro mundos de quien domina, como feudos territoriales donde cada quien quiere proteger sus propios intereses. Se olvida nuevamente el propósito.

¿Qué tal si lo pensamos diferente? Si el universo nos da la posibilidad de tener una posición privilegiada de poder no es para que saquemos a nuestro perro sin correa (solo metáfora) sino para que hagamos buen uso de él. Si en una situación corporativa, en cualquier negocio, tenemos la opción de impactar en los demás, empezando por la gente que trabaja con nosotros, dando coaching, preocupándonos por su desarrollo, su ambiente laboral, sus familias y estabilidad. Esos son los líderes que inspiran

Pensemos que no estamos en posiciones destacadas solo como un tributo al ego propio. Hay muchos ejecutivos exitosos, muchos que logran “doble digito” de crecimiento año tras año pero, ¿construyeron algún legado? ¿Alguien los va a recordar por algo diferente a producir números?.

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Con los años he descubierto que los líderes que me inspiran ya no son los mismos de antes. Tampoco los que más producen dinero ni los que se ven más bonitos en la foto. No me inspiran los que son arrogantes y los que hablan de ellos mismos la mayoría del tiempo. Esos líderes por muchos dólares que ganen no entendieron su propósito al tener poder.

Dejemos de hablar tanto en primera persona. Por supuesto si trabajamos en una empresa propia, nacional, multinacional o de la vía láctea debemos producir resultados financieros y ser eficientes (de hecho si no es asi corremos el riesgo no solo de no dejar legado sino de que nos saquen por la puerta de atrás).

Hablemos en función de la empatía, en función de los demás. No tenemos que hablar tanto de nosotros mismos, los resultados se muestran, lo que somos saldrá a la luz si es auténtico. No olvidemos el sentido de propósito que podemos tener en la vida. No pensemos que el mundo gira solo por nosotros.

Descubrí el secreto. De hecho lo descubrió Hemingway antes que yo…el secreto de la sabiduría, del poder y del conocimiento es la humildad.

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