Costa Rica la oportunidad

Por las ventajas de la geografía, la tecnología y la educación, Costa Rica es una excelente plataforma para los negocios. Hay buenas posibilidades para quienes piensan en el largo plazo.

1 de septiembre de 2001

Costa Rica está de moda. Esto es obvio desde el momento en que el viajero desembarca en el nuevo terminal del aeropuerto internacional Juan Santamaría. En la fila, mientras se espera el sello del pasaporte, es posible oír los más diversos idiomas y acentos, canadienses, alemanes, argentinos, colombianos, gringos, mexicanos. Cada día llegan al país centenares de personas para hacer turismo ecológico, inventar negocios a partir de los nuevos acuerdos comerciales internacionales, buscar empleo, matricularse en una de las universidades que están apostando a ganar ventaja internacional a partir de la diversidad de nacionalidades de sus estudiantes y profesores, o simplemente para ver cómo es este país que tiene tan buena fama. El mercadeo de la imagen internacional de Costa Rica ha sido altamente exitoso y todos quieren conocer esta tierra de paz y oportunidades, que no tiene "ingredientes artificiales", según lo proclama la campaña publicitaria que promueve su imagen en el exterior. Este país, cuya población no llega a los 4 millones de habitantes, recibe más de 1 millón de turistas al año.

Para el viajero que llega de Colombia, el fenómeno costarricense primero sorprende y luego genera admiración e incluso envidia. Las similitudes entre San José, la capital, y algunas ciudades de Colombia son impresionantes. Por el clima, la vegetación, el trazado urbano y la apariencia de la gente, esta podría ser una ciudad de clima templado en Colombia. Pero en Colombia hoy se ven pocos visitantes internacionales e inversionistas nuevos, y no se sienten el optimismo y la tranquilidad que se respiran en Costa Rica. La envidia viene cuando se conocen más datos. La superficie de Costa Rica, 51.100 km2, es comparable a la de la zona de distensión que en Colombia le ha sido entregada a las Farc, pero el país se ha convertido en un foco de atracción de la inversión extranjera.



En 1997, Costa Rica se anotó un éxito mundial cuando logró convencer a la empresa estadounidense Intel de crear en su territorio una planta para la producción de microprocesadores, con una inversión de US$500 millones. En 1999, esta planta generó en 1999 cerca del 40% de las exportaciones de Costa Rica. Si bien la producción se ha reducido recientemente, a causa de la desaceleración mundial en el mercado de computadores, la inversión de Intel se ha convertido en un polo de atracción de inversión extranjera, con empresas que van desde Hewlett Packard en computadores hasta Procter & Gamble en productos de consumo y Abbott en productos farmacéuticos. No solo se trata de grandes multinacionales, sino que el país tiene fortalezas en empresas nuevas, como Art in Soft, una firma de software en la cual han invertido Intel y Microsoft, o Xeltron, una productora de máquinas que seleccionan los granos de café durante la trilla por su calidad, con base en un proceso óptico.



Costa Rica aspira a consolidarse como un país de alto atractivo para la inversión extranjera al sumar sus condiciones de ubicación geográfica, acceso privilegiado a mercados por medio de acuerdos internacionales, biodiversidad y alto desarrollo tecnológico (generado a partir de un cluster de tecnología que se ha disparado con la entrada de Intel).



Aunque el crecimiento económico del país se frenó en los últimos 2 años, se espera que la inversión extranjera vuelva a tomar impulso en el mediano plazo. El crecimiento del PIB estuvo por encima de 8% entre 1998 y 1999, pero se redujo a apenas 1% en el año 2000, debido a la recesión internacional y a la pérdida de dinamismo de la economía de Estados Unidos. Para el año 2001 se estima un crecimiento cercano al 3%. Sin embargo, se espera que la inversión extranjera se reanime en el mediano plazo, gracias a la red de acuerdos de libre comercio que Costa Rica ha tejido. Hoy tiene acceso privilegiado al mercado de Estados Unidos, como miembro de la Iniciativa de la Cuenca del Caribe. Además, tiene un acuerdo de libre comercio con México y este año firmó otro con Canadá. También tiene acuerdos con República Dominicana y Chile. El acuerdo con Canadá es particularmente importante, pues es el primero que se firma entre un país desarrollado y una economía pequeña, y contiene provisiones avanzadas en la definición de asimetría entre economías, que podrían tener gran influencia en el curso que tomarán las negociaciones del Area de Libre Comercio de las Américas (Alca). La población de canadienses en Costa Rica ha crecido rápidamente y se estima hoy en cerca de 15.000 personas, muchos de ellos ejecutivos jóvenes que han sido enviados por sus empresas para aprender del medio y explorar las oportunidades que el acuerdo comercial abre para los próximos años.



