En Colombia, el peso se depreció el viernes un 0,19 por ciento a 1.794,35 unidades por dólar. Sin embargo, se prevé que retorne a niveles de 1.780, incrementando la apreciación del 6,42 por ciento que mantiene en lo que va del año

Inversionistas

Monedas de América Latina tendrían alta volatilidad esta semana

Las monedas de América Latina continuarían volátiles esta semana siguiendo la tendencia de los días previos, con movimientos exacerbados por los renovados temores sobre la salud de la economía estadounidense y la crisis de deuda en Europa.

29 de agosto de 2011

Las divisas latinoamericanas cerraron la semana pasada al alza luego de que el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, dijera que la Fed ampliará su encuentro de septiembre a dos días con el fin de evaluar las opciones para apuntalar a la economía, un comentario que revirtió la decepción inicial.

Bernanke no ofreció detalles sobre cómo la Fed podría estimular más a la alicaída economía, lo que en un primer momento derrumbó a las monedas regionales.

Sin embargo, la mirada posteriormente se centró en la reunión de septiembre del banco central estadounidense, alentando las expectativas de que hayan nuevas medidas para reactivar a la mayor economía del mundo, y en el modo en que Europa enfrentará su crisis de deuda.

"La volatilidad muy probablemente va a subsistir y pudiera incrementarse dependiendo de qué es lo que ocurra en Europa", dijo a Reuters el analista para América Latina de IDEAglobal Enrique Alvarez.

"Vamos a volver bastante rápido al espectro europeo como enfoque principal de empuje de las monedas y eso no necesariamente va a ser positivo para Latinoamérica", explicó.

Ligera tendencia a la baja
Como reflejo de esta situación, el peso mexicano sería una de las monedas con mayor volatilidad por ser más susceptible al comportamiento de la economía de Estados Unidos, su principal socio comercial.

El viernes, en un comunicado de política monetaria, el Banco Central de ese país sugirió que podría considerar un recorte de tasa, la primera en casi dos años, lo que afectaría a un tipo de cambio que podría acercarse a las 12.70 unidades por dólar, desde los 12.50 que ronda actualmente.

Por su parte, el peso argentino seguiría marcando mínimos históricos por compras de dólares de privados, aunque las persistentes intervenciones del Banco Central en la plaza cambiaria mantendrían controlada a la moneda.

El peso en el renglón mayorista o interbancario, donde interviene el banco emisor argentino, cerró el viernes en 4,1825/4,185 por dólar, mientras que en el segmento marginal cayó un poco a 4,4325/4,4375 unidades.

La proximidad de las elecciones presidenciales de octubre y la incertidumbre sobre la economía global han generado una persistente presión compradora de dólares en Argentina.

Mayor apreciación
El real brasileño, la moneda de referencia de la región, cotiza a sus mayores niveles frente al billete verde desde 1999, por lo que el Gobierno seguiría adquiriendo grandes cantidades de dólares para mitigar el impacto de las enormes entradas de capital.

Sin embargo, se espera que la moneda de Brasil continúe marcando una tendencia alcista dado el desempeño todavía débil del dólar a nivel mundial.

En Chile, el peso mantendrá una ligera tendencia alcista apoyado en la fortaleza del precio del cobre, principal producto exportación del país, con mercados un poco más animados al riesgo.

"El peso debería mantener su avance. Se espera un repunte del cobre y, de ser así, veríamos al peso rompiendo las 465 unidades y caminando hacia las 460. Tras el discurso de Bernanke, las expectativas sobre medidas para el dólar se trasladan para septiembre", dijo Hernán Jiménez, analista de Forex Chile.

Un poco más al norte, en Perú, el sol seguiría rompiendo el techo de máximos históricos que logró en la semana previa y el Banco Central continuaría con su compra diaria de dólares en un intento por detener la apreciación de la moneda, que acumula una ganancia del 2,71 por ciento en lo que va del año.

En Colombia, el peso se depreció el viernes un 0,19 por ciento a 1.794,35 unidades por dólar. Sin embargo, se prevé que retorne a niveles de 1.780, incrementando la apreciación del 6,42 por ciento que mantiene en lo que va del año.

El peso uruguayo no sería la excepción ya que seguiría de cerca el comportamiento del real, aunque enfrenta intervenciones oficiales para mitigar apreciaciones excesivas. La moneda oriental cerró en 18,75 unidades por dólar el viernes y acumuló un alza de un 6,9 por ciento en lo que va del año.


Reuters