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Petróleo y crecimiento respaldarían euro vs dólar

28 de mayo de 2008

LONDRES (Reuters) - En momentos en que gran parte de la economía europea muestra una resistencia sorprendente y el petróleo se encuentra en una espiral alcista que parece imparable, el euro probablemente se aprecie aún más contra el dólar.

Impulsada por la inversión y el consumo, la economía alemana creció un 1,5 por ciento trimestral en los tres primeros meses del año, la expansión más fuerte desde 1996.

Aparte, el sondeo Ifo de la confianza empresarial alemana mejoró en mayo, pasando por alto la crisis del crédito, la debilidad en Estados Unidos y el alto costo de la energía.

Al mismo tiempo, el precio del petróleo, que tiene una alta correlación con la debilidad del dólar, llegó a un nuevo máximo histórico en torno a los 135 dólares el barril.

"Hay una retroalimentación," dijo Hans Redeker, jefe global de estrategia cambiaria de BNP Paribas en Londres.

"El Banco Central Europeo está cada vez más preocupado por los efectos de los precios más altos del petróleo, y los precios responden al debilitamiento del dólar, que cede cada vez más," dijo.

"Cuando se debiliten los indicadores económicos (en Europa), uno esperaría que la correlación entre el tipo de cambio euro/dólar y el petróleo también se debilite, pero por ahora ese no es el caso," agregó.

Tras un descenso contra el dólar al final de abril y comienzos de mayo, el euro recientemente ha repuntado y quebró la marca de 1,57 dólares para acercarse de nuevo a su máximo histórico por encima de 1,60 dólares registrado el mes pasado.

Si bien los datos económicos de la zona euro han estado mixtos, aún presentan un cuadro más fuerte que en Estados Unidos y no llegan a disipar las preocupaciones del BCE sobre la inflación.

En otras palabras, el BCE tiene la voluntad, la motivación y el peso económico para combatir contra el impacto de la inflación derivado de las alzas del petróleo. Y en lo que respecta a la Fed, los inversores no están muy seguros.

En parte, esto, al igual que la reciente correlación entre el petróleo y el dólar, se deriva de la diferencia no sólo del enfoque de política monetaria entre ambas instituciones, sino también de sus mandatos.

El BCE tiene una meta inflacionaria y la ha defendido vigorosamente. En cambio, la Reserva Federal tiene un doble mandato de alentar el empleo y evitar la inflación.

En los últimos meses, comprensiblemente ambas entidades colocaron más énfasis en el crecimiento y el empleo, lo que podría haber impulsado las alzas del petróleo.

Y si bien ha crecido el consenso de que la Fed bien podría subir las tasas antes de fin de año, recientes comentarios de las autoridades del banco central no han sido muy firmes.

El martes, el vicepresidente de la Fed Donald Kohn dijo que la perspectiva para Estados Unidos está empañada por "una gran incertidumbre," debilitando las percepciones de que el banco aplicará rápidamente un ajuste.

PETROLEO Y EURO

Por supuesto, la matriz del dólar, el petróleo y la moneda europea no siempre se ha comportado de la misma manera, y no se debería prever que continúe como está de manera indefinida.

En la década de los años '70, los "petrodólares" que ganaban los exportadores de crudo en gran medida se mantenían en bonos del Tesoro estadounidense, ofreciendo un respaldo natural para el dólar.

Pero en los últimos seis años, esos mismos países han estado mucho más dispuestos a diversificarse para salir del dólar, tanto en términos de tenencias gubernamentales de deuda como a través de inversiones de fondos soberanos en acciones y otros instrumentos.

Benedikt Germanier, estratega cambiario de UBS en Stamford, Connecticut, también señala que en años recientes la zona euro y Japón cada vez se han beneficiado más de la demanda de sus productos de parte de las naciones exportadoras de petróleo, en detrimento del dólar.

Los inversores, por ahora, parecen dispuestos a apostar que el BCE se mantendrá concentrado en al inflación, respaldando al euro con tasas de interés relativamente más altas, mientras que la Fed seguiría priorizando el crecimiento.


 
(Reuters James Saft)