Home

Empresas

Artículo

Mauricio Lombana, vicepresidente de Salud, región Austral-Andina, Siemens.

Servicios

Cómo se gesta hoy la próxima revolución médica

Medicina molecular, enormes bases de datos con información clínica de los ciudadanos, telemedicina, son elementos que permiten hacer diagnósticos clínicos más tempranos y más personalizados. Ahí está el poder de la nueva medicina. Una visión del vicepresidente de Salud de Siemens, Mauricio Lombana.

22 de octubre de 2010

La medicina avanza a gran velocidad. Para el vicepresidente de Salud para las Regiones Austral y Andina de Siemens, Mauricio Lombana, la medicina en 10 ó 20 años tendrá varias características nuevas que la harán mucho más poderosa. En particular, tendrá métodos para hacer diagnósticos más tempranos y de manera más personalizada.

 

En esta línea, considera que ya están dados los primeros pasos para desarrollar la medicina molecular. Esta es una nueva rama que está creando métodos de diagnóstico y de tratamiento de las enfermedades, modificando el funcionamiento de los genes, las proteínas y otras moléculas celulares.

 

La medicina molecular permite hacer diagnósticos tempranos in vitro e in vivo que muestren desviaciones en el nivel molecular, explica el ejecutivo.

 

Hoy se pueden hacer pruebas moleculares de sangre y de imagen que permiten detectar cánceres que aún no han presentado síntomas visibles y que no se podrían encontrar con métodos diagnósticos como los de resonancia magnética. Incluso con imágenes se puede identificar de forma temprana, la aparición de enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson, señala Mauricio Lombana.

 

La aplicación de estas técnicas ya se encuentra en muchos lugares. Uno de ellos está en la detección de BNP, un péptido que eleva su nivel en el cuerpo cuando hay falla cardíaca. Si se identifica esta molécula, se puede diferenciar de inmediato esta afección de otras con síntomas parecidos. Los laboratorios de Siemens desarrollaron una prueba en sangre para encontrar BNP, que complementa las técnicas de imágenes que se usan para tratar los problemas cardíacos.

 

En general, los nuevos métodos de diagnóstico tienen un componente muy elevado de programas de cómputo. Por eso el Vicepresidente de Siemens estima que los precios de estos aparatos tenderán a bajar de la misma forma en la que lo hacen los computadores. Con eso, los equipos se vuelven interesantes para los sistemas de salud y para los prestadores de servicios.

Bases de datos
Otro elemento que caracteriza la nueva medicina, es el manejo de enormes bases de datos con información sobre pacientes y sobre conocimiento médico. Se trata de herramientas que permitan hacer administración del conocimiento. El reto es el de poner toda la información a disposición de los médicos con mecanismos de búsqueda sencillos y eficaces que Mauricio Lombana llama “un Google para Medicina”.

 

Pero también, con estos datos se pueden encontrar patrones y regularidades que sin duda facilitarían el diagnóstico y el tratamiento de los pacientes. Sirven por ejemplo, para hacer lo que se conoce como medicina predictiva, que anticipa condiciones clínicas a partir del conocimiento de características de las personas y de su entorno.

 

El gran poder que tiene la información hace que haya que poner mucha atención en el desarrollo de asuntos como el de las historias clínicas que se depositen en solo lugar, que es un proyecto que avanza lento en Colombia. En particular, sostiene el ejecutivo, hay que asegurarse de que sean compatibles entre sí y con bases de historias internacionales.

 

Telemedicina
Otra técnica, menos novedosa y muy cercana a la práctica en Colombia es la telemedicina. “La telemedicina es una necesidad para las regiones”, señala vicepresidente de Siemens. En lugares alejados de los principales centros clínicos, es un gran apoyo para la atención de enfermos.

 

Sin embargo, afirma, todavía en el país hay cosas que se deben mejorar para que la técnica funcione bien. Uno de ellas, como en el manejo de bases de datos, es que se usen estándares internacionales para la transmisión y el manejo de la información médica. Si se emplean protocolos de comunicación y archivo locales, se pierde en el futuro la posibilidad muy valiosa, de conectarse con redes globales y aprovechar desarrollos de programas que se hagan con estándares mundiales. “Estar en cosas distintas no le hace bien al país”, afirma Mauricio Lombana.

 

También destaca que esta actividad necesita más control. “Nadie controla la calidad. Que, por ejemplo, el ancho de banda sea el adecuado para que no se dañe un electrocardiograma que se esté transmitiendo”, sostiene.