La energía recibida por el sol es inagotable, renovable y libre de polución.

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Energía solar: un negocio rentable

Invertir en energía renovable no es solo ecológico sino lucrativo. A mediano plazo usted podrá recuperar la inversión inicial y tener utilidades.

10 de octubre de 2012

La energía recibida por el sol es inagotable, renovable y libre de polución. Transformarla y almacenarla para uso comercial es un negocio rentable y seguro para el medio ambiente y el inversionista.

Las huertas solares no exigen una inversión elevada en comparación a las ganancias que arroja el negocio, así lo describe el gerente de Energreencol, José Luis Arrieta. Explica que para lograrlo son necesarios dos elementos:

1. Un terreno. Que no debe sobrepasar los 2.500 m2. La huerta no exige un grandes hectáreas lo que permite administrarlo y cuidarlo de manera fácil. Y ahorrar en seguridad y adquisición de más terreno. Excederse lo llevaría a tener un parque solar que por sus magnitudes requerirá una mayor inversión.

Este tipo de energía no genera cambios en los ecosistemas donde se implementan. Por lo que usted puede diversificar el aprovechamiento del terreno.

2. Paneles fotovoltaicos. Laminas metálicas conductoras de energía que están valoradas en el mercado entre 120.000 y 200.00 mil pesos con una vida útil entre 15 y 20 años. En el terreno mencionado es posible ubicar 25 mil paneles de 1.000 cm2, lo que requiere una inversión de USD $2.7 millones.

Para garantizar una producción elevada y rentable es preferiblemente que se ubiquen estas generadoras de energía en zonas de alta radiación solar donde se garantice una cantidad elevada de horas de sol. Una vez instaladas, estas huertas serán capaces de producir electricidad para redes de distribución, empresas, viviendas o aparatos eléctricos.

Después del cuarto año, el dueño podrá recuperar la inversión inicial, y obteniendo el 100% de las ganancias los siguientes, beneficiándose por la venta y el ahorro debido a que usted mismo contará con la fuente de energía para su consumo.

Invertir en energía renovable es una buena opción para proveer de energía a lugares que no gozan del servicio, fincas productivas que quieren rentabilizar su negocio u oficinas que buscan reducir el gastos.