Hernán Rincón deja la presidencia de Avianca

De manera sorpresiva, Avianca Holdings anunció este miércoles el retiro de su CEO, Hernán Rincón.  Su cargo será ocupado de manera temporal por Renato Covelo, actual Vicepresidente Legal – General Counsel. Así mismo, la compañía ya anunció que se encuentra en medio de un proceso de selección del nuevo CEO.

Hernán Rincón hizo oficial su decisión ante la Junta Directiva, los accionistas y los inversionistas al cumplirse su tercer año como CEO de Avianca. El ejecutivo, quien fue contratado para liderar el proceso de transformación de la empresa multilatina, anunció que su tarea fundamental "quedó cumplida" y las bases para el siguiente centenario de Avianca establecidas, siendo este, por lo tanto, el momento apropiado para retirarse.

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“Agradecemos a Hernán por sus innumerables contribuciones a Avianca Holdings en estos tres años, liderando exitosamente la alianza estratégica comercial con United Airlines, la cual fue clave para la transformación que hoy vivimos”, dijo Germán Efromovich, presidente de la junta directiva de Avianca Holdings. El empresario añadió que “Hernán está interesado en buscar otras oportunidades estratégicas habiendo dejado a Avianca preparada para asumir los próximos 100 años de su operación. Sin duda extrañaremos a Hernán pero apoyamos sus decisiones como parte de nuestro plan de transformación”, dijo.

Entre los logros de Rincón en este tiempo está la alianza estratégica y comercial con United Airlines y la modernización y digitalización de la compañía. Hace unas semanas Avianca oficializaba su intención de concentrarse en 3 unidades de negocio: pasajeros, carga y lifemiles, saliendo de otras actividades como courier, servicios corporativos en otros países, agencia de viajes y entrenamiento de personal. También se decidió reducir los pedidos de aviones a fabricantes como Airbus, sin contar la racionalización de algunas rutas.

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Según Avianca, se trata del plan de transformación empresarial más ambicioso de la historia de la compañía, el cual le permitirá a Avianca pasar de un modelo de crecimiento, a uno de liquidez y rentabilidad. Como parte de este plan se simplificó la flota de aviones mediante la venta de los Embraer y la transferencia de los turboprop a la empresa Regional Express Américas; se acordó la optimización de rentabilidad de la red; se vendieron activos no estratégicos y se logró también la renegociación de la orden de aeronaves A320 con Airbus.

De acuerdo con lo previsto en el pacto social y en el Acuerdo de Acción Conjunta Modificado y Reformulado (Amended and Restated Joint Action Agreement), la sociedad ha contratado los servicios de una firma de consultoría internacional para buscar el reemplazo definitivo de Hernán Rincón.

De alto vuelo

La historia de Avianca ha estado plagada de grandes turbulencias, cambios de mando y nuevos rumbos, convirtiéndose en uno de los casos más icónicos de transformación empresarial y desarrollo corporativo de Colombia.

A punto de convertirse en una empresa centenaria –Scadta, su origen, fue fundada en 1919-, Avianca durante el siglo pasado, en especial en la segunda mitad, pasó por tormentas, no solo en su gestión –muchas veces caracterizada por las operaciones tortuga que dificultaban el servicio- sino también por la lucha de poderes por quedarse con la aerolínea en la que estuvieron en un momento Julio Mario Santo Domingo, Carlos Ardila y Fernando Mazuera. Finalmente, en los 80, Santo Domingo se queda con el control de la aerolínea que fortalece su robusto portafolio de empresas en Colombia.

Sin embargo, incluso después de buscar fusiones –como la de Sam y Aces- y persistir las dificultades financieras y operacionales, a principios de este siglo Avianca entró al proceso de Capítulo 11 –ley de quiebras en Estados Unidos-. Con grandes tensiones y conflictos entre acreedores, accionistas y empleados, aparece la figura de Germán Efromovich que, en una movida que significaba invertir US$65 millones, y atender en el futuro pasivos como el pensional, se queda con la compañía, por encima de otras interesadas en ese momento como Copa, Taca y Lan.