Un elemento clave de la estrategia ha sido la creación de zonas francas, donde las empresas no pagan impuestos por la importación de materias primas y bienes de capital y disfrutan una exención del 100% de impuestos de renta por 8 años y 50% por los siguientes 4 años. En el año 2000, las exportaciones de zonas francas generaron el 51% de las exportaciones de bienes del país.



Esto no significa que todo sea perfecto. El rápido ritmo de cambio ha hecho que afloren tensiones sociales que podrían convertirse en problemas serios en el modelo de desarrollo del país. Reformas estructurales vitales en los sectores de comunicaciones y energía generaron amplias protestas sociales y no han podido ser aprobadas. El país ha sido exitoso en el logro de elevados indicadores de desarrollo humano, la seguridad social es buena y el nivel de educación es elevado (el analfabetismo es de 5% y la gran preocupación actual para atraer inversionistas extranjeros no es que no exista suficiente personal que hable inglés, sino que es necesario mejorar el nivel de su inglés técnico). El elevado nivel de vida de la población, sin embargo, genera contradicciones. La mano de obra es costosa, los precios son relativamente altos en comparación con otros países de la región y ya comienza a ser difícil conseguir trabajadores para tareas de baja calificación (que hoy suelen ser desempeñadas por inmigrantes nicaragüenses). Costa Rica se está moviendo hacia un modelo en el cual atrae inversión de alto valor agregado, basada en la disponibilidad de talento. Sin embargo, si las altas exigencias de la población, acostumbrada a un modelo económico que privilegia el bienestar de los individuos, retrasan el proceso de cambio, como está ocurriendo con las reformas estructurales, las ambiciones del país tendrían que reducirse.



Oportunidades de negocios



En este contexto, hay numerosas oportunidades para los colombianos. Las importaciones de bienes y servicios son el 71% del PIB en Costa Rica y los consumidores están un tanto cansados de sus proveedores tradicionales, México y Estados Unidos. Esto abre oportunidades para los productos colombianos, que gozan de prestigio por su calidad. Hay claras oportunidades en productos como confecciones (ropa casual, ropa interior femenina), manufacturas de cuero, productos metalmecánicos (maquinaria agroindustrial, ferretería, insumos para la construcción), alimentos y bebidas (galletas, confites, licores) y servicios de ingeniería (ingeniería, software).



El problema está en que se trata de un mercado pequeño. "Los exportadores colombianos deberían ver a Centroamérica como un mercado ampliado para sus productos", dice Sergio Escobar, director de la oficina de Proexport en San José. "Individualmente, son mercados pequeños que se saturan rápido, pero considerados como un todo, pueden implicar para una empresa duplicar el mercado que tiene en Colombia. Si se ven las cosas así, hay grandes oportunidades en sectores inexplotados. Ahora mismo se está realizando, por ejemplo, un proyecto de exportación de lombrices desde Colombia hacia Honduras y Guatemala".



Costa Rica es un buen punto de entrada a Centroamérica, especialmente para manejar las operaciones desde allí. El propio Proexport trasladó sus oficinas para Centroamérica y México de Guatemala a Costa Rica hace pocos meses.



Desde el punto de vista de las inversiones, las oportunidades son interesantes, pero el inversionista tiene que medir con mucho cuidado el terreno que pisa. Aunque plantean amplias posibilidades, las zonas francas pueden ser aprovechadas fundamentalmente por empresas grandes que desde un principio están orientadas hacia la exportación. En el ámbito interno también hay posibilidades para el inversionista mediano y pequeño, pero es importante conocer el terreno. Hay buenas oportunidades en empresas de servicios, donde los colombianos tienen ventajas comparativas.



Uno de los grandes límites es el tamaño del sistema financiero. Solo hay dos bancos internacionales, el Citi y el Scotia, y los demás son pequeños. El acceso al crédito para los colombianos no es fácil, pues sus empresas son desconocidas (aunque sean importantes en Colombia). "Para entrar rápidamente en el sistema, lo mejor es que las empresas traigan garantías emitidas por un banco colombiano. Eso les permite acelerar la entrada y facilita las cosas mientras desarrollan una reputación local", dice Felipe Rivera, un colombiano que se desempeña como vicepresidente del Citibank en Costa Rica.



Las perspectivas



Costa Rica puede ser un foco de oportunidades para los negocios de empresas colombianas en el futuro. Eso no significa que las cosas sean fáciles allí. Atraídos por la actitud cálida y abierta hacia los empresarios y las empresas de nuestro país, y estimulados al ver que se trata de un país pequeño, los colombianos tienden a creer que se trata de un mercado fácil. Eso no es cierto. Costa Rica ha estado abierta a corrientes de pensamiento y comercio. Los estándares de calidad en Costa Rica están fijados por la relación con Estados Unidos, de modo que no son bajos. Casi cualquier puesto administrativo en una empresa implica el dominio del inglés (en Colombia todavía estamos lejos de esa exigencia). El país tiene numerosas demandas insatisfechas, pero se está abriendo cada vez más a la competencia internacional, de modo que será crecientemente competido.



