La concentración en Atenas fue un desfile de banderas europeas y griegas y de exigencias de dimisión contra el gobierno de coalición de Tsipras. | Foto: Bloomberg

Europa

Grecia entra en 'default' con el FMI

El Fondo Monetario Internacional confirmó el martes que Grecia no realizó un pago por 1.500 millones de euros, por lo que se convirtió en la primera economía desarrollada en estar en mora con el organismo.

30 de junio de 2015

El no pago, el mayor en la historia del Fondo, es equivalente a un default, ya que implica una violación de las obligaciones de Atenas.

El portavoz del FMI, Gerry Rice, dijo que Grecia sólo puede recibir más financiamiento del organismo una vez que se ponga al día.

Rice confirmó que Grecia solicitó más temprano el martes una extensión del pago, lo que la junta directiva del Fondo considerará "a su debido tiempo".

Grecia pidió este martes prolongar dos años el programa europeo de asistencia financiera, y al FMI que le diera una prórroga para pagar 1.500 millones de euros, en unos movimientos desesperados para evitar el inminente default.

Sus socios europeos, reunidos de urgencia mediante una teleconferencia, rechazaron aprobar esta nueva demanda antes de medianoche. A esa hora expiraba el actual programa de ayuda de la zona euro, y al mismo tiempo, vencía el plazo del Fondo para que Grecia devolviera esos 1.500 millones.

Esas últimas maniobras griegas se produjeron en medio de un enrarecido clima político y social en el país.

Tras una manifestación de apoyo la víspera al gobierno, este martes fueron al menos 20.000 personas las que se concentraron ante el parlamento en Atenas a favor de decir "Sí" a las exigencias de los acreedores internacionales, en el referéndum que el primer ministro, Alexis Tsipras, ha convocado para el domingo.

A pesar de que el impago con el Fondo Monetario Internacional era inminente, el gobierno Tsipras afirmó que seguía "en la mesa de negociación".

Concretamente, el gobierno de Atenas propuso "un acuerdo de dos años" con el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (MEDE), el fondo permanente de rescate de la Eurozona, a fin de garantizar la "cobertura plena de sus necesidades de financiación" durante ese período.

El gobierno griego pide igualmente "una reestructuración de la deuda" pública, una de sus principales condiciones para un acuerdo con sus acreedores.

Paralelamente se pidió al Fondo, con sede en Washington, una prórroga hasta el mes de noviembre para devolver su préstamo, para permitirle seguir negociando, informó el viceprimer ministro griego Ioannis Dragasakis.

Los problemas del FMI con Grecia no acaban ahí. El país europeo debe pagar un total de 5.400 millones de euros a las cajas del Fondo este año, sobre una deuda total de 21.000 millones.

El próximo pago de 284 millones de euros está fijado para el 1 de agosto.

- Procedimientos habituales -

Los ministros de Finanzas de la Eurozona examinaron en una apresurada teleconferencia dicha propuesta.

"El último límite para extender el programa era este fin de semana. A raíz de los procedimientos parlamentarios es imposible extenderlo más allá de hoy" martes a medianoche, escribió el ministro eslovaco, Peter Kazimir, en su cuenta Twitter.

Pero las negociaciones continuarán el miércoles, explicó una fuente gubernamental griega.

El ministro finlandés de Finanzas, Alex Stubb, señaló por su parte que una extensión "no era posible" e indicó que una nueva demanda sería examinada "según los procedimientos habituales".

Alemania parecía un poco superada por la súbita aceleración de los acontecimientos.

La canciller Angela Merkel advirtió que su país no negociaría con Atenas "una nueva ayuda" antes del referendo del domingo.

Las bolsas europeas, preocupadas por el futuro inmediato de Grecia, siguieron cayendo este martes, aunque menos que la víspera. París perdió 1,63%, Fráncfort 1,25%, Londres 1,5%, y Madrid 0,78%.

El presidente estadounidense, Barack Obama, advirtió por su parte que la crisis financiera en Grecia podría tener un "impacto significativo" en el crecimiento de Europa y "disminuir" la expansión económica mundial.

La agencia de calificación Standard and Poor's puso en 'default parcial' a los cuatro grandes bancos griegos --NBG (Banco Nacional de Grecia), Pireo, Eurobank y Alpha--, a raíz de la instauración de un control de capitales para evitar la fuga masiva de divisas. La agencia Fitch había tomado la misma decisión el lunes.

- El default -

A las puertas del referéndum previsto para el domingo en Grecia sobre el plan de ayuda propuesto por los acreedores, los bancos permanecen cerrados y los comercios funcionan a cámara lenta.

El impago ocurre en una semana extraordinaria para el país, en la que los bancos y la bolsa de Atenas están cerrados hasta el 6 de julio inclusive.

En virtud del corralito vigente desde este lunes, los clientes de las entidades sólo pueden retirar un máximo de 60 euros por día y persona. A partir del miércoles, cerca de mil sucursales abrirán excepcionalmente para permitir a los jubilados que no tienen tarjeta de crédito sacar un máximo de 120 euros para toda la semana.

"El gobierno griego reivindicará hasta el final un acuerdo viable dentro del euro. Ése será además el mensaje del NO a un mal acuerdo, en el referendo del domingo" 5 de julio, insistió un comunicado del gobierno.

Prueba de la voluntad firme del gobierno de seguir adelante con la consulta, este martes se creó una página web específica: http://www.referendum2015gov.gr/

- 'Grecia es Europa' -

La concentración en Atenas fue un desfile de banderas europeas y griegas y de exigencias de dimisión contra el gobierno de coalición de Tsipras.

"Grecia es Europa" y "Sí a Europa" eran dos de las consignas coreadas.  los manifestantes desafiaron la lluvia y se reunieron en la plaza Syntagma, frente al Parlamento.

Para muchos de los participantes,Grecia se juega su futuro en Europa si fracasan definitivamente sus negociaciones con sus socios de la UE.

El lunes, más de 13.000 partidarios del partido izquierdista gobernante Syriza se manifestaron en el mismo lugar para apoyar el "no" en el referendo, la opción que defiende el propio Tsipras.

(AFP y Reuters)