La menor incidencia de la pobreza la registró Bucaramanga y la mayor, Pasto.

Crisis dejará secuelas grandes en economía de AL

La crisis financiera tendrá secuelas perdurables en la economía real de los países de América Latina y el Caribe, entre ellas mayor desempleo, menor crecimiento económico, contracción comercial y déficits fiscales difíciles de superar.

11 de agosto de 2009

Así lo señaló Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la Cepal, durante el seminario El impacto "real" de la crisis económica global: una visión desde América Latina y el Caribe, con el que se inició la Escuela de verano sobre economías latinoamericanas, que imparte la División de Desarrollo Productivo y Empresarial de esta comisión regional de las Naciones Unidas.

Bárcena explicó los efectos de la crisis en la región a través de cuatro canales de transmisión de ésta: el contagio financiero, la caída en las remesas, el descenso de la demanda externa y los cambios en los precios relativos de los productos que los países exportan.

Uno de los sectores más golpeados por la crisis en la región, dijo Bárcena, fue el comercio, que en abril cayó 31,8% en relación con el mismo mes del año anterior. Las exportaciones descendieron 29,2 % mientras que las importaciones cayeron 34,6%, en el mismo período.

Entre otros pronósticos para 2009, destacó una caída de entre 5 y 10% de las remesas que recibe la región, así como de una reducción de entre 35 y 45 % de la inversión extranjera directa. El desempleo regional aumentaría hasta un 9%.

La Secretaria Ejecutiva de la Cepal aseguró que la competitividad internacional de los países de la región ha quedado limitada a los sectores intensivos en recursos naturales, por lo que resulta urgente incrementar las capacidades para agregar valor a las exportaciones de estos bienes básicos.

Aunque ya se aprecian signos de recuperación, Bárcena alertó que este proceso será lento y gradual. Advirtió asimismo que la recuperación de los índices sociales generalmente toma el doble de tiempo que la de los índices económicos, tal como sucedió durante la crisis de los años 1980, cuando los indicadores sociales tardaron 24 años en llegar a los niveles previos a la crisis y los económicos 12.

Hacia el futuro planteó un panorama con menor crecimiento de los países desarrollados, mayor participación de los países en desarrollo en el crecimiento global, sistemas financieros sujetos a regulaciones más estrictas y condicionamientos crecientes relacionados al cambio climático.

La Escuela de verano es un curso anual orientado a alumnos de postgrado y candidatos a estudios avanzados en la materia. Este año participan 29 alumnos provenientes de Argentina, Bélgica, Bolivia, Canadá, Corea, Chile, Ecuador, España, Francia, Italia y México.

El seminario inaugural de la Escuela de verano contó con la participación de Joseph Ramos, Profesor de la Facultad de Economía de la Universidad de Chile; Jorge Katz, Profesor e investigador del Centro Intelis I+E del Departamento de Economía de la Universidad de Chile; Joao Carlos Ferraz, responsable de las Áreas de Planificación, Gestión de los Riesgos y Pesquisa y Acompañamiento Económico del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social de Brasil, BNDES y Wilson Peres, Jefe de la Unidad de Inversiones y Estrategias Empresariales de la CEPAL.

Además, expertos de la Cepal y de organismos internacionales expusieron sobre los impactos de la crisis en las economías nacionales de Argentina, Brasil, Centroamérica y México.