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Director ejecutivo de LAN Colombia, Hernán Pasman.

Transporte aéreo

La renovación de ElDorado ya se quedó pequeña

Las aerolíneas destacan la modernización de la nueva terminal internacional de ElDorado, pero ya insinúan ineficiencias y falta de espacio que no les ayuda a prestar un mejor servicio.

Henry Rodriguez
5 de febrero de 2013

Las empresas de transporte aéreo que ya utilizan la nueva terminal internacional del aeropuerto ElDorado reconocen que es una infraestructura que le ofrece al pasajero una excelente experiencia en tierra  en lo que se refiere a salas de abordaje, zonas comerciales e inclusive el área de migración. Sin embargo, hasta ahora no ayuda a que las operaciones sean más eficientes en tierra.

Así lo revela el director ejecutivo de LAN Colombia, Hernán Pasman, quien confirma que ese es el gran reto “lograr hacer más eficiente las operaciones en tierra y solucionar el problema del tráfico aéreo, de tal forma que se puedan atender más vuelos por hora”.

Pasman sostiene que Bogotá atiende aproximadamente 36 operaciones por hora con dos pistas, pero en el mundo existen terminales que han logrado aumentar su capacidad hasta en un 50% con muy poca inversión, “este  es el caso de Sudáfrica, México o Singapur”.

A pesar de la buena experiencia e impresión que tiene el pasajero, el directivo de LAN dice que es necesario afinar algunos procesos de equipajes. Además, insiste en que los temas críticos  para mejorar el servicio y especialmente lograr mejores indicadores de puntualidad son el tráfico aéreo y las pocas posiciones (zonas de abordaje) disponibles en tierra, que hacen necesario transportar en buses a los pasajeros hasta o desde el avión hasta una puerta de embarque.

Por otro lado, Pasman asegura que los próximos dos años serán críticos para aerolíneas y pasajeros por la construcción de la terminal para vuelos domésticos, pues “la ejecución de la obra requerirá de toda la voluntad y el esfuerzo de OPAIN para mantener informados a los pasajeros y mitigar las incomodidades que se presentarán como resultado de la obra”.

El director de LAN dice que los problemas de la nueva terminal internacional radican en la toma de decisiones. “Los recursos están, los planes existen, las autoridades son conscientes de las necesidades del Aeropuerto, sin embargo, es esencial agilizar los procesos de toma de decisiones para implementar lo que El Dorado requiere de manera urgente para ser competitivo y ofrecerle al país un servicio acorde con la dinámica de crecimiento que está viviendo”, advierte.

En eso coincide el director de American Airlines, José María Giraldo, quien dice que la Terminal 2 de ElDorado es una parte del plan general del aeropuerto, así que aunque tengamos esta nueva terminal, hay muchas obras en progreso que limitan el espacio útil en la rampa.

Como consecuencia, “muchos de nuestros vuelos han tenido que aterrizar en posiciones remotas alejadas de la terminal, lo cual sin duda genera algunas molestias para los usuarios”, sostiene el director de la aerolínea.

"Desde American Airlines, trabajamos constantemente para ofrecer la mejor experiencia de vuelo a todos nuestros pasajeros, pero cosas como estas se vuelven inevitables, y sólo hasta mediados del próximo año se irá solucionando”, agrega.

Sin embargo, Giraldo dice que la nueva terminal le ha permitido a la compañía mejorar el servicio gracias a las facilidades de emigración e inmigración, al igual que la zona de equipajes, que marcan una gran diferencia y permite que todos estos proceso sean más ágiles.

De igual forma, destaca que en el área del check-in, el contar con un número importante de máquinas de auto registro permite a los clientes encontrar más opciones para registrarse en sus vuelos.

Así mismo, el gerente de ventas de Delta Air Lines para Suramérica, Marcelo Costa, afirma que efectivamente la nueva terminal internacional del aeropuerto ElDorado es moderna y le dio una nueva cara al ingreso y a la salida de pasajeros en uno de los destinos con mayores perspectivas de crecimiento en la región, Bogotá.

Explica que el auge que ha tenido el aeropuerto es considerable y a medida que se aprueben más vuelos y  la proyección vaya en aumento, la planificación y el incremento de servicios deben concordar con la demanda para garantizar una buena experiencia y buen servicio a los pasajeros.

Sin embargo, Costa dice que a pesar de que las obras no han afectado las operaciones de Delta Air Lines en Colombia, suele darse un poco de confusión entre los pasajeros, en particular porque la terminal no ha entrado en funcionamiento en su totalidad, pero “esto es algo normal en un proceso de cambio y acondicionamiento en cualquier aeropuerto del mundo”.

Concluye que “hasta que la terminal no esté finalizada por completo, no se sabrá en su totalidad el alcance y los requerimientos que vaya a presentar el aeropuerto”.