La creación de la CFDI de Estados Unidos abre nuevas oportunidades

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sancionó hace un tiempo la ley para la mejor utilización de inversiones para el desarrollo (conocida como Build Act), que establece la creación de la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de Estados Unidos (Usidfc, por su sigla en inglés).

Con un presupuesto de US$60.000 millones para otorgar en forma de préstamos y garantías a privados dispuestos a hacer negocios en países en vías de desarrollo, la Usidfc se perfila como la herramienta de ese gobierno para hacer frente al avance de China como el gran financista de África, Asia y Europa del Este.

Su objetivo es facilitar la participación de capital y las habilidades del sector privado en el desarrollo económico de países de ingresos bajos y medios, y de países en transición hacia economías de mercado a fin de complementar los objetivos de la política exterior de los Estados Unidos.

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El nuevo fondo, que se estima que entrará en funcionamiento en el segundo semestre de 2019 –y que se extenderá hasta el 30 de septiembre de 2038 con posibilidad de ser renovada–, podrá realizar préstamos o préstamos garantizados, actuar como inversora minoritaria adquiriendo acciones o intereses financieros en entidades, proveer seguro o reaseguro a entidades del sector privado y a entidades soberanas, proveer asistencia técnica, administrar proyectos especiales, establecer fondos empresariales, emitir obligaciones y cobrar tasas por servicios.

La Usidfc buscará afianzar la labor de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid, por su sigla en inglés) y de la Corporación para Inversiones Privadas en el Extranjero (Opic, por su sigla en inglés) –creada en 1971–, y que dejará de funcionar luego de unos meses de transición. La agencia se plantea como una institución superadora de este esquema existente. Cuenta con el doble de fondos que la Opic y con un mayor abanico de instrumentos financieros disponibles para impulsar a las empresas estadounidenses a invertir en economías emergentes.

¿y colombia? 

Y, aunque la nueva era de financiamiento de Estados Unidos, estaría lista para 2019, Colombia ofrece el portafolio más grande de APP de infraestructura de América Latina, lo que la convierte en un destino interesante para los inversionistas. Así lo considera Dimitri Zaninovich, ex presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).

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“Colombia hoy tiene una posición envidiable en la región, que debe aprovechar para atraer inversionistas: por un lado, su respeto por las instituciones y seguridad jurídica generan confianza; por el otro, tiene el portafolio más grande de APP de infraestructura de América Latina, que ofrece oportunidades muy interesantes de inversión a largo plazo”, aseguró.

Considera Zaninovich que Colombia se destaca por su tradición de respeto por las instituciones y los contratos. Y, al tener en marcha el programa más grande de APP de  infraestructura, genera grandes oportunidades, “este es un fenómeno, que se ha venido presentando desde las adquisiciones portuarias, la entrada de un gran jugador en concesiones aeroportuarias y del ingreso de inversionistas internacionales a algunos proyectos de vías 4G”.

Este ‘fenómeno’ proyecta el ex presidente de la ANI, seguirá consolidándose, en la medida en que sigan llegando fondos en grandes proyectos o en la medida que los sponsor actuales cedan participación en los proyectos para facilitar los cierres pendientes.

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