Dilma Rousseff, presidenta de Brasil | Foto: Bloomberg

Finanzas

Bancos de Brasil enfrentan rebajas de calificación y enfriamiento del crédito

La industria bancaria recibió rebajas de calificación desde Fitch en un contexto en que los analistas anticipan que caerá tanto la calidad del crédito como la rentabilidad del negocio.

28 de octubre de 2015

Los bancos de Brasil se han unido a lista de sectores afectados por la crisis que experimenta la economía y esta semana Fitch Ratings recortó las notas de tres estatales: El de Espiritu Santo, el de Brasilia y el de Rio Grande do Sul. La acción es consecuencia de la rebaja a las calificaciones del gobierno y se suma a las que hizo la entidad a cuatro bancos privados la semana previa. 

Moody´s tampoco es optimista sobre el sector y en un informe reciente indicó que “la recesión en Brasil seguirá hasta el año próximo aumentando los riesgos sobre los activos y presionando la rentabilidad de los bancos, en consecuencia mantenemos una perspectiva negativa”. 

Pero ¿Qué está pasando? Entre los factores que afectan al sector está la desaceleración del crédito en los bancos privados y públicos como consecuencia de una menor demanda por préstamos y una postura más conservadora de las entidades financieras a la hora de otorgarlos. 

“El ministerio de Hacienda, ha estado limitando la transferencia de fondos del Tesoro a bancos públicos reduciendo el subsidio implícito al crédito en los bancos públicos, particularmente en el Banco Nacional de Desarrollo. Esto está contribuyendo a desacelerar la originación de crédito”, explicó Goldman Sachs en una nota.     

Los últimos datos disponibles muestran que el crédito total creció 0,8% en septiembre, lo que implica una caída en términos reales del 0,4% y aunque los bancos públicos siguen creciendo lo hacen menos rápido que en el pasado. 

A esto se suma que en un país donde el desempleo y la incertidumbre están a la orden del día, los consumidores tratan de endeudarse menos, en especial para comprar bienes durables como electrodomésticos o vehículos. 

“Creemos que el detonante para las acciones de bancos brasileros no es si las ganancias aumentarán o caerán moderadamente en los próximos años sino la perspectiva de un escenario en el que las utilidades y la rentabilidad están severamente dañadas”, dijo JPMorgan en un análisis del sector. La firma asegura que el mayor impacto negativo puede venir del deterioro de los préstamos a las empresas.