Mario Monti, primer ministro italiano, tendría que salir a pedir ayuda próximamente, según los analistas | Foto: EFE

Internacional

Italia, ¿próximo candidato al rescate?

Después de España, Italia cae cada vez más bajo presión. Tanto, que ya hay expertos que creen que la tercera economía de la zona euro también deberá solicitar ayuda financiera a la Unión Europea.

Alianza DW
12 de junio de 2012

Italia debe pagar cada vez más intereses para obtener dinero fresco. El Gobierno de Roma tuvo que garantizar este martes hasta un 6,66 por ciento de interés por sus bonos públicos. Los inversores están tratando de deshacerse de sus bonos italianos y eso hace que florezca el comercio con los seguros por incumplimiento crediticio. Mario Monti cae cada vez más bajo presión.

El Gobierno de Madrid acaba de constatar que no está en condiciones de rescatar a sus bancos sin la ayuda de la Unión Europea. La ministra de Finanzas de Austria, Maria Fekter, ya no descarta que Roma tampoco sea capaz de hacerlo. En un programa de la televisión austríaca, Fekter dijo este lunes que Italia deberá, sin embargo, intentar salir sola del atolladero.

La crisis tomaría otra dimensión


España, la cuarta economía de la eurozona, acaba de aceptar que no puede solucionar el problema de su deuda sin la ayuda de Bruselas. Si Italia, la tercera economía europea, tuviera que tomar el mismo camino, la crisis de endeudamiento de la zona euro cobraría una dimensión aún mayor.

Sin embargo, si se compara la debacle italiana con la española, se revelan diferencias decisivas. Jürgen Pfister, economista del banco alemán Bayern LB (Banco del Estado de Baviera), nombró, en conversación con Deutsche Welle, la más importante: “Italia no tiene un problema con sus bancos porque no vivió la explosión de la burbuja inmobiliaria como España”.

Las dificultades actuales de Roma yacen, por ejemplo, en el retraimiento de su rendimiento económico, según Pfister. Y eso es el resultado de las medidas de austeridad tomadas por el Gobierno de Monti. Además, es de esperar que éstas también “dejen profundas huellas y frenen el crecimiento económico el año próximo”, subrayó el experto.

Pero, a diferencia de España, los esfuerzos de Roma parecen haber resultado en un importante avance en cuanto a la reducción de su nueva deuda. Mientras el déficit de Italia podría aspirar a llegar a un índice del dos por ciento, “España, con algo de suerte, se desplazaría hacia el 6,5 por ciento”, explica el experto. Además, hay otras razones por las cuales Roma cuenta con mayores posibilidades para solucionar sus problemas de manera autónoma. Al respecto, Pfister se refirió a la competitividad de la economía italiana y al mayor desarrollo de la infraestructura industrial de ese país.

Presión electoral

En Italia, la actual “tecnocracia gobernante” llegó al poder, de la mano del experto en Finanzas Mario Monti, acompañada de grandes expectativas. Pero, de acuerdo con Jürgen Pfister, esas expectativas no llegaron a cumplirse, y, en definitiva, también un Gobierno formado por tecnócratas tiene que preocuparse por volver a ser electo en los próximos comicios si es que pretende desarrollar sus tareas durante un lapso más o menos prolongado. Ya se está haciendo sentir la presión de la próxima campaña electoral -dice el economista del Bayern LB- transformando al gabinete de Monti en un “gobierno a pedido”.

Así las cosas, Jürgen Pfister, al contrario de Maria Fekter, la ministra de Finanzas de Austria, no opina que Roma se vea obligado a solicitar ayuda financiera a la Unión Europea. Está convencido de que los italianos lograrán mantener sus problemas bajo control sin ayuda externa. De no ser así, señala Pfister, la eurozona tendría un problema más, ya que “los paquetes de rescate –aún si se los ampliara- no serían suficientes para salvar a la economía italiana”.