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Comercio Exterior Y TLC

Exportaciones: manufacturas siguen rezagadas

Aunque el país ha logrado un impulso en sus exportaciones, su crecimiento sigue sustentado en bienes básicos. Los esfuerzos por diversificar mercados y productos aún no cristalizan.

11 de junio de 2010

En momentos en que el mundo no logra superar por completo los efectos de la crisis financiera internacional, Colombia logró un crecimiento de 26,2% en sus exportaciones al cierre de los primeros cuatro meses de 2010. Las ventas pasaron de US$10.005 millones, entre enero y abril de 2009, a US$12.626 millones en el mismo periodo de este año.

Petróleo, carbón y ferroníquel son los protagonistas de este salto. Solo en el caso del petróleo, las ventas al exterior reportaron un crecimiento en valor de 139,1%, entre enero y abril de este año, respecto al mismo periodo del año anterior, pese a que el volumen exportado apenas aumentó 28,7%. Su 'salto' se explica por el aumento en el precio internacional del crudo, que en el primer trimestre alcanzaba 83,2% frente al mismo periodo de 2009. Incluso, mientras en los cuatro primeros meses de 2009 el petróleo representó 21% del total exportado por Colombia, en el mismo periodo de este año pasó a 40%.

Aunque crecer en momentos de turbulencia internacional tiene su mérito, la preocupación de algunos analistas radica en que el aumento obedece básicamente al comportamiento de los precios internacionales de bienes básicos que exporta el país y a la reacción de la demanda mundial por estos productos.

De hecho, mientras las ventas de productos primarios creció 60% en los primeros cuatro meses de este año, los bienes no tradicionales, es decir aquellos que incorporan mayor valor agregado y procesos industriales, registraron una caída de 6,6%. En términos de valor, entre enero y abril del año pasado se vendieron bienes manufacturados y otros clasificados como no tradicionales por US$5.085 millones, mientras en los mismos meses de 2010 la cifra descendió a US$4.747 millones.

En los últimos años el país se ha empeñado en potenciar su comercio internacional para alcanzar un mayor nivel de desarrollo, no solo a partir de la explotación de recursos naturales sino también de un mayor esfuerzo en sectores de mediana y alta tecnología.

Este proceso le ha permitido pasar de exportaciones por valor de US$13.156 millones en el año 2000 a US$37.626 millones en 2008, año que marcó un récord para las ventas externas del país. En 2009, las exportaciones colombianas descendieron a US$32.853 millones, producto de la crisis de la economía internacional.

En términos de participación de las exportaciones como porcentaje del PIB, Colombia pasó de 9,3% en el periodo 1990-1999 a 12,9% en 2002 y a 14,3% en 2009, de acuerdo con datos de la Asociación Nacional de Empresarios (Andi). ¿Qué tan sostenible puede ser el crecimiento de las exportaciones y qué puede pasar con el proceso que traía el país para impulsar los bienes no tradicionales? El ministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Guillermo Plata, destaca los resultados del primer trimestre de 2010 al señalar que "el valor exportado fue el mayor nivel histórico alcanzado por Colombia en periodos similares".

Desde noviembre de 2009, las exportaciones mensuales registran tasas positivas de crecimiento, que coinciden con el aumento de los precios internacionales de bienes básicos como el petróleo (en el primer trimestre de este año aumentó 83,2%, frente a igual período de 2009), carbón (32%), níquel (89,2%) y oro (21,9%).

Pero no se trata solo de una coyuntura de precios altos. A esta buena noticia se ha sumado el mayor esfuerzo que vienen haciendo las empresas que explotan petróleo en el país por aumentar sus niveles de producción, y que se ha visto reflejado en los mayores volúmenes de exportación.

Un análisis realizado por Proexport Colombia destaca que en el caso de otro bien básico, el oro, durante el primer trimestre de este año sus exportaciones se convirtieron en el tercer producto en importancia para el país después del petróleo y el carbón. Y, de acuerdo con analistas internacionales, esta situación de precios podría mantenerse durante buena parte de este año, de consolidarse la tendencia de recuperación en la economía mundial y los pronósticos de la Organización Mundial del Comercio que apuntan a que el comercio internacional podría tener en 2010 un crecimiento cercano al 10%.

El vicepresidente de exportaciones de la Andi, Juan Camilo Nariño, explica que la tendencia de crecimiento en las ventas externas colombianas continuará este año impulsada por los productos tradicionales. Para él, "sin duda puede haber una discusión sobre qué tan bueno es crecer a partir de bienes básicos, pero aunque siento que es válida, creo que el país debe empezar a abordar este nuevo escenario y sobre todo aprender a vivir con esto, pues en el futuro estos bienes básicos van a contribuir enormemente a las finanzas del país y podemos buscar que jalonen la industria nacional y mantener fuerte la política de diversificación de productos".

