Vuelve la confianza empresarial en Alemania

La confianza empresarial de Alemania mejoró en enero por tercer mes consecutivo, a su máximo en más de medio año, en una nueva evidencia de que la mayor economía europea cobra impulso otra vez después de la contracción del final del año pasado.

El Ifo, un grupo de expertos con sede en Múnich, señaló que su índice del clima de negocios, basado en un sondeo mensual entre unas 7.000 firmas, aumentó a 104,2 en enero desde 102,4 en diciembre.

Eso venció a la mediana de las previsiones en un sondeo de Reuters entre 40 economistas que anticipaban que el indicador subiría a 103,0 e igualó el cálculo más alto en la encuesta.

El dato hizo subir al euro a un nuevo récord en 11 meses contra el dólar.

"La crisis terminó. Al menos, en Alemania", dijo Carsten Brzeski, economista de ING en Bruselas.

"La contracción del cuarto trimestre del 2012 parece haber sido de corta duración", sostuvo.

La economía alemana se mantuvo fuerte durante los primeros dos años y medio de la crisis de la deuda de la zona euro pero tropezó en el segundo semestre del 2012 porque las firmas postergaron las inversiones y las exportaciones se resintieron ante el desfavorable panorama económico de Europa y otras partes del mundo.

La economía se contrajo el 0,5% en el cuarto trimestre del año, estimó este mes la Oficina Federal de Estadísticas.

Pero en la medida que se disipan los temores de que la moneda única pueda resquebrajarse, y mientras mejora el panorama de otras partes, los economistas apuestan a un retorno al crecimiento al comienzo de este año.

"La situación es buena, los mercados financieros se calmaron. Las firmas alemanas lo sienten", dijo el economista del Ifo, Klaus Wohlrabe, a Reuters.

Algunas empresas alemanas ya han puesto la mira en otros mercados para contrarrestar la debilidad de la zona euro.

Las ventas de Beiersdorf se incrementaron 4,7% en 2012 ya que la empresa, que elabora las cremas Nivea, se apoyó en Rusia y Brasil para contrarrestar el clima débil en su mercado doméstico.

Las expectativas de las empresas a futuro mejoraron por cuarto mes seguido. Su opinión sobre la situación actual también mejoró, tras caer el mes pasado, con un incremento a 108,0 desde 107,1, un avance mayor de lo esperado.