Presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke

Internacional

Bernanke defiende plan de compra de bonos del Tesoro

El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, busca contrarrestar las críticas contra el plan de las institución financiera de comprar US$600.000 millones en bonos alegando que es necesario para impulsar la economía y reducir el desempleo. Pero advierte que el programa no puede sobrevivir por sí solo.

19 de noviembre de 2010

Sin un mayor estímulo, el alto desempleo podría mantenerse por años, dijo en un discurso, el primero desde que la Fed anunció el programa el 3 de noviembre. Pero al presentar sus argumentos, Bernanke corre el riesgo de que se diga con mayor insistencia que está hundiendo a la Fed en el partidismo político.

El presidente de la institución financiera también señala que la economía podría fallar si países en problemas financieros en el extranjero no reciben el apoyo suficiente.

Bernanke presentará su discurso en una conferencia de la banca en Francfort, Alemania. Una copia estuvo disponible el jueves en la noche.

El programa de la Fed de compra de bonos del Tesoro pretende vigorizar la economía en parte bajando las tasas de interés, aumentando los precios de las acciones y animando a un mayor gasto. Interés más bajos alentarían a las empresas a pedir más créditos y expandirse.

Acciones con precios más altos aumentaría la riqueza y la confianza de individuos y empresas, sugirió Bernanke. El gasto adicional aumentaría los salarios, las ganancias y el crecimiento.

Pero el programa de la Fed ha disparado una avalancha de críticas tanto en Estados Unidos como en el exterior.

A nivel nacional, quienes se oponen al plan, entre ellos líderes republicanos en el Congreso y funcionarios de la Fed, dicen que dudan que la propuesta ayude a la economía. Temen que más bien podría hacerle daño, provocando inflación y llevando a compras especulativas en Wall Street.

En una cumbre de líderes mundiales en Corea del Sur la semana pasada, China, Alemania, Brasil y otros países advirtieron que el plan de la Fed le daría a los exportadores estadounidenses una ventaja competitiva en los precios al inundar los mercados mundiales con dólares. Una moneda estadounidense más débil hace que los productos de Estados Unidos sean más atractivos para compradores extranjeros.

 

AP