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Gremio de parques de diversiones se opone a la nueva ley de horas extra

La Asociación Colombiana de Parques de Atracciones y Diversiones (ACOLAP) se opone a la nueva ley de horas extra, que redujo de 10 a 9 de la noche el pago de horas nocturnas, al considerar que es un golpe “colateral” para el sector.

31 de julio de 2017

El gremio que reúne a los diferentes parques en Colombia asegura que la sanción presidencial a la ley de horas extras nocturnas impactaría de forma “moderada” al sector pues generaría desempleo y con ello los niveles de consumo podrían caer.

“Una medida como la de las horas extra puede conllevar a que otros sectores de la economía empiecen a pensar en despidos o en no generar más empleo, lo cual termina afectándonos directamente a nosotros porque cualquier medida que afecte el bolsillo de los colombianos es negativa para nuestro sector”.  

Así lo explicó en una entrevista concedida a Dinero la directora ejecutiva de ACOLAP, Ángela Díaz, quien además dijo que los más afectados podrían ser los parques que operan en los centros comerciales por los horarios en los que funcionan.

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Así mismo señaló que aquellos parques que tenían planes de ampliar horarios nocturnos o en temporadas altas, así como las cajas de compensación que prestan servicios de recreación, “terminarán afectados sin lugar a dudas”.

A pesar de este escenario, la directora de ACOLAP dice que al interior del sector la empleabilidad se mantendrá estable. Se calcula que actualmente esta industria genera alrededor de 10.000 empleos.

ACOLAP considera inoportuna la medida en esta coyuntura de desaceleración económica pues asegura que cualquier afectación en la carga prestacional es inconveniente, más aún cuando los parques se han visto afectados por la situación del país.

A pesar de estas observaciones, el gremio celebra que se hayan tenido en cuenta las razones por las cuales era “altamente inconveniente” que la medida se aplicara a los trabajadores a partir de las 6 de la tarde como estaba previsto inicialmente.

“Cuando el colombiano de clase media de estrato 2, 3 y 4 tiene que decidir entre alimentarse, pagar vivienda o ir al parque, pues obviamente que la decisión es clarísima: no va ir al parque”, aseguró Ángela Díaz.

Muestra del impacto económico que supuestamente ha tenido este sector, es que el número de visitantes a los parques durante la temporada de vacaciones de mitad de año de 2017 (de junio y julio) se redujo hasta en un 30% con respecto al mismo período del año anterior.

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Además, varios de los principales actores del sector reportaron una caída de sus ingresos del 15% en promedio. Con tales perspectivas, prevén que sus ingresos alcanzaran los niveles de 2014 y 2015 al cierre del presente año.

De otro lado, Ángela Díaz dijo que la industria de los parques de atracciones y diversiones mantiene una expectativa muy alta frente a la petición presentada al Gobierno de mantener los beneficios arancelarios para la importación de equipos necesarios para la industria.

Entre ellos toboganes, carruseles, montañas rusas, entre otras atracciones que vienen importadas de países como Estados Unidos, Canadá, España, Francia o Italia, países líderes en la fabricación de estos productos.

Estos artefactos, según la directiva, son necesarios para el desarrollo de los planes de innovación y permanente actualización de los parques, en su rol de “jalonadores” de la industria turística en Colombia.

Ángela Díaz, hizo énfasis en que la sostenibilidad y crecimiento del sector es fundamental para su articulación con la estrategia de corredores turísticos planteada por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.

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La directiva recordó además que la petición de los parques de atracciones y diversiones se enmarca en los objetivos del programa Colombia Repunta, impulsado por el presidente Juan Manuel Santos en febrero pasado.

Con dicho plan se busca impulsar la economía del país y del mismo modo la eliminación de aranceles para al menos 3.400 productos, entre materias primas y bienes de capital para la industria.

En agosto terminan los beneficios arancelarios establecidos por el decreto 1625 de 2015, que estableció cero aranceles para varias subpartidas relacionadas con la industria.

“Podemos afirmar que la casi totalidad de importaciones registradas por la industria de parques de diversiones usan alguna de estas partidas del arancel de aduanas", puntualizó Ángela Díaz.

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