Las exportaciones estadounidenses a Rusia están en riesgo porque el Congreso no levantó una provisión de 1974 conocida como la enmienda Jackson-Vanik que impide "relaciones comerciales normales permanentes" con Moscú. | Foto: Archivo Semana

Internacional

Estados Unidos se asusta por ingreso de Rusia a la OMC

Las exportaciones estadounidenses agrícolas, de aeronaves y de otros sectores a Rusia podrían verse afectadas al menos que se apruebe pronto una ley que reconozca que su ex enemigo de la Guerra Fría es miembro de la OMC.

22 de agosto de 2012

Tras 18 años de negociaciones, Moscú cumplió con los requerimientos de Estados Unidos y de otros países y el miércoles se convirtió en el último país en sumarse a la Organización Mundial de Comercio.

El Peterson Institute for International Economics estima que las exportaciones estadounidenses a Rusia podrían duplicarse en los próximos cinco años a 11.000 millones de dólares como resultado de los recortes de tarifas y otras reformas que Moscú puso en marcha para unirse a la OMC.

Pero en el corto plazo, las exportaciones estadounidenses a Rusia están en riesgo porque el Congreso no levantó una provisión de 1974 conocida como la enmienda Jackson-Vanik que impide "relaciones comerciales normales permanentes" con Moscú. "Para que los trabajadores, industriales, proveedores de servicios y agricultores saquen ventaja de la membresía de Rusia a la OMC, el Congreso debe actuar para terminar con la cláusula Jackson-Vanik y autorizar relaciones comerciales normales permanentes con Rusia", dijo en un comunicado el representante de Comercio estadounidense Ron Kirk.

La enmienda Jackson-Vanik relacionó las tasas de Estados Unidos a los derechos de los judíos a emigrar libremente en la ex Unión Soviética.

La Casa Blanca ha estimado que Rusia ha cumplido con la provisión por cerca de 20 años. Pero sigue en los libros y no cumple con las reglas de la OMC que exige que los miembros tengan relaciones comerciales normales en una base incondicional.

Grupos de negocios estadounidenses esperan que el Congreso apruebe esta norma en septiembre tras un mes de receso, pero temen que la legislación pueda ser retrasada para después de las elecciones presidenciales del 6 de noviembre o posiblemente hasta el 2013. "Todo el mundo está listo, excepto Estados Unidos. Hasta que el Congreso lo apruebe (...) Moscú es libre de negar a Estados Unidos la totalidad de los beneficios de sus reformas", dijo Thomas Donohue, presidente de la Cámara de Comercio estadounidense.

La aerolínea rusa Aeroflot podría decidir comprar aviones al fabricante europeo Airbus y no a Boeing, mientras que las empresas de trenes rusas podrían adquirir equipamiento a Siemens en vez de a General Electric, sostuvo Aslund.            


Reuters