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Colombia este año es menos innovadora, ¿será cierto?

El Índice Mundial de Innovación de este año, muestra una pérdida de dos posiciones frente al 2016. ¿Por qué estamos retrocediendo en este tema?

Juliana Sánchez Trujillo, Juliana Sánchez Trujillo
12 de julio de 2017

El nuevo Índice Global de Innovación, es una investigación de tipo colaborativa desarrollada por la alianza entre la Universidad de Cornell, la escuela de negocios INSEAD y el World Intellectual Property Organization. En su más reciente versión, el índice muestra un deceso de Colombia en dos posiciones con respecto al año pasado, ubicándolo en el puesto 65 de 127 países participantes.  Los países que lideran la encuesta son: Suiza, Suecia, Holanda, Estados Unidos y Reino Unido respectivamente. ¿Pero a qué se debe este cambio de posición en nuestro país?

Lo primero que se debe considerar, es que el ranking de este año no es comparable con el del 2016 por dos factores fundamentales: el primero es que el ranking de este año se enfoca en innovación para alimentar al mundo, es decir, que evalúa los nuevos desarrollos para producir y distribuir alimentos en las diferentes naciones; mientras que el estudio del 2016, buscaba encontrar soluciones gana-gana que beneficien la industria y la construcción de políticas públicas. El segundo aspecto, es que en el ranking de este año, cuatro naciones dejaron de participar y tres más entraron en el estudio, por lo que los términos comparativos cambian sustancialmente.

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Aún así, existen múltiples factores a considerar para realizar un análisis de los resultados. Lo primero es que a nivel mundial, el reporte hace un llamado especial por trabajar en varios retos específicos que resalto: El primero es crear nuevos desarrollo que generen transformaciones en la cadena de valor de la industria alimenticia, esto incluye no solo mejorar la producción a nivel técnico, sino también desarrollar las habilidades y capacidades asociativas de los productores. Otro reto es el aumento de la productividad a través del uso de la tecnología, de donde las esperanzas se encuentran puestas principalmente en nanotecnología y biotecnología, aun cuando las consecuencias ambientales y de salud a largo plazo no han sido aun comprobadas. Así mismo, se habla de la necesidad de aumentar la inversión en esta temática, pues aun en países desarrollados, esta inversión es considerablemente baja y con tendencia a disminuir en los próximos años. Finalmente, se presenta la necesidad de promover emprendimientos e inversiones de capital en el sector agropecuario.

Por otro lado, si se analizan los resultados de la región, Colombia ocupa el quinto puesto de Latinoamérica, de donde Chile lidera el grupo seguido de Costa Rica, México y Panamá. El informe Colombiano no tiene avances significativos frente a los presentados en el 2016, ya que se resaltan las mismas fortalezas y los mismos retos que se presentaron en el año anterior. Así, se puede observar que en el país estamos bien en: Sostenibilidad ambiental, facilidad para acceder a créditos, préstamos de micro finanzas, protección a inversores de minorías, intensidad de competencia local, número de empresas que ofrecen capacitación formal, importación de tecnología, las certificaciones de calidad ISO 9001, y manufactura de impresión y publicidad. Sin embargo, aún se debe mejorar en : la estabilidad y seguridad del entorno político; en educación, se debe aumentar el puntaje de las pruebas Pisa, el promedio de maestros por estudiante, y la movilidad interna de estudiantes de educación superior. Así mismo se debe fortalecer la inversión en investigación y desarrollo; la tasa de empleo de trabajos especializados, así como el personal investigativo empleado en la Industria y las alianzas investigativas entre Universidad, empresa y Estado; tema que se ha buscado fortalecer desde Colciencias e Innpulsa. Finalmente, se debe hacer un esfuerzo especial por aumentar la exportación de tecnologías. En otras palabras, si el objetivo es lograr ser el primer país en innovación en Latinoamérica, el reto es grande, pero comienza por seguir trabajando por la estabilidad del país y en generar alianzas que permitan más productos de investigación que no solo mejoren la industria, sino también que permitan generar exportación de conocimiento.

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