Presidente de Asofondos, Santiago Montenegro Trujillo.

RECURSOS

Cesantías se destinaron para momentos de desempleo

Asofondos reveló que del total de $3.46 billones de los retiros de cesantías, el 35,4% se utilizó para protección en momentos de desempleo, el fin para el cual fue creado este instrumento. Este porcentaje equivale a $1.2 billones, los cuales, en su mayoría, han beneficiado a trabajadores de bajos ingresos.

20 de enero de 2015

De acuerdo con las cifras de Asofondos correspondientes al ahorro de las cesantías en 2014, con corte al pasado 31 de diciembre, el segundo uso de las cesantías se fue a construcción o mejoramiento de vivienda con un 25,9% (898.425 mil millones), seguido por compra de vivienda con un 21,6% (746.759 mil millones), y por último financiación de estudios para el afiliado o su familia con un 9,1% (315.742 mil millones); el 8% restante se destinó a otros retiros autorizados.

Asofondos reiteró la importancia de preservar este ahorro bajo el propósito que originó su creación, "las cesantías son un gran aliado del ahorro y, por tanto, del trabajador que ve rentar este dinero, pero que también le permite contar con una protección en momentos de dificultad laboral", aseguró el presidente de Asofondos, Santiago Montenegro Trujillo.

Los beneficiados

En Colombia de casi 6 millones de trabajadores afiliados, cerca del 83% ganan menos de 2 salarios mínimos, lo que demuestra que los mayores beneficiarios de esta prestación siguen siendo aquellos trabajadores con menores ingresos, y más importante aún, dicho ahorro les ha permitido contar con una mayor protección y bienestar.

Sólo en los fondos de cesantías los trabajadores pueden escoger cómo invertir su ahorro: a través del esquema Multiportafolios, los afiliados cuentan con dos tipos de portafolio: corto y largo plazo. Cada uno tiene sus propias características de inversión, rentabilidad y tiempo de permanencia. La clave a la hora de elegir es saber el uso que le dará y por cuánto tiempo se mantendrán ahorradas; así por ejemplo el portafolio de largo plazo está orientado a los afiliados que conservarán sus cesantías por un periodo mayor a 1 año y el de corto plazo a aquellos afiliados que las utilizaran en un periodo corto de tiempo.

Las cifras indican que en ventanas de tiempo amplias, el portafolio de largo plazo genera mejores rentabilidades. Así por ejemplo, un afiliado que a comienzos de 2010 tenía $100 depositados en el portafolio de largo plazo, al retirarlos a finales de 2011, habría obtenido un saldo de $110,35. Sin embargo, si ese mismo afiliado hubiera dejado esos $100 hasta finales de 2014, el monto de sus cesantías, para entonces, habría sido de $128,09. Ahora si se toma el mismo ejemplo anterior pero asumiendo que los $100 están depositados en el portafolio de corto plazo, los resultados a finales de 2011 y 2014 serían de $107,36 y $120,5 respectivamente.