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Venezuela: Chávez critica muro fronterizo de EE.UU.

Bush decidió continuar con la construcción de la barrera a semanas de las elecciones legislativas en su país pautadas para el 7 de noviembre. Los republicanos consideran que la edificación del muro es quizás el mayor logro de sus políticas de inmigración.

1 de noviembre de 2006

Caracas.- El presidente venezolano Hugo Chávez afirmó el martes que Estados Unidos carece de moral cuando habla de "democracia, justicia y derechos humanos", y a la vez planea continuar con la construcción de un muro en gran parte de la frontera con México.

"Estamos viviendo una etapa crítica en la humanidad... ahí están los Estados Unidos que hablan, sin ningún tipo de moral, sobre la democracia, la justicia y los derechos humanos", expresó el mandatario en un acto en el teatro de la academia militar.

"Ahí están haciendo un muro de no sé cuantos kilómetros para colocar al sur de ese muro no sólo a México, a nosotros la América Latina", dijo al criticar al gobierno del presidente estadounidense George W. Bush, quien firmó la semana pasada una legislación que permitirá la construcción de nuevas barreras a lo largo de la frontera sur de Estados Unidos.

"Pretenden ellos parar a los pobres que cada día en masa se van para Estados Unidos producto de la miseria, el desempleo, el atropello de los poderosos" en la región, fenómeno causado según él, por "el modelo económico y político, liberal y capitalista, impuesto precisamente por ellos a los pueblos de la América Latina y a la mayoría de los pueblos del mundo".

Funcionarios en Caracas y Washington han intercambiado duras palabras y acusaciones en una escalada en las tensiones entre ambos países, particularmente después que Chávez llamó en septiembre "diablo" al presidente estadounidense desde el podio de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Chávez, un acérrimo critico de la política exterior estadounidense, ha denunciado reiteradamente los supuestos intentos de funcionarios estadounidenses por sacarlo del poder, mientras que el gobierno de Bush lo ha calificado de fuerza desestabilizadora en Latinoamérica y ha cuestionado su compromiso con la democracia.

 
AP