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Pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos suben por tercer mes en fila

La esperanza de los inversionistas es que persista la fuerza en el ritmo de producción de las fábricas estadounidenses y que eso ayudará a sostener la recuperación económica.

24 de marzo de 2010

Washington.- Los pedidos recibidos por las fábricas estadounidenses de bienes duraderos, un indicador de cuánto están invirtiendo las compañías en sus negocios, subieron en febrero por tercer mes consecutivo, gracias a una demanda fuerte de aviones comerciales y maquinaria.

El Departamento del Comercio dijo el miércoles que los pedidos en cartera de bienes duraderos _ aquellos de precio elevado y con una vida útil de por lo menos tres años_ subió a 0,5% durante el mes pasado, ligeramente abajo del alza de 0,7% que los economistas habían pronosticado.

El aumento fue encabezado por un segundo salto en la demanda de aeronaves comerciales, un aumento de 32,7%, que siguió a un alza de 134,9% en enero en esta categoría volátil. Si se excluye el sector del transporte, las órdenes subieron un 0,9 aumento%, mucho mejor que el declive de 0,6% de enero.

El gran salto registrado en la demanda de aeronaves comerciales estuvo compensado por una caída de 1,9% en la demanda de vehículos de motor, que siguió a una caída en la categoría aun mayor, de 2,3%, en enero. Los fabricantes de automóviles todavía están luchando por salir de la recesión, que ha deprimido las ventas y que el año pasado forzó brevemente a General Motors y a Chrysler a declararse en bancarrota. Ambas resurgieron con una ayuda gubernamental de mil millones de dólares.

El repunte desde la recesión más profunda sufrida por Esttados Unidos desde la década de 1930 se ha visto ayudado significativamente por el aumento en la demanda de bienes manufacturados. Los fabricantes estadounidenses no sólo se están beneficiando de una mayor demanda interna, sino también de las crecientes órdenes procedentes de ultramar.

En parte, los pedidos procedentes del extranjero aumentaron por el retroceso registrado el año pasado por el dólar ante otras monedas. Un dólar más débil hace que los productos estadounidenses se abaraten en los mercados extranjeros.

 

AP