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| Foto: 123RF

EQUIDAD DE GÉNERO

Por exceso de tareas y estereotipos, las mujeres no ocupan cargos directivos

Además de los estereotipos acerca de la igualdad laboral entre hombres y mujeres, se debe adicionar la sobrecarga de trabajos que ellas asumen para cumplir en la vida personal, familiar y laboral; esto les está impidiendo llegar a altos cargos dentro de una empresa.

10 de febrero de 2018

Estadísticas de Kpmg indican que del 100% de las mujeres que están trabajando en Colombia, tan solo el 7% de ellas puede ubicarse en una posición de liderazgo o un cargo directivo.

Al respecto, Isabella Gandini, socia líder del Área Laboral de Norton Rose Fulbright, aseguró que en compañías retail, donde generalmente las que más hacen compras son mujeres, al interior de éstas organizaciones, las juntas directivas en su mayoría están compuestas por hombres.

Gandini explicó que Colombia debe empezar a buscar una balanza para lograr que haya más participación femenina en esos órganos decisorios. “Lo que podría repercutir positivamente en las ventas de las compañías”.

Y es que en países como Islandia, que ha ocupado en los últimos años el primer lugar en el Índice de Igualdad de Género del Foro Económico Mundial, se continúa cerrando aún más la brecha de las prestaciones laborales entre hombres y mujeres.

Según BBC Mundo, este país se ha convertido en la primera nación donde, por ley, las empresas públicas y privadas deben demostrar que ofrecen los mismos salarios a hombres y mujeres en empleos de la misma categoría.

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En Colombia, según Gandini, el bajo porcentaje femenino en altos cargos en las empresas del país se debe a un tema cultural que abarca a Latinoamérica en general.

Pero eso no es todo, la experta en equidad de género indicó que también hay mujeres que se ponen limitaciones en el área profesional porque se autoasignan una cantidad de tareas paralelas a su trabajo que casi nunca pueden lograr equilibrar.

“Porque la mujer, aparte de ocupar cargos directivos culturalmente sigue siendo la líder en el hogar y en el tema familiar. Eso hace que ellas mismas se salgan del tema de la participación laboral porque se limitan y se salen de eso cargos por procurar tener un equilibrio entre la vida personal y la vida profesional”, explicó Gandini.

La mujer millennial

De acuerdo con la experta en equidad de género laboral, las nuevas generaciones vienen con más impulso y con muchas ganas de ser más importantes a la hora de tomar decisiones. “Son hijas de mujeres que han visto trabajando, o sea, ya tienen una visión un poco diferente y una cultura distinta arraigada. Sin embargo, ellas van a aguantar muchos de los problemas que hemos afrontado muchas mujeres que no somos millennials como el de encontrar un balance entre la vida personal y la profesional”, resaltó.

Isabella Gandini explicó que las mujeres millennials van a encontrar ‘techos de cristal’, lo que ha identificado como el límite para ejecutar ciertas acciones o proyectos. No obstante resaltó que el ímpetu y fuerza que traen consigo esta generación las va a ayudar a superar posibles obstáculos.

¿50/50?

Para Gandini no se trata de tener un porcentaje exactamente igual de hombres y mujeres trabajando en una empresa. Según ella, ese número dependerá de las compañías y de los cargos o competencias que se necesiten.

“Lo más importante es hacer un buen proceso de selección y saber qué equilibrio se necesita si más hombres o mujeres dependiendo de sus capacidades para así lograr los objetivos de la organización”, apuntó.

Además argumentó que no es un mito que tener más mujeres en una empresa es más productivo para esta. La directiva expresó que existen grandes diferencias entre ambos sexos y, bien equilibradas, puede elevar la competitividad y productividad de una compañía.

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¿Qué impide contratar más mujeres?

Lo que frena la inclusión de más mujeres al campo laboral tiene que ver con una cuestión legal y otra cultural. La vocera de Norton Rose Fulbright afirmó que, en cuanto a las cuestiones legales, las mujeres tienen licencia de maternidad, permisos para asistir a situaciones relacionadas con los hijos, embarazos, incapacidades, entre otros.

“Estas protecciones legales que, si bien buscan beneficiar a las mujeres, lo que termina pasando es que las perjudican algunas veces a la hora de seleccionarlas para ocupar algunos cargos de alto nivel”.

En cuanto a las tradiciones culturales, la directiva abundó en que en Colombia siendo aún común que ciertas actividades sigan siendo asignadas a la mujer como: las reuniones del colegio de los hijos, la limpieza del hogar –aunque hay hombres que han cambiado la regla en ese sentido-. “Esto también puede generar una barrera a la hora de tenerlas en cuenta en los procesos de contratación”.