Nuestro pequeño aporte al medio ambiente y a nuestro bolsillo.

Consejos para manejar que permiten economizar gasolina y contaminar menos el medio ambiente.

6 de diciembre de 2006

La planta motriz de nuestro vehiculo, motor de combustión interna, es la maquina más ineficiente desarrollada por el hombre, pero es también uno de los elementos que más atenta contra la naturaleza, porque contamina nuestra atmósfera por el alto volumen de uso que el hombre hace de este, en nuestro mundo actual.

La contaminación que genera se debe a varios factores, entre ellos se cuenta la avanzada edad de la mayor parte de nuestro parque automotor, sumada el mal mantenimiento y la no sincronización de la máquina. Esto genera la emisión de monóxido de carbono, gas letal para el ser humano y para el ambiente. Así mismo, nuestros combustibles domésticos poseen aun alto contenido de azufre que en la post-combustión son emanados al ambiente y esta es una de las fuentes primarias de la lluvia ácida en otras latitudes y la fuente de corrosión del mismo sistema de escape de los vehículos y la degradación física de la infraestructura sobre la cual cae como lluvia ácida.

Pero definitivamente, la mayor fuente de contaminación que este motor aporta al medio ambiente es desde el punto de vista térmico. De cada cien unidades de energía que hay internamente en el combustible, 25-30 unidades, en el mejor de los casos, son realmente aprovechadas como trabajo mecánico en un “motor de gasolina” y las restantes 70-75 unidades son emanadas al ambiente como calor a través del sistema de refrigeración, el sistema de ventilación de los frenos, el calor generado en las llantas, etc. Este calor es uno de los mayores gestores del muy nombrado efecto invernadero que actualmente agobia y degrada a nuestro planeta y uno de los focos generadores de los cambios climáticos que ya empezamos a notar.

De las 25-30 unidades de energía realmente aprovechadas como energía mecánica, nosotros como usuarios del vehiculo podemos, por malas practicas, llegar a utilizar realmente un 20% por destrucción de la misma. Es aquí donde se nos presenta un punto de oportunidad para hacer un aporte generoso, primero al ambiente y segundo, a nuestro bolsillo.

Ahora, desde el punto de vista económico, el precio de nuestro combustible en estos días es relativamente muy alto. Inclusive hoy, supera el valor del mismo en Estados Unidos. Este sobreprecio, además, se acentúa cuando comparamos el poder adquisitivo de las monedas y el ingreso per capita de las economías involucradas. No es lo mismo la degradación que la fluctuación del precio de este insumo hace en las finanzas personales de un norteamericano que en las de un colombiano.

Es importante aclarar que el hecho de que nuestro combustible sea más caro hoy que en Estados Unidos es una cuestión coyuntural debido a la política de desmonte de subsidios en nuestro país, pero da una idea clara del costo de este en nuestro bloque latinoamericano (excepto Venezuela) y puntualmente en nuestro país.

Con todo lo anterior, el alto precio del combustible actual y con las perspectivas de incremento que se vienen a corto plazo, quisiera dar unos sencillos consejos para lograr un pequeño ahorro en nuestro consumo con el fin de mitigar en algo nuestros gastos y de paso una módica contribución al medio ambiente.

