Christine Lagarde, directora del FMI.

Economía

"Mea culpa" del FMI llega demasiado tarde para Grecia

Los griegos reaccionaron con una sensación mezclada de reivindicación e indignación ante la admisión del Fondo Monetario Internacional, de que cometió errores en su manejo del rescate del país.

6 de junio de 2013

La furia era palpable en Atenas, donde la receta de austeridad de la UE y el FMI que el Fondo, con sede en Washington, dijo haber evaluado erróneamente, ha dejado hileras de negocios con persianas cerradas y a muchas personas vagando por las calles en busca de alimentos en los cestos de basura.

"Gracias por decirlo, pero no podemos perdonarlos", dijo Apostolos Trikalinos, un recolector de desperdicios de 59 años y padre de dos hijos.

"No nos engañemos. Nunca nos devolverán nada. Estoy apenado por toda la gente que se suicidó por la austeridad ¿Cómo haremos que vuelvan?", dijo Trikalinos.

El FMI reconoció el miércoles que subestimó el daño hecho a la economía de Grecia debido a los recortes de gastos y alzas impositivas aplicados en un salvamento, lo que fue acompañado por uno de los peores derrumbes económicos en la historia experimentados por un país en tiempos de paz.

Un análisis del rescate dijo que el Fondo se apartó de sus propios estándares para sobrestimar la cantidad de deuda que Grecia podía tolerar, y que tendría que haber instado con mayor insistencia y más temprano a los prestamistas privados a asumir pérdidas para reducir el peso de la deuda de Grecia.

Los griegos dijeron que ya era hora.

Han visto desaparecer alrededor de un tercio de sus ingresos desde que comenzó la crisis de endeudamiento en 2009 y esta llevó al país a pedir dos salvatajes de la UE y el FMI. La tasa de desempleo ha llegado a casi 27 por ciento y las tasas de suicidio han subido fuertemente.

Los jóvenes han sido los más golpeados, pues casi el 60 por ciento está desempleado.

"El FMI admite su crimen", declaró el periódico izquierdista Avgi en su portada. El periódico de más circulación Ta Nea lo llamó "el reconocimiento de un fracaso".

En los pasillos del poder, algunos funcionarios sugirieron que la admisión podría fortalecer su mano en tratativas futuras con el FMI, la Unión Europea y el Banco Central Europeo, llamados la troika en forma colectiva, sobre un alivio de deuda o nuevas medidas de austeridad.

"Que el informe reconozca que hubo errores en el programa de Grecia en el pasado es positivo y esperamos que no sean repetidos en el futuro, creando la necesidad de medidas coercitivas", dijo un alto funcionario gubernamental a Reuters.

El gobierno conservador griego no ha hecho comentarios sobre el informe del FMI antes de unas declaraciones del primer ministro Antonis Samaras planeadas para más tarde el jueves.