Para los colombianos, el principal atractivo de Costa Rica está en que es una plataforma para montar operaciones de exportación hacia el resto de América Central, Estados Unidos e incluso la propia Colombia. La diversidad cultural seguirá incrementándose y concentrará más atención de parte de la gente de negocios del mundo entero. Podría ser más fácil diseñar planes ambiciosos de expansión con alianzas internacionales desde Costa Rica que desde Colombia. La afinidad cultural y la actitud amistosa de los costarricenses hacia los colombianos son activos muy valiosos dentro de esta perspectiva. Para quienes tienen proyección de largo plazo, esta es una oportunidad que vale la pena examinar.



Plataforma exportadora



El mayor éxito de la estrategia de Costa Rica ha sido la creación de la planta de Intel en 1997, con una inversión de US$500 millones, que a su vez se convirtió en un imán que para nuevos inversionistas.



Los "ticos" convirtieron el tamaño del país en ventaja, destacando la capacidad para reaccionar con rapidez y flexibilidad a las necesidades de la empresa. El Cinde, organismo encargado de atraer inversión al país, de carácter privado, fue un interlocutor efectivo, pues se presentó ante Intel como la voz de los costarricenses y ante el gobierno como la voz de los inversionistas.



Además, se convirtió en un gestor de soluciones a toda clase de problemas. En 1999, Intel generó el 40% de las exportaciones de Costa Rica.



Economía



Buscando un nuevo crecimiento



La caída de la economía de Estados Unidos ha tenido duras consecuencias para Costa Rica.



Sin embargo, se espera que la inversión extranjera se recupere, atraída por la red de acuerdos comerciales del país.



Una relación productiva



Colombia y Costa Rica mantienen las mejores relaciones diplomáticas y comerciales, con posiciones comunes en muchos temas, desde el café hasta el banano y desde la OMC hasta el Alca.



En el momento actual, la relación es particularmente estrecha. Costa Rica acaba de ratificar el acuerdo de áreas marinas con Colombia, en discusión desde 1984. El canciller de Costa Rica visitará Colombia en octubre. La ministra Martha Lucía Ramírez viajará a Costa Rica en septiembre. El embajador de Colombia en Costa Rica, Julio Riaño, mantiene excelente comunicación con todos los niveles del poder público y privado en Costa Rica. La oficina de Proexport para Centroamérica se desplazó de Guatemala a San José hace poco. El momento es inmejorable para que la gente de negocios de Colombia explore posibilidades en Costa Rica.





Exportaciones



Un país orientado al exterior



En la década del 90, Costa Rica logró cambiar las exportaciones tradicionales por productos modernos de las zonas francas.



El crecimiento exportador se logró sin necesidad de inducir grandes devaluaciones de la moneda.



Para exportar



Antes de comenzar, tenga en cuenta las sugerencias de algunos empresarios que ya han trabajado el terreno:



No subestime el desafío. El nivel de exigencia es alto y el país, aunque es amistoso, tiene secretos que toma tiempo dominar. Vaya con calma.



Coja la maleta y viaje. Los "ticos" creen en el contacto personal.



El producto colombiano es apreciado por su calidad, pero no crea que eso le permitirá tener precios altos.



Identifique la época de compra adecuada. Cada producto tiene su estacionalidad, especialmente si el distribuidor es mayorista.



La oficina de Proexport en San José puede ayudarle a elaborar agendas de visitas a clientes. Utilícela.



Asegure la exportación. Segurexpo ofrece un seguro de exportación de bajo costo. No corra riesgos.



Infórmese sobre las posibilidades que ofrece Bancoldex para financiar a sus clientes en Costa Rica. Este puede ser el factor que decida una negociación.





Turismo



Puente entre culturas



A este país de 4 millones de habitantes llega más de 1 millón de turistas cada año.



Es una de las actividades que generan mayores divisas, por debajo de las zonas francas pero por encima del café y el banano.



Para invertir

Actualmente, hay fuerte actividad de nuevos inversionistas de todos los tamaños en Costa Rica. Es importante tener cuidado, pues el país es pequeño y, si bien los niveles de consumo son altos, los nichos pueden saturarse rápido. Es indispensable investigar a fondo antes de invertir.



Para las empresas colombianas medianas, hay oportunidades en sectores como servicios y construcción.



"Hay numerosas empresas familiares medianas que entran en una fase de transición generacional y están buscando socios, o aspiran a encontrar un comprador porque los hijos no quieren manejar el negocio", afirma Karen Peters, de VP Business Brokers, una consultora en transacciones de empresas.



A los inversionistas les conviene gastar todo el tiempo que puedan en el país antes de comprometerse. Aunque es muy afín a los colombianos, las similitudes esconden diferencias culturales y de prácticas de negocios que pueden llevar a cometer errores graves.