INNOVACIÓN Y EDUCACIÓN

La innovación es un proyecto que se construye desde la niñez, según estudio

Una nueva investigación publicada en Estados Unidos sugiere que alcanzar la innovación no es cuestión de azar, sino un proyecto a largo plazo que comienza en las aulas de clase y se consolida en el entorno social.

31 de julio de 2016

‘El ciclo de vida de los inventores’ es el nombre del estudio que confirma que las personas que están expuestas a un entorno innovador desde niños tienen mayores oportunidades de explotar su creatividad en el futuro.

Sin embargo, existen barreras económicas que impiden que los jóvenes accedan a entornos innovadores, según lo explica la investigación publicada por expertos de Harvard, Stanford, el Departamento del Tesoro de EE.UU. y el Instituto de Tecnología de Massachusetts.

Y agrega que el acceso a educación de calidad es tan importante como la cercanía que tengan estos jóvenes con personas que trabajen en campos innovadores y además que puedan apoyarlos en su proceso de formación.

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Dicha conclusión la dieron los investigadores estadounidenses luego de analizar los perfiles de las personas que solicitaron una patente entre 1996 y 2014 en su país.

El informe sugiere que es fundamental acortar las brechas sociales para impulsar una política de innovación más integral y decidida, con el objetivo de aumentar el número de inventores en el futuro.

Los mejores ejemplos en la aplicación de estas políticas los presentan las naciones que ocuparon las mejores posiciones en la categoría de innovación del más reciente índice de Competitividad Global del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés).

Suiza, situada en la primera posición del listado con una calificación de 5,8 sobre 7, es una muestra de la efectividad de las políticas de innovación aplicadas en el sistema educativo para alcanzar la excelencia.

Con 3.231 patentes registradas en el 2014 (la mayoría de ellas por residentes), este país demuestra que las metodologías educativas disruptivas tienen un impacto directo en la competitividad y la creatividad de las personas.

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En estas naciones se impone el movimiento ‘Edupreneurship’, un tipo de metodología de educación del siglo XXI basada en la innovación y el emprendimiento que busca personalizar la manera en cómo se imparte la enseñanza.

Una de las organizaciones precursoras de este modelo es Cengage Learning, una entidad con sede en Massachusetts (EE.UU) que trabaja de la mano de National Geographic para transformar la educación tradicional.

“Estamos presenciando el comienzo de una nueva era, en la que todos podemos ser fundadores, con la posibilidad de generar ingresos de nuestras ideas y contribuir a la solución de los problemas cruciales que siguen afectando a los que viven en el mundo que nos rodea”.

Así lo explica un reciente documento publicado por Cengage Learning en el marco de GESAwards2016, un evento que premia a las ‘startups’ o empresas jóvenes dedicadas a desarrollar soluciones creativas a las necesidades de educación a nivel global.

Vale la pena mencionar que durante la edición del año pasado, el 29% de las 350 empresas que participaron en el concurso provino de América Latina, lo cual demuestra el interés de los emprendedores de la región en resolver estos desafíos.

El presidente para América Latina de Cengage Learning, Fernando Valenzuela, aseguró que la región tiene “un alto potencial” para innovar dado el crecimiento del número de edupreneurs, quienes forman parte fundamental de la transformación de la educación del siglo XXI”.  

Dichos cambios principalmente están orientados en el papel de los profesores en aula de clase, así como en las expectativas de las nuevas generaciones en su futuro y el rediseño de los espacios físicos de las instituciones.

También destaca la integración de juegos a los programas de formación, talleres sobre realidad aumentada, opciones de aprendizaje informal, entre otras alternativas disruptivas.

Y es que para esa organización es trascendental que las naciones se enfoquen en “la preparación de los estudiantes para la economía del futuro” y comprendan que la formación es y será un “tema relevante en la agenda global”.

El cuidado de nuestro planeta, el impacto que tiene la desigualdad y el poder de la diversidad, son solo algunas de las “discusiones necesarias” que tienen que ganar protagonismo en la academia de cara al futuro.

Finalmente, Cengage Learning destaca que de a poco dichos debates llegan a las aulas gracias a la introducción de nuevas formas revolucionarias de los medios de comunicación y el avance del inglés como lengua global”, factores que vistos de manera amplia han “ayudado a derribar barreras”.