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Venezuela interviene en mercado paralelo de divisas

El mercado paralelo de divisas en Venezuela permanecerá cerrado hasta que las autoridades implementen la plataforma que fijará una banda de precios para el dólar no oficial, operada por el Banco Central.

18 de mayo de 2010

Caracas - Las autoridades excluyeron además a los intermediarios bursátiles de las operaciones con divisas.

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha reiterado que iría con todas sus fuerzas contra los especuladores del mercado, para lo que la Asamblea Nacional aprobó en tiempo récord una reforma legal que regula las intermediaciones de títulos-valores con los que se genera el "dólar permuta".

En medio de un estricto control de cambio vigente desde el 2003, Chávez se vio obligado a devaluar este año desde 2,15 bolívares por dólar a 2,6 bolívares por dólar para importaciones de alimentos y medicinas, y a establecer un segundo tipo de cambio de 4,30 bolívares por dólar para otros sectores.

Sin embargo, empresarios han denunciado severos retrasos en las asignaciones de divisas, fundamentales en un país con altísima dependencia de las importaciones, por lo que justifican la necesidad obtener dólares por vías no oficiales, pese a que el tipo de cambio tocó máximos históricos de 8,2 bolívares este mes.

Aquí, los posibles escenarios para el mercado paralelo:

El mercado paralelo se reactiva, pero es poco eficiente

Uno de los escenarios que se muestra más probable es el de un mercado reactivado pero con menor oferta de monedas. La experiencia del Gobierno como administrador de divisas en medio del control de cambio está plagada de demoras y trabas.

Una prolongada escasez de dólares implicaría desabastecimiento de varios bienes, aumento de la inflación y profundización de la recesión en la que está sumido el país petrolero desde el 2009, una combinación peligrosa para Chávez meses antes de unos comicios legislativos clave.

Los mercados internacionales también muestran preocupación por los cambios en la política cambiara venezolana. La agencia Fitch Ratings dijo la semana pasada que los nuevos mecanismos podrían afectar las perspectivas de crecimiento de la nación sudamericana, comprometiendo su capacidad de pagar deuda.

Aunque Chávez dijo que su embestida en contra de los especuladores será contundente, el Gobierno no ha mostrado interés en clausurar definitivamente el mercado paralelo, sino en incrementar su control sobre el mismo.

La reforma de la Ley contra los Ilícitos Cambiarios, que entró en vigencia el martes, otorga al Banco Central exclusividad para hacer operaciones de compra-venta de divisas -en monedas o títulos valores- a fin de obtener la liquidación de saldos en dólares, para sí o para sus clientes, por su enajenación antes del vencimiento.

Todavía resta que el emisor presente la normativa necesaria para aplicar su nueva plataforma, que según informaron dependerá de la valoración de los títulos-valores en los mercados internacionales.

Analistas han dicho que la tardanza en la aplicación del nuevo sistema deberá ser cubierta con mayores asignaciones de divisas y dudan que se logre aplacar los precios, por lo que pronostican emisiones de deuda soberana para finales de año.

Se crea un mercado transparente, el Bolivar se fortalece

El mercado paralelo es opaco y sujeto a la manipulación de especuladores por no contar con una plataforma única de comercialización, regulación o supervisión detallada.

La teoría indica que la nueva plataforma podría corregir estas irregularidades y crear un mercado rápido y transparente, tal como lo prometieron las autoridades financieras.

"Si el nuevo sistema es ágil y transparente, y los bancos deciden participar de forma activa, el costo de transacción de las operaciones de cambio podría bajar", dijo en un comunicado la firma de análisis financiero Global Source Partners.

No obstante, el bolívar no se fortalecerá hasta que la alta demanda de dólares sea satisfecha, en gran medida por la vía de entrega de divisas a tipo de cambio oficial.

Los venezolanos acuden al mercado permuta movidos por la necesidad de cambiar bolívares por dólares ante la alta inflación, que reportó una aceleración de 5,2% en abril y acumula una tasa anualizada de 30,4 por ciento.