Heredó el negocio de su esposo y en doce años triplicó sus ventas

Realizado en alianza con 

No tuvo tiempo siquiera de procesar su pérdida. A pocos días de la muerte de su esposo, Ana Gabriela Cejudo tuvo que tomar las riendas del negocio.

Fue en diciembre de 2006, cuando Gabriela se puso al frente de Grupo Urba, al que renombraría como Nicxa, por las iniciales del padre de sus tres hijas, el empresario Nicolás Xacur Gamboa.

En ese momento, Gabriela tenía la responsabilidad de continuar la operación de 36 franquicias de Pizza Hut, Kentucky Fried Chicken, Burger King y Bisquets Obregón. “No tenía idea de cómo se operaban estas franquicias, no sabía absolutamente nada y no solamente tenía estos negocios, había uno de bienes raíces”, recuerda la empresaria que se ha convertido en la inversionista individual de franquicias número uno en el país, con 92 unidades.

Después de 24 años de ama de casa, Gabriela se vio obligada a poner en práctica los conocimientos que había adquirido en su maestría en administración y en los pequeños negocios que había emprendido, pues en la década de los noventa había sido franquiciataria de cuatro sucursales de Mini Mundo, una tienda de artículos escolares para niñas en Mérida, Yucatán.

Ese primer acercamiento al mundo de las franquicias le había permitido trabajar y hacer el rol de mamá y de ama de casa. En enero de 2007, Gabriela quería seguir con sus propios negocios, pues estaba a punto de expandirse a Quintana Roo con una quinta tienda de Mini Mundo, a la par de dirigir los de su marido, pero no fue posible. Se tuvo que enfocar en su nuevo papel de presidenta de Grupo Nicxa.

Gabriela cuenta que para ser una operadora de franquicias exitosa pasó muchas horas trabajando y aprendiendo todo lo necesario para su negocio. Empezó a estudiar en el IPADE desde que enviudó e incluso tomó un curso de lectura rápida para poder leer más sobre negocios.

Le puede interesar: Vendió su compañía y empezó de nuevo con una ‘startup‘ que va volando

También recurrió a empresarios y mentores que le ofrecieron su ayuda en el proceso de aprendizaje, incluso hasta ahora. “Me juntaba con las personas que sabían. Cuando iba a reuniones de franquiciatarios, me reunía con algunos con gran experiencia porque escuchando opiniones expertas tú tomas tus propias decisiones de negocio”, afirma.

Todo lo que no sabía Gabriela lo preguntaba o lo averiguaba y así fue como consiguió consagrarse como una ejemplar operadora de franquicias, a la que los franquiciantes buscaban para nuevas aperturas no sólo en Yucatán sino, en un inicio, en Quintana Roo. “Eso me da mucha satisfacción porque para lograr eso es porque estás haciendo bien las cosas.”

Ese trabajo fue reconocido en 2011 cuando Gabriela recibió el premio Juan Huerdo, galardón que otorga la Asociación Mexicana de Franquicias (AMF) a quien se ha destacado por su aporte al sector en México. Hoy Gabriela es la reina de las franquicias del sureste: con Burger King tiene presencia en cinco estados de la república: Yucatán, Quintana Roo, Campeche, Chiapas y Tabasco, y es la única que opera las marcas KFC, Bisquets Bisquets Obregón y Pizza Hut en Yucatán y Quintana Roo.

 Un negocio cuadrado

“A veces me critican porque soy demasiado cuadrada”, afirma Gabriela. Pero, aclara, sin disciplina tener éxito es imposible, sobre todo en el mundo de las franquicias donde debes seguir al pie de la letra el know how del franquiciante. Si el modelo ya está probado para qué hacer pruebas nuevas, recalca la empresaria que forma parte de varios comités de franquicias. Sin embargo, esto no está peleado con la innovación, es especial cuando se trata de tropicalizar para satisfacer a los consumidores.

“Soy obediente casi al cien por ciento porque a veces hacemos unas cosas diferentes debido a las diferencias culturales de los clientes”, dice, pero aclara que al hacerlo, su equipo siempre consulta a sus franquiciantes. “Esa ha sido la clave para ser una operadora exitosa.”

En ocasiones, advierte, los franquiciatarios pueden desesperarse al no ver un repunte en sus ganancias. Pero es un error querer recurrir a la innovación en los procesos; en vez de pensar en eso, hay que encontrar en dónde está el error en la operación y apegarse a los lineamientos. Gabriela lo experimentó cuando fue franquiciataria de una marca de tacos e insistió en hacer diferentes platillos para levantar las ventas, pero no fue una buena decisión.

 Estudiarlo todo

Pese a que Gabriela es meticulosa y estudiosa, el principal error que cometió es abrir una sucursal en una locación que no era la indicada, sólo por una corazonada. Eso le costó el cierre de algunas unidades. “Ahora ya aprendí que hay que hacer todo el estudio para poder hacer una apertura porque todo mundo te vende sus centros comerciales como algo maravilloso, pero hay dos cosas muy importantes para el éxito de una franquicia: el lugar y el estacionamiento”, admite.

Para evitar este error, las franquicias tienen métodos para determinar cuál es el sitio indicado para abrir. Debes saber si el tipo de gente que vive por ahí consume tu producto, recomienda la experta.

Le sugerimos: Colombiano impactó con su presentación en el Foro Económico Mundial

Después de 12 años, Gabriela ha constatado que para tener ventas hay que identificar los diferentes tipos de targets de sus franquicias que, aunque todas están en el rubro de alimentos y bebidas, son distintos. En este camino, presume, sus tres hijas han sido de gran apoyo, pues desde que eran pequeñas le ayudaban a saber qué estaba de moda en una época en la que no había redes sociales, y ahora que son adultas, todas trabajan con ella.

Esto ha sumado para que Gabriela sea la operadora individual número uno en México y lo ha conseguido sin socios externos a su familia en una época en la que el mundo de las franquicias ha evolucionado de inversionistas individuales a grandes grupos operadores o fibras (Fideicomisos de Infraestructura y Bienes Raíces) que han comprado cientos de restaurantes, como Alsea en México, que cuenta con 429 unidades de Burger King, a diferencia de las 50 sucursales de Grupo Nicxa.

En 12 años Gabriela ha logrado triplicar el tamaño del negocio que heredó y va por más. Para los próximos dos años tiene planeada la apertura de siete KFC, dos Bisquets Bisquets Obregón y la remodelación de todas las tiendas Burger King para luego hacer aperturas en nuevos mercados del país.

El paso siguiente es aliarse con Fibras para que estos inviertan y ella opere las franquicias. “Esa sería la culminación de mi carrera”, dice y asegura confiada: “Estamos en franco crecimiento de todas las marcas y mi ideal es seguir creciendo.”

Puede ver más de este contenido en https://www.entrepreneur.com/article/326788 

Le puede interesar: Estos son los programas de Innpulsa para este año