Las elecciones para Presidente de la República tienen haciendo cábalas a los analistas. La expectativa crece y el próximo 11 de marzo tendrá su primera prueba de fuego con las consultas entre Iván Duque, Marta Lucía Ramírez y Alejandro Ordóñez, por un lado, y de Gustavo Petro y Carlos Caicedo, por el otro.Sin embargo, ese mismo día también se escogerán los miembros del nuevo Congreso de la República definiendo no solo un nuevo mapa político y sus implicaciones hacia la elección presidencial, sino también a los protagonistas de decisiones fundamentales en el campo económico que den sostenibilidad al sistema, y confianza a los inversionistas, empresarios y consumidores.El proceso electoral llega en un momento especial, cuando las calificadoras han enviado señales sobre su preocupación por el futuro de la economía de Colombia: Standard & Poor’s bajó la calificación a finales del año pasado y Moody’s acaba de hacer un cambio a ‘perspectiva negativa’. Ambas firmas advirtieron la necesidad de reformas urgentes.Recomendado: Calificadoras: el riesgo es del siguiente GobiernoDe hecho, ya se han planteado varias de ellas: una nueva reforma tributaria, una pensional, los ajustes que requiere el sector de la salud y el presupuesto de la Nación; pero también hay otros temas donde la discusión está abierta, como la regla fiscal –si es o no necesario flexibilizarla– o el Sistema General de Participaciones. Para el analista Pedro Medellín, gran parte de la agenda del Congreso pasará por lo fiscal.Para él será un escenario de cambios muy fuerte si al Congreso llegan con bancadas amplias el Centro Democrático y Cambio Radical que han anunciado propuestas agresivas en diferentes frentes.Dos hechos enmarcarán la agenda del próximo Congreso: por un lado, la fuerza que logre el nuevo Presidente de la República en materia de alianzas en el Legislativo para avanzar con sus proyectos y, por otro, quiénes serían los llamados en el nuevo Congreso a tomar las banderas de las discusiones económicas y fiscales, como en su momento lo hicieron Luis Guillermo Vélez, Víctor Renán Barco y Juan Mario Laserna.Las iniciativas y la maniobraPara Leonardo Villar, director ejecutivo de Fedesarrollo, hay grandes temas que serán eje de discusión en el Congreso: “Hay reformas claves, como la tributaria, la pensional y la del Sistema General de Participaciones”, advierte.Puede interesarle: ¿Qué piensan las calificadoras crediticias sobre Colombia?En el caso pensional algunos consideran que debe incluir una reforma al sistema de protección a la vejez, pues gran parte de la población no está en el mercado formal y no cuenta con protección.Frente a la tributaria, las propuestas de los candidatos han ido en el sentido de rebajar los impuestos, pero al parecer el margen de maniobra no es mayor, así como tampoco disminuir el gasto como porcentaje del PIB. “Se puede hacer más eficiente, pero la presión fiscal del gasto no va a ser tan fácil que baje, en cuyo caso se cae de su peso que con regla fiscal necesita más ingresos”, dice un analista.
Foto: Miguel Gómez, candidato al Senado por el Partido Conservador / Iván Marulanda, candidato al Senado por la Alianza Verde / Álvaro Uribe, Senador del Centro Democrático.Precisamente el otro eje de debate es la regla fiscal y la probabilidad de que quien llegue a la Presidencia la relaje, de acuerdo con las propuestas que se han presentado. Según algunos expertos, será una discusión muy compleja por cuenta de que las calificadoras están mirando a Colombia y una señal contraria podría llevar al país a perder el grado de inversión. La relajación de la regla debería ir acompañada de otras reformas que hagan parte de toda una estrategia fiscal.Para Villar, esta discusión sobre la regla fiscal es extemporánea mientras no se tomen decisiones claras de cómo moverse en dirección del ajuste fiscal.Lea también: Inversionistas extranjeros le temen a victoria presidencial de la izquierdaEn lo que sí coincide Villar con otros economistas consultados por Dinero es en que una de las reformas que viene tomando pista es al Sistema General de Participaciones –los recursos que la Nación transfiere por mandato de la Constitución a las entidades territoriales–. “Es un tema muy importante y fundamental. Se requiere una búsqueda de consensos, no solo entre partidos sino también entre regiones. Hay problemas muy grandes sobre qué tanta discrecionalidad deben tener los entes territoriales sobre los recursos que les da la Nación. La Comisión de Gasto Público planteó la idea de unificar en mayor grado los presupuestos del Sistema General de Participaciones y del de regalías”, agrega Villar.Este es un tema fundamental. Un economista recordó que, incluso, fue uno de los temas que se discutió en el paro de maestros del año pasado y el Gobierno quedó con la tarea de ver qué aspectos habría que arreglarle al sistema. “Ese tema necesita un profundo análisis porque como va, no aguantará todas las cosas que están pretendiendo que el sistema pague”, añade el analista.Sacar adelante estas reformas no será una tarea fácil, más aún cuando el próximo gobierno no tendrá –como hasta ahora se vislumbra– unas mayorías explícitas en el Congreso. Así las cosas, quien llegue a la Presidencia debe buscar un apoyo político alrededor de los proyectos económicos porque hoy la situación es compleja y el país puede entrar en una nueva bajada de calificación y en una situación crítica. Este –como dice Villar– puede ser el acicate para que se unan movimientos y partidos que no necesariamente votaron por el mismo candidato.Recomendado: Standard & Poor’s mejora proyección de PIB para Colombia en 2018Probablemente lo que va a pasar en el juego entre Gobierno y Congreso, sin mayorías, es el regreso a como funcionaba antes la política: armar coaliciones específicas para proyectos específicos.En el pasado, las agendas fiscales y económicas en su paso por el Congreso tuvieron protagonistas: Luis Guillermo Vélez, Víctor Renán Barco o Juan Mario Laserna en su momento tomaron esas banderas. La pregunta es si hoy se cuenta con figuras como ellos.En la próxima legislatura no estará Iván Duque quien, desde el Centro Democrático, ganó espacio en los debates económicos. Pero ya varios nombres empiezan a sonar, como Iván Marulanda, en la Alianza Verde; Jorge Enrique Robledo, del Polo Democrático; Gabriel Velasco y María del Rosario Guerra, en el Centro Democrático; David Barguil y Miguel Gómez, en el Partido Conservador; o Ángel Custodio Cabrera, en el Partido de la U.Pero antes de definir ese protagonismo, tras la elección, será necesario mirar las cargas en los partidos y las posibilidades que tienen los congresistas electos en las distintas comisiones, no solo la Tercera, donde está gran parte del tema económico. De hecho, Álvaro Uribe participa en la Séptima donde se tratan temas pensionales y de salud. El expresidente se ha convertido en un interlocutor obligado y, además de su papel en la comisión, es fundamental en las plenarias, porque asegura el quorum o lo deshace y si el Centro Democrático aumenta o al menos conserva sus curules será clave en los debates.Muchos de estos nuevos congresistas empezarán a tomar relevancia a la hora de armar los proyectos de ley. La próxima elección legislativa será clave y definirá gran parte del derrotero de la economía del país en los próximos años. Así que ese debe ser un Congreso Admirable.Puede interesarle: Empresarios, con la esperanza puesta en el 2018