Kobe Bryant, el jugador de los Lakers afectado por quiebra de Power Balance | Foto: Web

NBA

El deportista que se declaró en banca rota por Power Balance

Kobe Bryant, el jugador de los Lakers era uno de los principales acreedores de la empresa creadora de las famosas pulseras que favorecían el equilibrio. Esta semana se declaró en quiebra al destaparse la estafa.

27 de noviembre de 2011

Kobe Bryant lleva seis meses sin jugar en la NBA, porque los representantes de los jugadores y de los clubs no se han puesto de acuerdo en la negociación de condiciones laborales (lockout). Pero además de esta situación el jugador es uno de los más damnificados por el escándalo de Power Balance, después de conocerse que no hay base científica sobre los beneficios de las manillas del equilibrio.

Bryant era uno de los principales acreedores de esta empresa. Ahora, tras su quiebra, el jugador ha perdido más de US$400.000 y no es el único damnificado. Al jugador de los Clippers, Blake Griffin también se le adeudan US$20.000 y los Kings (cuyo estadio se llama Power Balance Arena) han perdido algo más de US$100.000 en concepto de patrocinio.

Desde hace seis meses la NBA está negociando con los jugadores la repartición de los contratos e ingresos de la liga, lo que en Estados Unidos se conoce como lockout.

El objetivo inmediato de propietarios y jugadores es llegar a un acuerdo para evitar la vía judicial antes de que una corte federal se pronuncie sobre el cese de actividades en el segundo deporte más importante en Norteamérica.

Se dice que este fin de semana se podría llegar a un acuerdo económico colectivo con los jugadores para que aceptaron bajar sus ingresos de la liga, por cualquier concepto, del 57% al 50%. De ser así desde el día de Navidad se podrían empezar a gestionar los trámites para retomar la temporada, que está dejando millonarias pérdidas.

En la NBA todo llega a una bolsa común y se reparte equitativamente entre las 30 franquicias, equipos y jugadores, cada punto porcentual de los ingresos de la liga equivalen a US$40 millones, aproximadamente. En el acuerdo colectivo pasado, la repartición había quedado en 57% para jugadores (más de 200 personas); y 43% para dueños de equipos (30 personas).

Los medios internacionales señalan que si no se llega a un acuerdo este fin de semana, el panorama volverá a recrudecerse ya que la próxima semana se espera la intervención de un magistrado federal de Minnesota.