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Retos del nuevo Registrador Nacional del Estado Civil

Juan Carlos Galindo Vácha fue elegido como registrador nacional del estado civil, por los presidentes de las Altas Cortes, mientras se lleve a cabo el concurso de méritos para la elección del Registrador Nacional en propiedad.

5 de enero de 2007

Bogotá.- El bogotano Juan Carlos Galindo Vácha, abogado de la Universidad Javeriana, de 44 años de edad, casado, con cinco hijos, inició su gestión el dos de enero de 2007 como Registrador Nacional del Estado Civil, luego de su posesión el 17 de diciembre de 2006.

Con una maestría en Derecho y Economía de Seguros en la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica) y profesor por más de 15 años en el área de Historia del Derecho y Derecho Procesal Administrativo en la Universidad Javeriana, resaltó en su mensaje dirigido a los funcionarios de la Entidad, el valioso capital humano con el que cuenta la Registraduría y será éste, su punto vital para continuar fortaleciendo las áreas misionales de la Registraduría.

Desde el año 2001 se desempeñó como Procurador Delegado ante el Consejo de Estado y posteriormente como Vicepresidente en la Comisión de Control y Asuntos Electorales de la Procuraduría General de la Nación, cargo inmediatamente anterior al de Registrador Nacional.

En su condición de Procurador Delegado ante el Consejo de Estado, en materia electoral, intervino en el curso de los escrutinios a cargo del Consejo Nacional Electoral en la elección del Congreso de la República de 2002.

Coordinó las labores de control electoral en las elecciones de 2003 y 2006 y tuvo la oportunidad de conocer de cerca y de acompañar la preparación de este proceso en su condición de agente del Ministerio Público.

Dentro de sus prioridades como Registrador Nacional, se encuentran: la continuación de la ejecución del Proyecto de Modernización Tecnológica, la preparación de las elecciones de Gobernadores, Alcaldes, Diputados, Concejales y Juntas Administradoras Locales el 28 de octubre próximo, con todas las garantías de seguridad, transparencia y agilidad. Por último, el fortalecimiento institucional a través del mejoramiento de los procesos y actividades de la Registraduría Nacional del Estado Civil.