Y empieza un plan de ajuste de una empresa, en manos del Grupo Synergy, que apenas unos meses atrás era considerada inviable y que 14 años después es la segunda aerolínea de Latinoamérica.

Efromovich con Fabio Villegas como presidente de la aerolínea, puso la casa en orden: renovó flota, adecuó aviones, ajusto el logo, retomó rutas que Avianca había retomado, incrementó frecuencias, reactivó sus programas de viajeros, y adecuó su estructura tarifaria. Pero también capitalizó el crecimiento de la clase media en Colombia y los ajustes de los precios en los pasajes que ‘democratizaron’ el acceso al servicio aéreo. Eso se empezó a traducir en mejores resultados financieros y en mayores posibilidades de expansión y desarrollo.

Cuatro comparaciones muestran la evolución de la aerolínea en estos 14 años: pasó de transportar 6,2 millones de pasajeros a casi 30 millones; los ingresos que en 2004 fueron de US$700 millones para el año pasado superaron los US$4.400 millones; de 2.500 empleados llegó a 19.000 y la flota de aviones que en 2004 era de 37 aviones, hoy es de 188 con una edad promedio de 6,8 años, una de las más jóvenes de la región. En 2004, la aerolínea era considerada una mala inversión; hoy es una de las multilatinas más importantes de la región con capacidad para transportar 30 millones de pasajeros al año y de generar ingresos por más de US$4.000 millones. 

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En este último periodo, Avianca ha tenido importantes hitos en su desarrollo, en especial al finalizar la década pasada: anunció la alianza estratégica con Avianca-TACA en 2011, lanzó su acción en la Bolsa de Valores de Colombia e ingresó a la de Nueva York, y vendió el 30% de LifeMiles al fondo Advent por US$344 millones. Al parecer este fondo ya estaría buscando la salida de su inversión y podría por en venta su participación en los próximos meses. Ya una banca de inversión trabaja en el proceso –Morgan Stanley- y hay varias opciones, como por ejemplo hacerlo en el mercado de valores y llevar la acción a la Bolsa o una recompra por parte de Avianca.

Otro proceso que se está cocinando es el de la alianza con United. Según Hernán Rincón, saliente presidente de la compañía, la negociación está muy adelantada y hoy “está en manos de los abogados”.

Sin embargo, la aerolínea también ha tenido que sortear grandes problemas, como la huelga de pilotos del año pasado que golpeó las operaciones y llevó a la empresa a recomponer algunos de sus destinos y hacer más eficiente su operación. O las tensiones entre socios que llegaron incluso a una demanda internacional que fue retirada hace unos meses.

Ahora, como dice Rincón, vienen varias tareas para los próximos 25 años. Por una parte, diferenciarse en un negocio de commodities, pues son muy pocos los proveedores de aviones y los aeropuertos son los mismos para todos. “La forma de diferenciarse es con el servicio y la experiencia”, señala el Presidente de la firma y agrega que los pilares son la gente y la tecnología.

Además, el camino para el futuro desde la estructura se está iniciando con un proceso de mayor diversificación de negocios y mercados. En los primeros, hoy Avianca tiene 12 negocios que complementan su operación –que representan el 20% de su facturación- y la idea es crecerlos y ofrecer las soluciones y los servicios al mercado y a otras aerolíneas.

Y el segundo es contar con operaciones directas y locales en países como Brasil, Argentina y México. En cada una de ellas, Synergy ya tiene activos donde en algunas ya comparte marca, como Avianca Brasil o Avianca Argentina. Synergy está finalizando la adquisición del 49% de Aeromar en México que opera principalmente en el mercado doméstico mexicano y realiza vuelos a ciudades foco en Texas (Estados Unidos). Al finalizar la transacción, la idea es que esta compañía obtenga un acuerdo comercial de licencia de la marca Avianca.

Lea a continuación la carta que envió Rincón a los colaboradores de la compañía: 

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