¿Y las no tradicionales?

Javier Díaz Molina, presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), reconoce el crecimiento de las exportaciones colombianas -impulsadas por los bienes primarios- pero se lamenta por la caída que reportan los bienes no tradicionales, que todavía no han logrado superar el 'hueco generado' por el cierre del mercado venezolano. "Si uno mira el comportamiento de las exportaciones no tradicionales, se da cuenta que caen 6,6% en los primeros cuatro meses, pero si además se le restan oro y esmeraldas, la caída llega a 11,8% y ahí se nota el hueco generado por Venezuela que es el que nos compra buena parte de las manufacturas", asegura Díaz Molina.

Para el dirigente gremial, el peso de Venezuela este año es notorio en el comportamiento de las ventas no tradicionales, pues si se elimina el efecto de ese país, dichas exportaciones muestran un crecimiento del 24%. "Todavía seguimos muy golpeados por el cierre de Venezuela para productos como alimentos, carne, huevos, pollos, calzado, textil y confecciones, entre otros", explica.

Aunque desde el sector público se impulsó en septiembre del año pasado un plan de choque para mitigar el impacto de la caída de las ventas a Venezuela y la primera semana de mayo se lanzó un segundo programa en este sentido, Díaz Molina cree que los resultados no se pueden esperar en el corto plazo. "Llegar a otros mercados toma tiempo, no es un proceso que se logre de la noche a la mañana. El Gobierno está haciendo la tarea y los empresarios también hacen el esfuerzo de diversificar mercados y productos, pero esto es un proceso que mínimo toma de dos a tres años", asegura el dirigente gremial.

El ministro Plata también reconoce el impacto que ha tenido para las exportaciones no tradicionales el cierre del mercado venezolano. Y es que mientras en 2009 las exportaciones a Venezuela -que son básicamente productos manufacturados- registraron una caída de 33%, equivalentes a US$2.041 millones, en los primeros cuatro meses de este año la disminución alcanza 72%.

Sin embargo, destaca el aumento que han tenido mercados como Brasil, Chile, Perú y Canadá; los cuales, en su opinión, están compensando las menores exportaciones a Venezuela. Otros mercados como Estados Unidos, China y República Dominicana han tenido una importante participación en las exportaciones colombianas en el mismo periodo, aunque en este caso las ventas están enfocadas a productos primarios.

La expectativa de una recuperación de la economía mundial alienta a los exportadores de bienes no tradicionales, que todavía no tienen claro cuándo reaccionará el mercado de Venezuela. "Hay que seguir con el proceso de llegar a nuevos mercados, salir a otros países, conocerlos, ver cómo se comportan y cuáles son sus canales de comercialización para tener una idea más clara de cómo llegar y participar", sostiene el presidente de Analdex, para quien la tarea se está haciendo, aunque todavía falta.

Y es que a pesar del esfuerzo que desde hace varios años vienen haciendo de manera conjunta los sectores público y privado para impulsar nuevos productos y nuevos mercados, los resultados todavía no son contundentes.

En este sentido, un análisis realizado por el Ministerio de Comercio sobre concentración de las exportaciones colombianas por mercado y por productos muestra que, si bien ha habido un avance, todavía falta mucho por recorrer. Basados en el Índice de Concentración Herfindahl-Hirschman (IHH), el ejercicio muestra que mientras en 2002 las ventas colombianas se concentraban principalmente en cuatro de los 195 países a donde exportaba, para 2009 la concentración se daba en seis países. En términos de productos, la situación es similar. Aunque se nota el esfuerzo por diversificar, el IHH muestra que de estar concentrado en nueve productos en 2002 el país pasó a 11 productos.

El Ministro de Comercio señala que la política adoptada para ampliar los mercados y la diversificación de productos viene cumpliendo su cometido. En materia de tratados comerciales, el país pasó de tener dos acuerdos con cinco países en 2002 a 12 acuerdos con 48 países en 2010, y aspira consolidar dos nuevos acuerdos con Japón y República Dominicana, para ampliar a 50 el número de países y a 1.437 millones de personas el potencial de consumidores para atender.

Las condiciones de la política comercial se han afinado para apoyar a los exportadores, y el empresariado ha ratificado su interés por aprovechar estas nuevas condiciones. Pero todavía faltan mayores esfuerzos para hacer realidad el sueño de diversificar mercados y productos.