· En el caso de compra de vehículo, fíjese en el rendimiento del mismo. Tome como referencia que un vehiculo sedan familiar (1.3 – 2.3 lt) rinde entre 45-50 Km/Gal, un vehiculo utilitario como los camionetas 4X4, Pick-up y los camperos rinden entre 25-30 Km/Gal, las micromáquinas (máximo 1 lt) rinden 50-60 Km/Gal, Vagonetas rinden 20-25 Km/Gal. Estos rendimientos son promediados y fueron tomados de la Agencia de protección ambiental de Estados Unidos. Tenga en cuenta que el rendimiento no mejora necesariamente con la inversión monetaria realizada, mas bien como referencia, este se incrementa a medida que la cilindrada del vehiculo también lo hace. En estos días el vehiculo comercial mas eficiente es el Toyota Prius Hibrido que rinde 97 Km/Gal en la ciudad y 82 Km/Gal fuera de ella.
· Ahora, desde el punto de vista de la motorización, un vehículo con motor Diesel es mucho más eficiente que un par de gasolina, pero la inversión inicial es mucho más alta, casi el doble. Hay que sumar como bondad a este tipo de motor que en nuestro país el ACPM es más barato que la gasolina y su actual subsidio perdurará más que el de aquella. Pero la recuperación de la inversión implica, igual que con la conversión a gas natural, el amplio y fuerte uso del vehículo, lo que los hace muy útil para el servicio público.
· No conduzca en forma agresiva. Es decir, no fuerce el vehículo a sus limites en tiempos muy cortos. No acelere y no frene a fondo, por el contrario haga los cambios de velocidad muy suavemente, tómese su tiempo si la situación lo permite. En lo posible mantenga una velocidad constante sin generar cambios bruscos.
· No mantenga el vehiculo en marchas bajas por mucho tiempo a altas revoluciones del motor. Por el contrario, apenas pueda, lleve su vehiculo a cambios altos.
· Abastézcase de combustible en las noches en estaciones reconocidas. Esto hace que la cantidad en masa suministrada sea mayor que en otras horas del día. El combustible es medido por volumen y no por masa. La temperatura altera el volumen, a mayor temperatura mayor volumen y menos masa.
· En el caso de transitar por vías nacionales o departamentales no supere los 80 Km por hora, que es el límite de velocidad permitida. Esto garantiza, primero, su seguridad física y además, después de este limite los rendimientos del vehiculo caen ostensiblemente y se hace más caro el combustible utilizado. Esto es debido a la carga aerodinámica generada por el viento sobre el vehiculo, que en otras palabras implica sobrecargar aun más el vehiculo. Esto implica un poco de paciencia, pues el tiempo de viaje se alarga un poco, pero logra dos beneficios importantes.
· Comparta el vehiculo con compañeros de trabajo o con amigos con quienes puede hacer algún acuerdo para subsidiar el combustible utilizado.
· Mantenga el vehiculo sincronizado y haga el mantenimiento preventivo en el tiempo previsto. Es fundamental mantener el filtro del aire limpio y utilizar el aceite de motor adecuado.
· Mantenga la presión de inflado de los neumáticos en los valores recomendados por el fabricante. No menos de 28 psi.
· No haga calentamientos excesivos del motor. Que no sean mayores a 30 segundos en motores de inyección electrónica. En caso de paradas excesivas en el tráfico de la ciudad, mayores a un minuto, corte el motor y reinícielo cuando requiera.
· Prevea los semáforos en rojo y en esos casos suelte el acelerador. Ponga la más alta marcha que pueda y permita que el vehiculo lo acerque con su motor en mínimas. En lo posible nunca detenga el vehiculo. Esta es la situación que mas energía destruye.
· No utilice en lo posible el aire acondicionado. No baje los vidrios de las ventanas cuando este circulando a velocidades altas. En vez de ello encienda el sistema interno de ventilación.
· Programe sus salidas para hacer varias diligencias con una única salida del vehiculo. Así mismo planee los recorridos para que este sean lo más cortos posibles.
· En lo posible no utilice accesorios que atenten contra la aerodinámica del vehiculo como las parrilla en el techo, spoileers innecesarios, cargas inadecuadas, etc.
· En lo posible, utilice el servicio de transporte masivo.
· Si el vehiculo no lo exige desde el punto de vista de presencia de detonación en el motor, utilice gasolina corriente y en el caso de requerir gasolina extra pruebe a mezclarlas empezando con proporciones mayores de corriente hasta encontrar el punto ideal.


Aplicando algunos de estos sencillos consejos se puede conseguir un ahorro de por lo menos un 10% en el consumo. Esto traducido a valores actuales en el caso de un ciudadano normal que posee un sedan familiar y que utiliza su vehiculo casi exclusivamente el fin de semana y esporádicamente entre semana, el ahorro anual puede ser de alrededor de $300.000 pesos. Cifra no tan despreciable en los momentos actuales y que pudiese ser doblada si el vehiculo en cuestión fuese una Pick-up, mini vagoneta, campero o camioneta.

Pero si fuésemos estrictos en el seguimiento de todos estos ítems podríamos llegar a un ahorro de cerca de un 25-30%, casi tan bueno como hacer una conversión a gas vehicular sin hacer ninguna inversión económica, únicamente cambiando nuestra forma de conducir, siguiendo las instrucciones de operación y mantenimiento dadas por el fabricante y siendo más tranquilos y pacientes a la hora de conducir.


*Ingeniero Mecánico
Especialista en Finanzas




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