El 50% de los colombianos está demandando medios de pago electrónicos.

Transacciones

En la onda de los pagos electrónicos

Colombia se encuentra en un posición similar a la de Chile y Brasil con respecto al nivel de desarrollo de medios de pago electrónicos, tanto bancarios como de establecimientos.

1 de agosto de 2013

En tendencias de pago, el país presenta un escenario de potencial crecimiento sostenido, pues el 50% de la población está demandando medios de pago electrónicos, frente a 47,3% registrado en 2011.

Así lo revela un estudio realizado por Tecnocom, empresa española de tecnología, que presentó los resultados de su “Informe sobre Tendencias en Medios de Pago para Colombia y Latinoamérica”.

El estudio, realizado en colaboración con la consultora Analistas Financieros Internacionales (AFI), determinó que Colombia es un caso interesante dentro de los países analizados, porque sigue la tendencia de aumento en el número de tarjetas a lo largo de los últimos cinco años, lo que muestra un mayor dinamismo en tarjetas de crédito.

El uso de los medios de pago refleja la incidencia del entorno económico en los patrones de consumo de la población. En ese sentido, la evolución del entorno económico ha condicionado los patrones de consumo de los ciudadanos y, con ello, la utilización de los medios de pago.

Según la investigación, se usa todavía más el efectivo para la realización de las operaciones comerciales. Sin embargo, aunque el débito –entre los medios de pago electrónicos- es el preferido por la población para realizar sus pagos (31,3% de penetración), se mantiene en un porcentaje muy similar al crédito.

Lo que explica esta situación es que, si bien hay más productos de pago aplazado (hay un 32,6% de los colombianos con tarjetas de crédito bancario y un 12,4% con tarjetas de establecimiento), el pago inmediato es de uso más frecuente (especialmente en la compra del hogar y otros productos cotidianos).

América Latina grandes tasas de crecimiento

En alguno de los demás países analizados de América Latina, se reflejan grandes tasas de crecimiento. El mayor desarrollo de las infraestructuras de pago, ha contribuido al lanzamiento de nuevos productos y servicios financieros orientados a fortalecer la inclusión financiera de los segmentos masivos y fomentar la formalización de los agentes en la economía.

No paran de crecer las tarjetas de crédito y débito en los últimos cinco años, debido, entre otros factores, al incremento del empleo y la renta media per cápita, al mayor nivel de cultura financiera de los segmentos con menores ingresos, a la creciente bancarización, a la expansión de la infraestructura física de los puntos de acceso (cajeros automáticos y POS). En este crecimiento tienen también mucho que ver los esfuerzos y campañas llevadas a cabo por los gobiernos, entidades financieras y establecimientos comerciales.

El constante proceso de renovación que está viviendo el sector de medios de pago no podría explicarse sin el impulso de empresas y gobiernos. Las primeras han intensificado el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones en los pagos minoristas, mejorando la infraestructura y desarrollando el sector del comercio electrónico, que prácticamente se ha duplicado en América Latina en los dos últimos años ($35,000 millones de dólares).

Por su parte, los gobiernos impulsan la implementación de políticas públicas (entrega de subsidios) a través de medios electrónicos al mismo tiempo que establecen mecanismos de protección al consumidor, medidas que favorecen absolutamente la adopción de medios de pago electrónicos.

El potencial de los medios de pago electrónico permite aspirar a profundizar el acceso al sistema financiero en América Latina, donde todavía existen importantes segmentos sub-atendidos o no atendidos por entidades formales, y para los que los pagos móviles constituyen una excelente oportunidad de inclusión financiera, dada la gran penetración del teléfono móvil en la región. A ellos se unen las tarjetas prepago, entendidas como los instrumentos en los que se anticipa el importe del gasto.

El Indicador Tecnocom sitúa a Brasil como el país con mayor nivel de desarrollo de los medios de pago de América Latina.

En síntesis, el creciente uso de la telefonía móvil como dispositivo con el que realizar pagos, unido a la promoción de tarjetas de pago privadas y en co-branding impulsadas por las cadenas de distribución minorista, contribuyen a mejorar la penetración de medios de pago electrónicos entre la población de América Latina.

Brasil se sitúa a la cabeza de este continente (por encima de 66 puntos sobre 100), seguido de Chile y Colombia (50 puntos sobre 100), mientras que en México, Perú y República Dominicana los resultados son más modestos, debido al relativamente bajo número de usuarios de medios de pago electrónicos.