Con ingredientes para biocosméticos, emprendedores reemplazan cultivos ilícitos

Vhera Lucci es el nombre de la startup fundada por los emprendedores José Felipe Lara González y Julián González Juri, dos expertos en la creación de  cadenas de valor y servicios productivos.

 A ellos se sumaron posteriormente Juan Camilo Riveros Moyano, quien venía de trabajar en el sector palmero, y Óscar Caro, actual director Ejecutivo de la compañía de base social.

Lea también: Emprendedores donan el 50% de sus utilidades a los Wayuu en La Guajira

Los empresarios se han planteado el reto de convertirse en “la compañía cosmética de mayor influencia social en Colombia y América Latina”, razón por la cual han identificado las ventajas competitivas que brinda su entorno. 

“Identificamos dentro de nuestra cadena productiva el potencial de utilizar los recursos derivados de la biodiversidad que nos ofrece nuestro país, impactando comunidades campesinas”, dijo Óscar Caro a esta revista.

La línea biocosmética de la compañía en la actualidad cuenta con más de 20 referencias, las cuales tienen  ingredientes como Omega 3, 6 y 9, así como vitamina A y E.

Óscar Caro sostuvo que estos ingredientes “reconstruyen la barrera natural de la piel y ayudan a prevenir y combatir las manchas, arrugas, estrías y demás marcas causadas por la exposición a los rayos UV y el paso del tiempo”.

Una de las materias primas de sus productos es el Sacha Inchi, el cual habría sido traído a nuestro territorio por la comunidad indígena Inga en el siglo XV. Este árbol es rico en ácidos grasos esenciales y antioxidantes que permiten la regeneración de la piel.

Lea también: Premian a Medellín y Bogotá por sus proyectos innovadores que mejoran vidas

El director ejecutivo de la compañía Vhera Lucci dijo que este maní, con forma de estrella, es cosechado de manera ecológica por campesinos del Urabá Antioqueño, quienes lo proveen para las formulaciones cosméticas.

Además, el emprendimiento ha conformado un canal de venta directa en donde los consultores (también conocidos como ‘pioneros’ Vhera Lucci), son personas profesionales, amas de casa, campesinos, estudiantes universitarios, entre otros.

Ellos comercializan sus productos y obtienen un margen económico a su favor, además de acceso a varios de sus programas de educación financiera para el hogar.

“En el futuro se pretende aumentar y diversificar la cantidad de comunidades y regiones con las que se trabaja, como los indígenas Emberá Dobidá y Embera Eyabida, localizados en el Urabá chocoano y antioqueño respectivamente”, añadió.

Lea también: Top de las economías más innovadoras del mundo en el 2016

También prevén beneficiar a otras comunidades en los departamentos del Cauca, Tolima, Cundinamarca, Vichada y Boyacá que están produciendo Sacha Inchi y otros productos agrícolas orgánicos bajo el modelo de asociaciones.

Óscar Caro afirma que emprender hace parte del ADN de los seres humanos, por ello la compañía ha sentido “la necesidad de conquistar nuevos sectores de gran potencial económico y “conocer cada día más la industria del sector cosmético”.

Además de ello, el equipo de Vhera Lucci quiere dejar una huella en la construcción de paz pues consideran que “la contribución se logra con pequeñas acciones multiplicadas por muchos actores”.

Es así que en la más reciente de sus campañas comerciales han decidido contar con Ana Pacheco como modelo, una de las cientos de mujeres que se han desmovilizado de la guerrilla de las Farc para comenzar una nueva vida.

“Sin lugar a dudas ese será un buen momento (el posconflicto) para fortalecer nuestra operación en líneas generales. Nuestros objetivos se concentrarán en lograr más cobertura de mercado y en el desarrollo de nuevas líneas de producto con un componente de innovación muy alto, aprovechando la biodiversidad colombiana”, indicó Caro.

Lea también: Los departamentos colombianos en los que la innovación aún no florece