María Alejandra Gonzalez-Perez

¿En qué se diferencian las multinacionales colombianas con las demás?

Aunque no hay consenso sobre modelos homologables definitivos de internacionalización de empresas multilatinas, si hay evidencias de patrones asociados al país de origen de las empresas. Opinión de María Alejandra Gonzalez-Perez.*

7 de abril de 2014

A diferencia de las empresas de la región, las colombianas debido a tener que compensar la reputación asociada a nuestro reciente pasado de violencia y narcotráfico, y superar las desventajas que esto implica en los mercados internacionales ligadas a la imagen su país de origen, las multilatinas colombianas han optado por estrategias sofisticadas de responsabilidad empresarial en búsqueda de asegurar licenciamiento social, y demostrar a consumidores e inversionistas su capacidad de sostenibilidad financiera, social y ambiental.

Las multilatinas son empresas de países Latinoamericanos con operaciones de valor agregado en otros países. Muchas de las grandes empresas latinoamericanas se han expandido solo recientemente a nivel internacional, y lo han hecho mediante adquisiciones de empresas en países extranjeros, ofreciendo a estas oportunidades de creación de valor y diversificación. Este modo de entrada y consolidación (adquisiciones) ha sido el predominante en las empresas multilatinas debido a que estas han contado en la última década con disposición de capital acumulado y habiendo asegurando acceso a financiación en otros países.

Pese a la larga tradición de exportaciones, Latinoamérica tiene un número relativamente pequeño de compañías multinacionales globalmente competitivas si se compara con regiones. Investigadores como Lourdes Casanova ha atribuido esto, a que los países América Latina han tenido desde la década de los ochenta políticas proteccionistas en contra de competidores internacionales (como barreras arancelarias, e medidas de substitución de importaciones), poco desarrollado mercados de capital, baja inversión en investigación y desarrollo (I+D), baja productividad, y la concentración en los mercados domésticos.

Sin contar con muchos precedentes históricos en Latinoamérica, podemos afirmar que las multilatinas han aprendido a internacionalizarse a través de su propia experiencia (asumiendo sus propios riesgos), y la estrategia seguida ha dependido de la naturaleza de cada empresa, más que del nivel de desarrollo del país origen. Sin embargo, el hecho que estas adquisiciones hayan sido dentro de la misma región, esto no ha eximido a las empresas multilatinas de choques culturales en la misma región.

Las empresas multilatinas fueron estimuladas a convertirse en multinacionales después de las reformas estructurales de los años noventa en países como Chile, México, Colombia y Brasil que las obligó a aumentar su competitividad para poder sobrevivir a la competencia en empresas extranjeras tanto en su propio territorio, como internacionalmente.

Pese a que no se pueden tratar todas las empresas de países emergentes y en desarrollo como un grupo homogéneo. Sin embargo, se puede afirmar que las empresas de estos países difieren con los países desarrollados en estructuras sociales, contextos ambientales, y la intervención de los gobiernos, los investigadores Rajneesh Narula y John Dunning explican que las empresas de países emergentes tienen una dependencia más alta de su capacidad de relacionamiento y redes sociales en donde compartan afinidades culturales. Para Álvaro Cuervo-Cazurra y Mehmet Genc, la gran ventaja competitiva que tienen las multinacionales de países emergentes en relación a las de países desarrollados, es que los primeros tienen experiencia de funcionamiento en países con instituciones no consolidadas, y con relativamente altos niveles de incertidumbre.

Las multilatinas tienen ventajas naturales dentro de Latinoamérica que propician la expansión regional debido a las pocas diferencias culturales, históricas, geográficas e institucionales, compatibilidades en el poder adquisitivo de los consumidos, niveles comparables de desarrollo social y económico.

En el caso de las empresas brasileras, los cambios paulatinos en las políticas de desarrollo industrial, sumada a la acumulación de capacidad tecnológica han sido motores principales de la internacionalización de las multilatinas brasileras. Investigaciones de los esposos Alfonso y María Tereza Fleury han encontrado que las competencias organizacionales y los estilos gerenciales de las multilatinas brasileras se han venido desarrollando compitiendo con empresas avanzadas por su mercado doméstico en Brasil, y esto les ha permitido ser competitivas incluso en países avanzados. Moacir de Miranda Oliveira y Felipe Mendes Borini encontraron que a diferencia de las multilatinas de otros países de América Latina, las brasileras han focalizado sus actividades, inversiones y adquisiciones en el extranjero en países desarrollados (Estados Unidos y Europa), y la participación en redes empresariales en los países anfitriones ha sido crucial para este fin. Por su parte Rodrigo Bandeira-de-Mello y colaboradores determinaron que nutrir las relaciones políticas dentro del Brasil, facilita la expansión internacional de las firmas.

Las multilatinas Chilenas han mostrado mejor rentabilidad, que las empresas chilenas sin operaciones internacionales. La ventaja competitiva en mercados internacionales de estas empresas, viene del desarrollo de capacidades de supervivencia a la competencia con empresas extranjeras por el mercado local, y las medidas tomadas para aumentar los niveles de competitividad en el periodo de liberalización económica. Al igual que las empresas Brasileras, las chilenas han dependido de alianzas estratégicas y capacidades de participación en redes empresariales para lo cual pertenecer a grupos empresariales ha facilitado procesos.

Cuatro de las empresas multinacionales Mexicanas (América Móvil Cemex, Grupo México y Femsa) se concentra el 81% de la inversión extranjera saliente de México. Es por esta razón que el caso de las multilatinas mexicanas, su motivación principal de expansión ha sido mantener y expandir su posicionamiento en mercados internacionales.

* (PhD), Profesora Titular de la Escuela de Administración, Universidad EAFIT